Profesores, alumnos y pol¨ªticos se movilizan contra la asfixia de Ayuso a las universidades: ¡°La uni no se vende, la uni se defiende¡±
Cientos de personas se manifiestan a las puertas de la Asamblea, mientras dentro los diputados se quejan de las cuentas regionales
Las protestas retumban este jueves dentro y fuera de la Asamblea de Madrid. A las puertas del Parlamento se citan cientos de profesores y estudiantes para protestar contra la asfixia econ¨®mica a la que someten los Presupuestos de 2025 a las seis universidades p¨²blicas madrile?as. ¡°?La uni no se vende, la uni se defiende!¡±, gritan. Dentro, en el hemiciclo, los pol¨ªticos de izquierdas protestan durante el debate de las enmiendas a la totalidad del proyecto de cuentas p¨²blicas del PP para el pr¨®ximo a?o: ¡°Ayuso va a pasar de ser alumna ilustre de la Complutense a ser la enterradora de la universidad¡±, se queja Manuela Bergerot, de M¨¢s Madrid. Da igual que la presi¨®n de los rectores haya logrado que Ayuso ceda m¨ªnimamente y aumente en 47,3 millones de euros el presupuesto universitario. No importa que el Ejecutivo, asediado por las cr¨ªticas, rectifique y se abra a firmar con el gobierno un convenio para contratar a m¨¢s de 1.000 profesores. La realidad es que las cuentas regionales apenas recogen un aumento del 4,2% de la inversi¨®n, cuando los gestores de los campus ped¨ªan un incremento del 18%. Y as¨ª las protestas siguen dentro y fuera de la Asamblea.
Cientos de personas se concentran con meg¨¢fonos, pancartas y soflamas para exigir mayor financiaci¨®n destinada a las universidades p¨²blicas madrile?as. Lo hacen a menos de 40 pasos de la Asamblea de Madrid, mientras all¨ª dentro se debate el futuro de miles de profesores y alumnos. Algunos estudiantes muy concienciados con la causa llegan con mucha antelaci¨®n a la convocatoria. Ainhoa Jim¨¦nez, de 23 a?os, es de las primeras. Est¨¢ cursando un m¨¢ster en Literatura y Estudios Hisp¨¢nicos en Universidad Aut¨®noma de Madrid. ¡°La facultad se cae a cachos, literalmente¡±, cuenta mientras muestra una foto en su tel¨¦fono en la que se ve un pasillo con un agujero enorme en el techo. En la otra mano sujeta una pancarta todav¨ªa enrollada.
La gente llega de golpe y puntual. Son las 11.00. La Polic¨ªa despliega un cord¨®n de seguridad que no permite a la los manifestantes cruzar la calle. La acera es ancha, pero no lo suficiente para tantas personas. Los portavoces de Comisiones Obreras y de UGT se colocan en primera fila. Delante de ellos, una calle de dos carriles de los cuales solo uno est¨¢ cortado. Su pancarta y los polic¨ªas que empujan a quien intenta adelantarse un poco son lo ¨²nico que los separa de los coches que cruzan.
Se escuchan los primeros c¨¢nticos: ¡°La profe luchando tambi¨¦n est¨¢ ense?ando¡±. El problema va m¨¢s all¨¢ del estados de las infraestructuras. Pasa por la precarizaci¨®n del sector. Cristina Cuenca lleva 15 a?os como profesora asociada en el departamento de Antropolog¨ªa Social y Psicolog¨ªa de la Universidad Complutense. ¡°Cobro 600 euros al mes y tengo que ir a la facultad cuatro d¨ªas a la semana¡±, lamenta. ¡°El salario de un asociado por hora es menor al que cobra un trabajador del Burger King¡±, a?ade.
