¡°A los artistas les impone mucho dar el salto al Wizink Center¡±

El Wizink Center, antiguo Palacio de los Deportes, alcanza esta noche, con la actuaci¨®n de Dani Mart¨ªn, su concierto n¨²mero 500 desde que fue reinaugurado en 2005, despu¨¦s de que un incendio arrasara el recinto. Desde que Paz Aparicio (Madrid, 49 a?os) empez¨® a dirigirlo en 2014 ¡ªtras casi una d¨¦cada como directora comercial de espacio¡ª, grupos como U2, Beyonc¨¦, AC/DC o Rihanna han llenado sus gradas. ¡°Los artistas no tienen ahora tantas rarezas como antes¡±, asegura alguien que sabe de lo que habla.

?Qu¨¦ sensaci¨®n le deja el medio millar de conciertos?

Creo que, desde 2014, nuestro gran ¨¦xito ha sido el cambio de formato: antes, no te quedaba m¨¢s remedio que llenar el Wizink ¡ªy son 15.500 espectadores¡ª. Por eso, dar el salto y actuar aqu¨ª impon¨ªa bastante: muchos grupos no se atrev¨ªan. Ahora, que tambi¨¦n tenemos formatos con capacidad para 3.000, 5.000 o casi 9.000 espectadores hemos logrado seducir a grupos como Placebo, Bastille, Izal, Love of Lesbian...

Y... ?alguno de esos grupos llena m¨¢s de lo que piensan?

S¨ª, a veces ocurre: empiezan con un formato peque?o, pero como Madrid responde tan bien a la venta de entradas se van adaptando. Por eso nos adaptamos nosotros tambi¨¦n. En 2015 Vetusta Morla contrat¨® un aforo de 5.000 y lo vendieron todo. Acabaron cerrando dos conciertos m¨¢s, uno de ellos de 8.900 personas.

?Qu¨¦ se esconde en las bambalinas de un macroconcierto?

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Mucho trabajo. Tenemos un equipo de d¨ªa y otro de noche. Tras un espect¨¢culo, a las 4.00 de la ma?ana puede haber 300 personas trabajando para adaptar el recinto y que a la ma?ana siguiente se pueda celebrar otro concierto o evento. Ver c¨®mo trabajan tambi¨¦n es un espect¨¢culo.

Todo a contrarreloj.

Medimos mucho los tiempos. A¨²n as¨ª, ocurren imprevistos. Una vez pens¨¢bamos que Kiss no iba a poder celebrar un concierto: ven¨ªan de Barcelona con cuatro horas de retraso. Empezaron a montar tarde, a las 18.00 y cre¨ªamos que no podr¨ªamos abrir puertas. Finalmente, solo tuvimos que retrasar media hora el inicio del concierto. Con un buen equipo de profesionales, todo acaba saliendo.

?C¨®mo describir¨ªa la relaci¨®n de Madrid con este espacio?

Los madrile?os sienten el recinto como muy suyo, est¨¢n contentos de tenerlo. Estoy convencida de que tambi¨¦n est¨¢n orgullosos de tenerlo en su ciudad. Adem¨¢s genera un importante impacto econ¨®mico.

?C¨®mo definir¨ªa el prestigio musical de la capital?

Desde la movida madrile?a, existe una trayectoria musical tremenda. Grupos como Pearl Jam ven¨ªan en sus inicios a actuar a peque?as salas madrile?as, para unas 60 personas. Desde esa ¨¦poca, se genera una interesante cultura musical, que tambi¨¦n es muy exigente pues no pasan una.

?Cu¨¢l es su sitio preferido del Wizink Center?

Sin duda, la pista. Nosotros el d¨ªa de concierto o de evento estamos dando vueltas, porque hay muchos frentes que atender. Pero siempre bajo a la pista en alg¨²n momento y me quito la acreditaci¨®n. El ambiente es indescriptible?y muchas veces acabo bailando.

?Ha visto muchas locuras en ese ambiente?

Imag¨ªnate... Hay gente que se ha pasado cinco semanas en la puerta para ver un concierto de Rebelde Way. Les sacamos agua, comida, y les cuidamos todo lo posible. Para la gente m¨¢s joven, la diversi¨®n comienza cuando se acampan en la puerta.

En eventos tan multitudinarios se vivir¨¢ tambi¨¦n alg¨²n mal momento.

Es poco habitual, pero da mucha pena cuando tenemos que desalojar a alguien que bebe m¨¢s de lo debido o que est¨¢ molestando, Tambi¨¦n es una l¨¢stima cuando alguien no puede pasar porque ha comprado sus entradas en reventa y son falsas. Recuerdo una pareja de gallegos que se gastaron 600 euros para ver un concierto de Sabina. Hab¨ªan pagado hotel, viaje¡­ y se quedaron en la calle. Es muy triste, por eso tratamos de concienciar a la gente para que solo compre en puntos de venta oficiales.