El s¨ªntoma Lobato: nadie doma al PSOE de Madrid
Con las heridas del ¡®Tamayazo¡¯ y del gobierno frustrado de Gabilondo a¨²n sin cerrar, la federaci¨®n regional devora secretarios generales, portavoces y candidatos
¡°Me quieren as¨ª, sin colmillos¡±. ?ngel Gabilondo, el hombre al que Ciudadanos impidi¨® gobernar Madrid con el PSOE en 2019, explicaba con esa met¨¢fora que su estilo pausado tuviera tir¨®n entre los electores. Dos a?os despu¨¦s, en 2021, con el fen¨®meno Isabel D¨ªaz Ayuso (PP) en pleno auge, Juan Lobato, su sustituto como candidato regional, ofrec¨ªa la receta opuesta: ¡°...
¡°Me quieren as¨ª, sin colmillos¡±. ?ngel Gabilondo, el hombre al que Ciudadanos impidi¨® gobernar Madrid con el PSOE en 2019, explicaba con esa met¨¢fora que su estilo pausado tuviera tir¨®n entre los electores. Dos a?os despu¨¦s, en 2021, con el fen¨®meno Isabel D¨ªaz Ayuso (PP) en pleno auge, Juan Lobato, su sustituto como candidato regional, ofrec¨ªa la receta opuesta: ¡°Tenemos que tener una contundencia mucho m¨¢s alta¡±. Desaparecidos ya los dos de la primera l¨ªnea pol¨ªtica, el contraste de sus estrategias, que acabaron adem¨¢s siendo convergentes en la moderaci¨®n, refleja los constantes cambios de guion en el PSOE de Madrid. En la ¨²ltima d¨¦cada, el partido acumula cinco secretarios generales (Tom¨¢s G¨®mez, Sara Hern¨¢ndez, Jos¨¦ Manuel Franco, Lobato y el que se elija ahora), adem¨¢s de cuatro gestoras. Tambi¨¦n, seis portavoces en la Asamblea (G¨®mez, Franco, Gabilondo, Hana Jalloul, Lobato, y ahora Jes¨²s Celada). Y tres candidatos a la alcald¨ªa de la capital (Antonio Miguel Carmona, Pepu Hern¨¢ndez y Reyes Maroto). Un vaiv¨¦n que seguir¨¢ ahora con el previsible aterrizaje del ministro ?scar L¨®pez, y que refleja que nadie logra domar al PSOE de Madrid.
¡°Est¨¢n siendo d¨ªas muy dif¨ªciles, una vez m¨¢s, porque por desgracia la federaci¨®n de Madrid lleva convulsa mucho tiempo¡±, describe un alcalde socialista. ¡°Lo que hay que hacer es que en Madrid se deje cuajar un proyecto, unos equipos¡±, reclama. ¡°Eso no se hace en cuatro a?os¡±, diagnostica. ¡°No se pueden tener convulsiones cada cuatro a?os, y que las primarias sean una guerra pol¨ªtica en lugar de una fiesta de la democracia¡±.
Esas tres frases tocan todas las teclas de la angustia emocional y la tensi¨®n interna que marcan el d¨ªa a d¨ªa del PSOE de Madrid en lo que va de siglo XXI. El partido nunca se ha recuperado del Tamayazo, la traici¨®n de dos diputados socialistas (Eduardo Tamayo y Mar¨ªa Teresa S¨¢ez) que impidieron gobernar al PSOE de Rafael Simancas en 2003. Con esa herida siempre abierta, pues facilit¨® que el PP haya mantenido el tim¨®n de la regi¨®n durante m¨¢s de 25 a?os consecutivos, la segunda d¨¦cada del siglo propici¨® otra que a¨²n supura: en 2019, los socialistas ganaron las elecciones auton¨®micas por primera vez desde 1987, pero Ciudadanos les impidi¨® gobernar al preferir aliarse con el PP.
En medio, antes y ahora, los cambios de candidatos y dirigentes han sido constantes, y las luchas internas, sangrientas. Por eso la direcci¨®n federal de Ferraz aspira ahora a que la sustituci¨®n de Lobato se logre a trav¨¦s de una candidatura ¨²nica encabezada por el ministro L¨®pez. De que la transici¨®n sea pac¨ªfica se encargar¨¢ una gestora dominada por afines a Pedro S¨¢nchez, y que a su vez representa en parte las mil almas por dominar del PSOE regional: la simanquista (con Isaura Leal); la de los alcaldes del cintur¨®n rojo (con representantes de las regidoras de Getafe y Alcorc¨®n); la del corredor del Henares; o la de Madrid ciudad (con el exsecretario general regional y exdelegado del gobierno Jos¨¦ Manuel Franco).
