Isabel Pantoja, ante su semana m¨¢s decisiva: concierto, nuevo disco y televisi¨®n

En cuesti¨®n de pocos d¨ªas, Isabel Pantoja se enfrenta a uno de sus momentos m¨¢s importantes de los ¨²ltimos a?os. Despu¨¦s de una ¨¦poca complicada en lo laboral y lo personal, la cantante ve como estos primeros d¨ªas de marzo pueden sen el momento definitivo para darle un giro total a su carrera, e incluso a su vida.

Estos son d¨ªas de cambio para Pantoja. El primero y principal est¨¢ en su m¨²sica. El 14 de febrero lanz¨® la canci¨®n Enam¨®rate, la primera del disco hom¨®nimo que ver¨¢ la luz el pr¨®ximo oto?o. Un tema compuesto por Juan Gabriel y que ha contado con la producci¨®n art¨ªstica de Luis Cobos, como ella misma explic¨® en enero a trav¨¦s de su perfil de Instagram. Juan Gabriel y Cobos es de lo poco que mantiene de su esencia. La melod¨ªa de la canci¨®n sigue siendo del estilo de la tonadillera, sobre todo en su arranque, pero luego busca tener toques m¨¢s modernos, de bolero, de canci¨®n dram¨¢tica. De hecho, para este nuevo comienzo ha firmado con un nuevo sello, Altafonte, tras muchos a?os trabajando de la mano de la discogr¨¢fica Universal.

Tambi¨¦n en el videoclip, lanzado el mismo d¨ªa 14, Pantoja busca una imagen m¨¢s moderna, como ya adelant¨® en la car¨¢tula del disco, con un look a lo Beyonc¨¦. Lejos de los vestidos de corte flamenco y de las batas de cola, Pantoja aparece cantando Enam¨®rate en un gran teatro vac¨ªo, vestida con un traje negro de lentejuelas negras con solapas de raso y el pelo recogido en una coleta. En el escenario la acompa?an siete artistas vestidas de gala que tocan el piano, la trompeta o el viol¨ªn. En sus 15 primeros d¨ªas ha rozado las 230.000 visualizaciones.

El gran momento de la cantante llegar¨¢ este viernes, 6 de marzo, cuando vuelva a pisar el Wizink Center de Madrid, antiguo Palacio de los Deportes, un recinto en el que ya dio un gran recital en febrero de 2017. Ya hab¨ªa cantado en noviembre de 2016 en el Teatro Real de Aranjuez, tras salir de la c¨¢rcel, y despu¨¦s pas¨® por Madrid, Barcelona y Sevilla. Ahora vuelve a uno de los principales escenarios espa?oles para presentar este trabajo con una imagen que busca refrescarse y renovarse y donde se mezclar¨¢n esas batas de cola que encandilan a sus seguidores con los nuevos trajes de chaqueta. Pantoja a¨²n tiene entradas por vender. Bastantes, adem¨¢s, y de todos los precios: desde 50 hasta 140 euros.

La m¨²sica no es el ¨²nico proyecto profesional que ilusiona a la sevillana, que en agosto cumplir¨¢ 64 a?os. Hace casi un a?o firm¨® un jugoso contrato con Mediaset que la instal¨®, a ella y a su prole, en los plat¨®s de Telecinco: su hija Isa colabora en El programa de Ana Rosa; su sobrina Anabel en S¨¢lvame y su nuera Irene en Viva la Vida, mientras que su hijo Kiko Rivera se pasea por todo espacio que se precie. Para ella, el primer paso fue entrar en Supervivientes, programa que la volvi¨® a colocar en el candelero y que logr¨® que alcanzara otros p¨²blicos. Pero ese contrato tiene ahora un nuevo giro: el que la ha convertido en jurado del nuevo programa de talentos infantiles Idol Kids. El espacio llegar¨¢ en breve a Telecinco y ser¨¢ presentado por Jes¨²s V¨¢zquez. Pantoja ser¨¢ una tercera parte del jurado, que completar¨¢n la cantante Edurne y el m¨²sico Carlos Jean.

Tras a?os de dificultades y deudas, Isabel Pantoja parece saborear las mieles del ¨¦xito. Y sobre todo en el ¨¢mbito personal. Tras las peleas que han enfrentado a sus hijos por las revistas y los plat¨®s de media Espa?a, la cantante disfruta ahora de la reconciliaci¨®n de Kiko e Isa. El hijo present¨® su nueva canci¨®n, Tuboescape, (cuyo estribillo reza ¡°Maletero/Tuboescape/Puerta, puerta¡±) en el programa en el que ahora colabora la hija, y all¨ª se produjo por fin el encuentro de los dos j¨®venes. Kiko le agradeci¨® a su hermana que estuviera a su lado tras la reciente muerte de su suegra. ¡°Es en los momentos m¨¢s duros cuanto te das cuenta que hemos malgastado el tiempo¡±, reconoc¨ªa el DJ. Ahora parece que todos quieren volver a recuperar ese tiempo, empezando por la propia matriarca.