Mette Marit, la princesa que abri¨® las puertas a Letizia Ortiz y a una nueva generaci¨®n de la realeza

Sus inicios no fueron f¨¢ciles, pero los pr¨ªncipes Haakon y Mette-Marit de Noruega han demostrado que su amor ha sido m¨¢s fuerte que todos los prejuicios que se encontraron por el camino. Especialmente por el pasado de ella, uno muy ¡°salvaje¡± como la propia princesa defini¨®. Una mujer que romp¨ªa con todos los c¨¢nones y protocolos establecidos al aportar un hijo de un novio que cumpli¨® condena por tr¨¢fico de drogas y participar en un programa para buscar marido se convert¨ªa el 25 de agosto de 2001 en la consorte del heredero al trono de Noruega. Y ahora, 19 a?os despu¨¦s, celebran su aniversario asentados entre el clamor popular y la aceptaci¨®n de toda la familia real.

El matrimonio ha querido celebrar la fecha con una original publicaci¨®n en la cuenta de Instagram de la princesa con una imagen de ambos con un mont¨®n de globos en forma de coraz¨®n, abrazados y sonrientes. ¡°El d¨ªa ya est¨¢ aqu¨ª¡±, escribe Mette-Marit junto a un coraz¨®n en una publicaci¨®n que ya ha recibido miles de me gusta y cientos de comentarios con buenos deseos para la pareja.

Una celebraci¨®n que pone en evidencia que la pareja ha salido fortalecida de todas las dificultades que ha tenido a lo largo de estas casi dos d¨¦cadas junta como la oposici¨®n inicial de los reyes Harald y Sonia de Noruega que no ve¨ªan con buenos ojos no solo que Mette Marit fuera madre soltera, sino tampoco su pasado como camarera y su afici¨®n por la vida nocturna. Finalmente claudicaron y Mette-Marit se convirti¨® en la primera mujer sin or¨ªgenes aristocr¨¢ticos en entrar en los salones de la vieja instituci¨®n mon¨¢rquica. Ella fue quien abri¨® las puertas a futuras princesas algunas de ellas ahora ya reinas. Poco despu¨¦s de su enlace, M¨¢xima Zorreguieta se casaba con Guillermo de Holanda; Mary Donaldson con Federico de Dinamarca; Camilla Parker Bowles con Carlos de Inglaterra; y Letizia Ortiz con Felipe de Borb¨®n. Todas, igual que la entonces novia de Haakon, ten¨ªan un pasado inusual hasta ese momento para una princesa.

El entonces pr¨ªncipe de Asturias y hoy rey de Espa?a, Felipe VI, vivi¨® esa transici¨®n en primera persona. En esa boda en Noruega se produjo la presentaci¨®n de Eva Sannum, invitada al enlace por la amistad que le un¨ªa a Mette Marit y Hakoon, y con quien sal¨ªa el heredero espa?ol desde hac¨ªa tres a?os. Sin embargo, meses despu¨¦s el hijo de Juan Carlos I se ve¨ªa obligado a romper su noviazgo tras las presiones de las instituciones m¨¢s conservadoras que no ve¨ªan en esta estudiante que hac¨ªa pinitos en el mundo de la moda a la futura reina de Espa?a. Sin embargo, tres a?os despu¨¦s don Felipe se promet¨ªa con Letizia Ortiz, una periodista divorciada.

Aunque al principio cost¨® derribar las barreras que levantaron tanto el pueblo noruego como algunas instituciones, Mette Marit supo ganarse el favor popular a base de empe?o y trabajo. Cambi¨® de estilismo, retom¨® sus estudios abandonados por su temprana maternidad y, poco a poco, fue construyendo su imagen de princesa del siglo XXI. Todo el dinero de sus regalos de boda fue a parar a un fondo humanitario que se reparti¨® entre causas sociales; en 2006 fue nombrada por la ONU representante especial para campa?as contra el sida; son famosos sus discursos de apoyo al colectivo gay y es una gran defensora del medioambiente, actividad que ha reflejado en un par de ocasiones poniendo a subasta su lujoso fondo de armario cuyos beneficios han ido a parar a organizaciones que promueve la concienciaci¨®n sobre la conservaci¨®n de la naturaleza y el consumo responsable.

No en vano, a lo largo de estos 19 a?os, el matrimonio tambi¨¦n ha tenido que convivir con informaciones sobre crisis puntuales, algunas incluso apuntaban a su separaci¨®n, que toman fuerza con las ausencias de la princesa de Noruega que, por lo general, se debe a su delicado estado de salud. Tras una operaci¨®n en una hernia cervical que la mantuvo de baja durante un tiempo hace unos a?os, Mette Marit ha visto reducida su agenda oficial en los ¨²ltimos a?os debido a la fibrosis pulmonar cr¨®nica que padece. ¡°Ahora me siento m¨¢s cansada que antes y tengo que cuidarme m¨¢s de lo que sol¨ªa hacer¡±, dijo a una televisi¨®n noruega el pasado octubre.

La pareja, que ha dejado atr¨¢s toda pol¨¦mica, ha sabido encontrar su estabilidad y junto a Marius, el hijo de 22 a?os que Mette Marit tuvo anteriormente y que queda fuera de la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono, y sus dos hermanos, Ingrid Alexandra, de 15 a?os, y Sverre Magnus, de 13, contin¨²an con su vida de nuevos royals.