¡°El viernes, al final de la intervenci¨®n de Isaura en una reuni¨®n de la gestora con delegados, la gente se levant¨® a aplaudir. Todos, de todas las familias¡±, aseguran en la delegaci¨®n del PSOE de Madrid que ha acudido al 41? Congreso Federal en Sevilla. ¡°Isaura hab¨ªa hecho un llamamiento a la unidad, record¨® que nos necesitamos todos, y tambi¨¦n la importancia de Madrid¡±, a?aden. ¡°La gente est¨¢ todav¨ªa en estado de shock y perplejidad¡±, cierran sobre la salida de Lobato, dimitido al revelar Abc que acudi¨® al notario para registrar un intercambio de mensajes con un cargo de Moncloa, Pilar S¨¢nchez Acera, en el que se le hac¨ªa llegar un email relacionado con el caso de la pareja de Isabel D¨ªaz Ayuso. Un s¨ªntoma de desconfianza hacia sus propias siglas que le ha costado el cargo a un pol¨ªtico que apenas llevaba tres a?os al frente del PSOE de Madrid. Por un motivo u otro, nadie se asienta al frente de esta federaci¨®n.
Elvira Lindo, recuerdan en el PSOE, escribi¨® una vez en EL PA?S un art¨ªculo titulado Bicho Raro. Corr¨ªa 2010, y los socialistas de Madrid afrontaban un nuevo cambio de cartel electoral.
¡°Me le¨ª a conciencia, con deseos de entender, un reportaje laborioso que se public¨® sobre las distintas familias socialistas madrile?as y acab¨¦ con la cabeza modorra: los acostistas, los guerristas, los... No llegu¨¦ a saber qu¨¦ es lo que persigue cada grupo, salvo, por descontado, el poder¡±, escrib¨ªa. Ahora el consenso interno es que el problema no han sido las divisiones, sino un error no forzado de Lobato, aunque el equipo de S¨¢nchez ya le ten¨ªa tomada la matr¨ªcula por desligarse de propuestas clave del gobierno o incluso plantear un horizonte sin el presidente al frente del partido, y sustituido por una mujer. De ah¨ª que el posible aterrizaje del ministro L¨®pez se hubiera filtrado antes de que estallara la pol¨¦mica por la que dimiti¨® el yaexsecretario general de Madrid. La conclusi¨®n, en ambos casos, es la misma: otro proyecto que se queda a medio camino.
¡°Cambiar tanto de caballo no es inteligente, es incluso suicida, ah¨ª est¨¢ el ejemplo de la paciencia que tuvo el PP con Alberto Ruiz-Gallard¨®n y Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano... pero los cambios tampoco lo explican todo¡±, argumenta un pol¨ªtico que conoce bien las entra?as de la federaci¨®n madrile?a. ¡°O nos ocupamos de entender la sociedad en la que vivimos, sin apriorismos, o entendemos c¨®mo puede penetrar la derecha y la extrema derecha en lugares que ten¨ªan tradici¨®n obrera, o el candidato da igual¡±, sigue, compartiendo el an¨¢lisis de Lobato de que el PSOE deb¨ªa aderezar su discurso socialdem¨®crata en Madrid con gui?os modernos al centro. ¡°Y por eso, por s¨ª mismo, Oscar L¨®pez no solucionar¨¢ esto¡±.
Una opini¨®n que no comparte una fuente de peso en la delegaci¨®n enviada por Madrid al congreso del PSOE en Sevilla, donde se da por hecho que el ministro, adem¨¢s de secretario general regional, ser¨¢ candidato para las auton¨®micas de 2027: ¡°B¨¢sicamente, L¨®pez aporta experiencia de Gobierno y experiencia org¨¢nica, cercan¨ªa al presidente del gobierno, como jefe de gabinete y luego de ministro, lo que a su vez le aporta conocimiento del partido, conocimiento de las instituciones...¡±
Pero alcanzar el poder en Madrid, donde los socialistas no gobiernan desde el cuatrienio 1991-1995, parece tan lejano como siempre: D¨ªaz Ayuso y Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez Almeida, los dos candidatos a los que eligi¨® Pablo Casado en 2019 pensando en un batacazo electoral, ya disfrutan de una c¨®moda mayor¨ªa absoluta. Y adem¨¢s ahora el PSOE tiene un competidor en la izquierda que no ten¨ªa antes: M¨¢s Madrid, que lidera la oposici¨®n en la Asamblea y en el Ayuntamiento de la capital.
¡°Ahora nos va a costar¡±, reconoce una fuente que conoce la estrategia para los primeros pasos de la nueva etapa. ¡°Pero para las elecciones [de 2027] quedan m¨¢s de dos a?os. Hay que integrar a todo el mundo. Si intentas ignorar a alguien, en Madrid te va mal¡±, diagnostica. ¡°Si se hace una oposici¨®n buena, se puede recuperar terreno¡±, apuesta.
Por ahora, y tras la salida de Lobato, Jes¨²s Celada ocupar¨¢ interinamente el puesto del portavoz en la Asamblea. Con ¨¦l al frente, el PSOE vivir¨¢ un periodo de transici¨®n, puesto que la elecci¨®n definitiva tendr¨¢ que esperar a la llegada de L¨®pez, que buscar¨¢, dice una fuente socialista, ¡°sinton¨ªa absoluta¡± con su contraparte en el Parlamento regional. La raz¨®n es sencilla: ser¨¢ su voz frente a Ayuso, ya que el ministro no es diputado regional, y no podr¨ªa medirse cada semana con la presidenta en la Asamblea. A la espera de si se asienta o no, Celada ha protagonizado el sexto cambio de portavoz en diez a?os. El s¨ªntoma de que hasta ahora nadie ha podido domar al PSOE de Madrid.