La vida de un polic¨ªa infiltrado hecha libro: ¡°No pegamos cinco tiros y nos cargamos a los terroristas¡±
El agente especializado en terrorismo yihadista I?aki Sanju¨¢n se adentra en una novela en las misiones de los agentes encubiertos basada en su experiencia y la de sus compa?eros
Como si del entrenamiento de James Bond se tratara, Roberto va superando pruebas. ¡°Consigue abrir una cuenta en una entidad bancaria sin documentaci¨®n¡±, es el primer reto al que le somete su instructor. ¡°Entra en una casa de este edificio y que yo te vea beber un vaso de agua por la ventana¡±, prosigue el adiestramiento. Roberto es el protagonista de Operaci¨®n Protector, una novela sobre agentes encubiertos escrita por el pu?o de alguien que normalmente trabaja en las sombras, el inspector jefe de la Polic¨ªa Nacional y experto en terrorismo yihadista I?aki Sanju¨¢n. Como en los relatos de esp¨ªas, el primer contacto entre el agente y su adiestrador se produce en la trastienda de un local en el centro de Madrid.
Parece un guion de pel¨ªcula, pero el que ha escrito y vivido parte de lo que se relata en el libro se r¨ªe: ¡°Son pruebas reales y las hay peores¡±. En la trama, que mezcla la realidad con la ficci¨®n, el agente protagonista tiene que evitar la compra de armamento por parte de los yihadistas en Espa?a. Los escenarios en los que se desarrolla son Bruselas, justo antes de los atentados de 2016 en la capital belga, Madrid como base de operaciones de la Brigada de Informaci¨®n de la Polic¨ªa Nacional, y la Costa del Sol, donde se asientan las organizaciones criminales implicadas en la misi¨®n del agente Roberto. En una de las fases de adiestramiento, el recorrido de Roberto hace sufrir al lector con las pruebas a las que le someten en la base del Grupo Especial de Operaciones, los conocidos GEO. All¨ª le someten a las torturas a las que podr¨ªa verse expuesto si fuera apresado por yihadistas.
¡°Han sido dos a?os de trabajo, he vuelto a viajar a muchos de los lugares que aparecen en el libro. Todo para descubrir y reconocer el trabajo de los agentes encubiertos, un mundo desconocido¡±, afirma Sanju¨¢n, que trabaja en la Brigada de Informaci¨®n de la Jefatura de Madrid. En su sede en el barrio de Moratalaz trabajan todos los agentes que diariamente re¨²nen informaci¨®n de grupos extremistas, redes terroristas, bandas juveniles y agrupaciones de hinchas violentos de f¨²tbol. ¡°Un infiltrado no es ning¨²n loco, todo lo contrario, tiene mucha m¨¢s madurez que la media¡±, asegura el inspector jefe.
Miedos e inseguridades
Sanju¨¢n, que no especifica por motivo obvios en cu¨¢les de las situaciones que aparecen en el libro se ha visto involucrado, s¨ª que reconoce que puede haber momentos de ¡°miedo¡± en cualquier misi¨®n, de esos en los que la gota de sudor avanza sin remedio por la frente. ¡°Un agente encubierto es un ser humano con miedos e inseguridades. Por eso hace falta mucha formaci¨®n y sangre fr¨ªa. Pero nada puede prepararte para la incertidumbre de qu¨¦ va a pasar cuando acudes a una reuni¨®n o entras a una casa¡±, indica. El libro da sorpresas, como que a veces son los propios jefes de las organizaciones criminales de tr¨¢fico ilegal los que tienen conocimiento de que hay un polic¨ªa entre sus filas. ¡°En esta trama, tanto la organizaci¨®n criminal que vende armas como la polic¨ªa tienen un enemigo com¨²n, que es el terrorismo isl¨¢mico. A los malos no les interesa que haya atentados, porque eso incrementa la alerta de seguridad y es perjudicial para sus negocios¡±, explica Sanju¨¢n.
Pero no son esos momentos de acci¨®n los fundamentales, seg¨²n explica al polic¨ªa, sino toda la preparaci¨®n previa de ese personaje de guion cinematogr¨¢fico que le va a tocar encarnar al infiltrado. En este caso, un agente que se transforma en criminal en la Costa del Sol: ¡°Mientras t¨² mantienes una reuni¨®n con uno de estos criminales, te est¨¢n haciendo fotos, estudi¨¢ndote, despu¨¦s har¨¢n preguntas sobre ti¡±. Roberto, el protagonista, incluso tiene una novia ficticia. ¡°Durante el tiempo que te conviertes en esa persona, vives en una mentira permanente que no cuentas ni a tu entorno m¨¢s pr¨®ximo¡±, resalta el polic¨ªa.
En la vida de los infiltrados, el ¨¦xito es que no haya tiros ni disparos. ¡°El final de una misi¨®n no es como en las pel¨ªculas. No entramos, pegamos cinco tiros, nos cargamos a los terroristas mientras ellos te disparan con una metralleta y ni te rozan¡±, asevera Sanju¨¢n. De hecho, el objetivo de un agente encubierto es m¨¢s bien el contrario, evitar lo que a veces parece inevitable. La polic¨ªa espa?ola tuvo que reciclarse sin soluci¨®n de continuidad y pasar de combatir los atentados de ETA, a luchar contra ese enemigo que es el terrorismo yihadista. ¡°Nos encontramos con una organizaci¨®n que ten¨ªa un aparato de propaganda muy potente, recursos financieros ilimitados y con soldados dispuestos a inmolarse¡±, apunta el inspector jefe. Frenarles es, en parte, labor de los encubiertos. En estas p¨¢ginas se puede ver c¨®mo es su doble vida, el lector tendr¨¢ que decidir qu¨¦ es cierto y qu¨¦ no.
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