Diego Piera (19 a?os), que estudia Ciencias Ambientales en la UAM, y sus compa?eros, tienen miedo de que se suspenda su grado por falta de financiaci¨®n. Est¨¢n en Vallecas, donde se sit¨²a la Asamblea, porque quieren que se les escuche, pero no son muy optimistas. ¡°Pinta feo¡±, se?ala.
Paula Mart¨ªn va a la misma clase que Piera. Quiere dedicarse a la investigaci¨®n, pero le preocupa que la falta de medios le obligue a irse al extranjero. ¡°Es una pena que mucha gente que se ha formado aqu¨ª tenga que irse a otro pa¨ªs por la falta de financiaci¨®n. Toda esa inversi¨®n que ha hecho el Estado se pierde¡±, denuncia.
Cada vez llega m¨¢s manifestantes y no hay espacio para todos. Los de detr¨¢s empujan a los de delante. Alguien cae a la calle y la polic¨ªa empuja con violencia para devolverle a su sitio. Se escucha un silbido grave como reproche. ¡°M¨¢s educaci¨®n, menos polic¨ªas¡±, entonan los manifestantes. Cada vez m¨¢s personas pasas la l¨ªnea de seguridad porque no hay espacio. Son las 13.13, ha pasado casi una hora y cuarto desde que empez¨® la manifestaci¨®n, y los agentes al fin cortan la calle. Los que est¨¢n all¨ª han ganado cinco metros y ya pueden respirar.
Por la zona se dejan ver algunos pol¨ªticos de M¨¢s Madrid. Su portavoz en el Ayuntamiento de la capital, Rita Maestre, y la diputada del mismo partido en la Asamblea, Manuela Berguerot, llegan acompa?adas por algunos concejales m¨¢s. La gente les aplaude. Dicen que a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, este tema le va a complicar la legislatura. Pero la baronesa conservadora tiene mayor¨ªa absoluta, por lo que puede hacer y deshacer a su antojo: por eso las protestas de la izquierda rebotan en el vac¨ªo en el pleno de la Asamblea, y por eso las tres enmiendas a la totalidad del proyecto de presupuestos (registradas por M¨¢s Madrid, PSOE y Vox) son rechazadas de un plumazo: no hace siquiera falta que Ayuso se acerque al Parlamento regional a votar.
¡°Para la se?ora Ayuso, su desprecio por nuestras instituciones y servicios p¨²blicos hoy se condensa en las universidades p¨²blicas madrile?as¡±, se queja antes, durante el debate, Bergerot. ¡°Ha utilizado la universidad para una batalla partidista m¨¢s: eso es su comisi¨®n show sobre la UCM, un intento chusco de reforzar el frente medi¨¢tico-judicial contra el gobierno de Espa?a¡±, dice sobre la investigaci¨®n sobre el supuesto trato de favor recibido de la Complutense por parte de Bego?a G¨®mez, la esposa de Pedro S¨¢nchez. ¡°El siguiente paso son los Presupuestos, un plan de desmantelamiento de la universidad p¨²blica tal y como lo conocemos¡±, denuncia. ¡°Con estos Presupuestos, Ayuso va a pasar de ser alumna ilustre de la Complutense a ser la enterradora de la universidad¡±.
Pero el PP niega la mayor a trav¨¦s de la consejera de Econom¨ªa, Hacienda y Empleo, Roc¨ªo Albert, que se enroca, y enuncia una defensa de la universidad p¨²blica que no se reproduce en los 28.662 millones de las cuentas p¨²blicas que ella misma ha dise?ado.
¡°Las universidades tienen 1.060 millones de euros que van a crecer a 1100¡å, defiende la consejera de Ayuso. ¡°Son algo muy importante y trascendental para nosotros¡±, a?ade. ¡°Sabemos que ah¨ª est¨¢ el futuro de Espa?a¡±. Es lo ¨²nico en lo que coinciden este jueves los pol¨ªticos del PP y quienes protestan dentro y fuera de la Asamblea en defensa de la universidad p¨²blica.
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