La viuda de Michael Robinson: ¡°Estoy orgullosa de ¨¦l, ha dejado huella"

Michael Robinson y Christine Anne, su esposa, compartieron juntos media vida. Ella fue quien acompa?¨® a un entonces joven futbolista en su traslado a Espa?a para seguir con su carrera profesional, y ambos criaron juntos a sus dos hijos, Liam, de ahora 33 a?os, y Aimee, que acaba de cumplir 28. Y ha sido ahora Christine Anne quien ha hablado por primera vez en tres semanas, desde el fallecimiento del exjugador y comentarista deportivo el pasado 28 de abril, para dar gracias.

Christine Anne Robinson ha querido expresar su agradecimiento a toda la sociedad por el cari?o que ha trasladado a su familia a causa de la muerte de Michael Robinson. Por ello, ha hablado con Susanna Griso en Espejo P¨²blico y a ella le ha querido transmitir su mensaje, pese a que, como ella misma ha dicho, no le ha resultado sencillo el hecho de ponerse delante de una c¨¢mara.

Desde su casa de Marbella ¡ªdonde falleci¨® el exfutbolista¡ª, Christine Anne Robinson se expresaba emocionada. ¡°Estoy orgullosa de ¨¦l porque ha dejado huella y doy las gracias a todos por el apoyo¡±, explicaba, afirmando sentirse ¡°muy afortunada¡± del compa?ero que le ha dado la vida. ¡°Me siento muy orgullosa de ¨¦l, ha dejado huella¡±.

¡°Michael ha vivido su enfermedad como ¨¦l ha querido¡±, relat¨®. "Siempre ha dicho que si se mor¨ªa ma?ana, hab¨ªa tenido una vida plena y feliz. Ha hecho todo lo que quer¨ªa hacer; eso consuela¡±, contaba, explicando que su adi¨®s ¡°ha sido muy triste, pero muy bonito¡±. Seg¨²n cont¨®, sus ¨²ltimas semanas pasaron ¡°entre risas y l¨¢grimas¡±.

Sobre el cari?o de todo el mundo hacia Michael y el resto de la familia, Anne Christine afirmaba: ¡°Ha sido tremendo¡±. Por ello agradec¨ªa "a todo el p¨²blico por la avalancha de amor que hemos recibido hacia Michael¡±.

El matrimonio llevaba casado 40 a?os y adem¨¢s de sus dos hijos ten¨ªan una nieta. Se conoc¨ªan desde su ni?ez, ya que coincidieron en el colegio, como cont¨® Michael Robinson en su libro de memorias. Sin embargo, no fue hasta a?os m¨¢s tarde, cuando ¨¦l ya era un jugador de ¨¦xito, cuando volvi¨® a coincidir con ella y se enamoraron. ¡°Yo viv¨ªa entonces en Brighton y me recuerdo ya enamorado¡±, explicaba en aquellas p¨¢ginas. ¡°Me resultaba elegant¨ªsima, se sonrojaba con cada elogio, rega?aba las salidas de tono, era una aut¨¦ntica lady. No hab¨ªa conocido a nadie como ella¡±. Robinson no dudaba en aprovechar entrevistas y charlas para tener bellas palabras para su esposa, como confesaba en una entrevista en El Mundo en 2005: ¡°Ha sido mi amante, mi compa?era, mi amiga y mi directora¡±