La boda sin fin de la princesa Mako de Jap¨®n

La historia de la boda de la princesa Mako de Jap¨®n empieza a parecerse a aquellas leyendas medievales en las que los prometidos deb¨ªan sortear numerosas pruebas antes de recibir, por fin, el permiso de la familia real para casarse. La sobrina mayor del emperador Naruhito deb¨ªa haberse desposado hace ya dos a?os con su prometido, el plebeyo Kei Komuro, pero ha vuelto a anunciar un nuevo aplazamiento, sin fecha en el horizonte. Pese a todo, insiste, el enlace se acabar¨¢ celebrando: ¡°Somos insustituibles el uno para el otro¡±, ha asegurado la princesa.

Los dos j¨®venes, de 29 a?os, se conocieron en 2012 durante su primer a?o de universidad, en la Universidad Internacional Cristiana de Tokio. Despu¨¦s continuaron sus carreras por separado, ella en Edimburgo y ¨¦l en California. Pero, pese a la distancia, su relaci¨®n continu¨®, y Komuro le propuso matrimonio a la princesa en 2013. Anunciaron, sonrientes y formales, su compromiso en una comparecencia ante los medios de comunicaci¨®n en 2017. La idea inicial era haberse casado en noviembre de 2018. Con la boda, como estipulan las normas japonesas, Mako hubiera dejado de pertenecer a la familia real.

Pero en febrero de 2018 la Casa Imperial japonesa anunci¨® el aplazamiento hasta 2020. Aunque no proporcion¨® entonces una raz¨®n clara, los medios nipones atribuyeron la decisi¨®n a una disputa econ¨®mica en la familia del novio. Concretamente, su madre y su expadrastro se peleaban por los costes de la educaci¨®n del joven, que el expadrastro hab¨ªa pagado. Entonces, la princesa declar¨® que se hab¨ªa ¡°dado cuenta de que faltaba tiempo para completar todos los preparativos necesarios para la boda¡±.

Dos a?os m¨¢s tarde, mediante un comunicado, Mako, hija del pr¨ªncipe Akishino, ha confirmado que la ceremonia contin¨²a aplazada de momento, aunque no abandonada. Esta vez, la pandemia de coronavirus se ha sumado a las dificultades para anunciar una fecha precisa.

¡°A¨²n es dif¨ªcil anunciar algo espec¨ªfico en estos momentos, pero consultaremos con nuestras familias para seguir adelante con la boda¡±, ha indicado la princesa en un comunicado distribuido por la Casa Imperial, en el que deja saber que su intenci¨®n sigue siendo la de contraer matrimonio con Komura.

¡°Cada uno somos para el otro alguien en quien apoyarnos, en los momentos felices y en los momentos duros. Por tanto, el matrimonio es una elecci¨®n que consideramos necesaria para vivir alimentando y protegiendo nuestros sentimientos¡±, explica el comunicado imperial.

El anuncio de la princesa llega d¨ªas despu¨¦s de que el pr¨ªncipe Akishino fuera proclamado formalmente heredero del trono que ocupa su hermano mayor, Naruhito, en una solemne ceremonia en el palacio imperial en Tokio. El a?o pasado, Akishino hab¨ªa instado a su hija, en unas declaraciones p¨²blicas, a ¡°anunciar algo¡± sobre los planes de boda. Los Komuros, ya hab¨ªa dicho, deb¨ªan resolver sus problemas antes de celebrar la posible ceremonia, puesto que ¡°una boda es algo que mucha gente debe festejar¡±.

El comunicado subraya que los padres de la joven, Akishino y la princesa Kiko, respetan el deseo de su hija de contraer matrimonio. Tambi¨¦n expresa el agradecimiento de Mako al emperador y su esposa, la princesa Masako, as¨ª como a sus abuelos, los emperadores em¨¦ritos Akihito y Michiko, por ¡°respetar mis sentimientos y observar discretamente¡± la situaci¨®n.

Pero asimismo reconoce que no todo el mundo est¨¢ de acuerdo con que la boda se lleve adelante. ¡°Los sentimientos de alguna gente son contrarios a nuestros esponsales¡±, admite la joven.

Su novio cursa estudios en la Facultad de Derecho de la Universidad Fordham en Nueva York desde 2018. Sus planes, en principio, inclu¨ªan presentarse a los ex¨¢menes para poder ejercer como abogado en Estados Unidos una vez que acabase sus estudios el a?o pr¨®ximo. Quiz¨¢ entonces pueda acabar la larga espera de Mako y esa boda tanto tiempo aplazada pueda, finalmente, tener fecha.