Un a?o m¨¢s para juzgar a El Toba, un pederasta condenado y acusado de otras 10 agresiones

La fruter¨ªa era el lugar de atracci¨®n, en el que perpetraba presuntamente sus agresiones. Las v¨ªctimas, los amigos y conocidos de su propio hijo. Los amenazaba con hacerles da?o si contaban algo de lo que suced¨ªa en ese establecimiento al que los atra¨ªa con chucher¨ªas, caramelos y otros pretextos. Crist¨®bal L., conocido como El Toba, ten¨ªa que sentarse este mi¨¦rcoles frente al juez para responder por una decena de agresiones sexuales a menores de 16 a?os entre 2018 y 2020, pero una baja m¨¦dica de su abogada ha provocado el aplazamiento de la vista oral. El problema es que la saturaci¨®n de los tribunales madrile?os ha provocado que la causa se retrase un a?o m¨¢s, con todo lo que eso supone para las v¨ªctimas y sus familiares, que arrastran este proceso desde hace cuatro a?os.

¡°Esto supone un escal¨®n m¨¢s en la victimizaci¨®n. Cuando est¨¢s preparado para una fecha y cerrar por fin esta etapa, un retraso supone un duro rev¨¦s, y m¨¢s si es de un a?o¡±, se?ala el abogado de cinco de los menores, Juan Manuel Medina. El letrado critica ese plazo tan extenso para un proceso tan delicado. Los tribunales madrile?os superaron el a?o pasado por primera vez el mill¨®n de causas iniciadas y, a final de a?o, quedaron sin resolver 606.000, un 13% m¨¢s que el a?o anterior. Este incremento provoca que los calendarios de los juzgados est¨¦n a reventar y que causas como esta se retrasen un a?o.

Estaba previsto que las sesiones se extendieran a lo largo de tres d¨ªas y que en ellas, adem¨¢s de la declaraci¨®n del acusado, comparecieran los menores. Esto supon¨ªa una preparaci¨®n psicol¨®gica para enfrentarse a esos recuerdos que ahora tendr¨¢ que prolongarse hasta 2025, cuando ya hayan pasado entre cinco y siete a?os de las agresiones. Las 10 v¨ªctimas ten¨ªan entre 3 y 13 a?os en el momento de los hechos.

En este caso, adem¨¢s, la jueza de instrucci¨®n no acept¨® que se practicara una prueba preconstituida. Se trata de un interrogatorio previo a la vista oral a v¨ªctimas especialmente vulnerables, como los ni?os, en un entorno m¨¢s agradable que un juzgado, acompa?ados por un psic¨®logo. Est¨¢ previsto que esta sea la ¨²nica vez que declaren los menores en todo el proceso, para evitar la revictimizaci¨®n con sucesivos interrogatorios, especialmente el d¨ªa del juicio oral con el acusado en el mismo edificio o incluso la misma sala.

Una tapadera en Valdeavero

Crist¨®bal L. viv¨ªa en Valdeavero (Madrid) desde 2004, cuando en 2018 empez¨® a regentar una fruter¨ªa en la plaza del pueblo. Seg¨²n el escrito de la fiscal¨ªa, el acusado se aprovech¨® de la amistad de sus dos hijos con otros chicos del pueblo para invitarlos a su establecimiento y realizarles tocamientos por encima y debajo de la ropa. A finales de 2020, una madre acudi¨® a la Guardia Civil a denunciar que su hijo le hab¨ªa hablado de estas agresiones y esto desat¨® toda la investigaci¨®n y se descubrieron otras nueve v¨ªctimas. La fiscal¨ªa solicitaba para el acusado 98 a?os de prisi¨®n por agresi¨®n sexual, abusos ¡ªun tipo penal que exist¨ªa en el momento de los hechos¡ª y violaci¨®n. Seg¨²n las investigaciones, El Toba tambi¨¦n ense?¨® v¨ªdeos pornogr¨¢ficos a los ni?os.

El acusado estuvo en prisi¨®n preventiva por esta causa entre diciembre de 2020 y octubre de 2021. En octubre de 2023 ya fue juzgado y condenado a 19 a?os de prisi¨®n por otra agresi¨®n sexual a un menor de 15 a?os al que conoci¨® por una aplicaci¨®n de citas. Seg¨²n esa sentencia, El Toba ofreci¨® dinero al menor a sabiendas de su edad, lo llev¨® a su casa y lo viol¨®.