Emma Coronel, la reina de la extravagancia en el cartel de Sinaloa

Sin joyas, sin ropa de lujo y sin tacones Louis Vuitton, una irreconocible Emma Coronel vestida con un mono de presidiario azul y verde, se presentaba en un juzgado el pasado febrero. La juez decretaba prisi¨®n sin opci¨®n a fianza para la acusada de narcotr¨¢fico, tal y como sucedi¨® con su marido, Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n, en 2019. Coronel, conocida como la Kardashian de Sinaloa, se enfrenta a una condena que en el peor de los casos podr¨ªa ser de cadena perpetua, adem¨¢s de una multa de m¨¢s de 10 millones de d¨®lares. La influencer, modelo y empresaria est¨¢ acusada de tr¨¢fico internacional de coca¨ªna, metanfetamina, hero¨ªna y marihuana, adem¨¢s de conspiraci¨®n para ayudar a su esposo en una de las fugas m¨¢s cinematogr¨¢ficas de la historia en 2015. Desde una celda en la que pasa 22 horas al d¨ªa, la esposa de Joaqu¨ªn Guzm¨¢n se enfrenta, adem¨¢s, al ocaso del glamur en el que vivi¨®, patrocinado por el crimen organizado.

Coronel espera su juicio, alejada de todo el lujo al que estaba acostumbrada, en una en prisi¨®n en Alexandria (Virginia, EE UU). Su abogada, Mariel Col¨®n, ha denunciado las condiciones en las que la esposa de El Chapo vive en la c¨¢rcel. ¡°Solo pasa un par de horas en un saloncito¡±, ha se?alado. Adem¨¢s, ha detallado que durante la mayor parte del tiempo que est¨¢ recluida en una celda que no comparte con otras presas se dedica a leer, aunque no ha especificado qu¨¦ libros. ¡°Desafortunadamente no ofrecen, no hay actividades disponibles para que se pueda distraer¡±, ha asegurado la letrada. Tampoco ha dado detalles sobre si se comunica con sus dos hijas gemelas, fruto de su matrimonio con el que fue uno de los narcotraficantes m¨¢s buscados por la DEA, la agencia antidroga estadounidense.

Durante el juicio en Nueva York en el que condenaron a su marido a cadena perpetua, Coronel y sus hijas, siempre rodeadas de guardaespaldas, fueron el centro de la atenci¨®n de los periodistas. Vestida con firmas de lujo, se dej¨® fotografiar por las calles de Brooklyn caminando sobre sus stilettos de la mano de sus hijas, tambi¨¦n ataviadas con primeras marcas de moda. Dec¨ªa sentirse ¡°muy bien¡± pese a la presi¨®n del proceso y nunca le ocult¨® a sus hijas d¨®nde estaba su padre. ¡°Saben que su pap¨¢ est¨¢ en la c¨¢rcel. Ellas me mantienen alejada de los momentos de soledad, me mantienen ocupada¡±, reconoci¨®. La prensa comenz¨® a llamarla ¡°la reina del coraz¨®n de hielo¡± por su car¨¢cter imperturbable y su defensa incondicional de uno de los criminales m¨¢s buscados del mundo.

Coronel, que es ciudadana estadounidense y mexicana, no era una extra?a para el mundo del narcotr¨¢fico antes de conocer a su marido. Nacida el 2 de julio de 1989, Coronel es la supuesta sobrina ¡ªella lo niega¡ª de Ignacio Coronel, el mayor responsable del tr¨¢fico de metanfetaminas hacia Estados Unidos durante al menos 12 a?os. Su t¨ªo y su padre, In¨¦s Coronel, estuvieron involucrados con el narcotr¨¢fico a principios de los noventa cuando El Chapo controlaba la circulaci¨®n de coca¨ªna en M¨¦xico. Ignacio fue abatido el 29 de julio de 2010, en Zapopan, Jalisco, durante un tiroteo con el ej¨¦rcito mexicano. Su padre, In¨¦s, acumula varias condenas por tr¨¢fico de marihuana. Al igual que su hermano, In¨¦s Omar Coronel, que cumple condena por los mismos delitos.

Emma Coronel creci¨® entre Estados Unidos y su remoto pueblo cerca de Angostura, en el Estado de Durango, en el centro del conocido como ¡°tri¨¢ngulo dorado¡± del narcotr¨¢fico. Desde muy joven empez¨® a participar en concursos y se convirti¨® en la reina de la belleza en la Feria del Caf¨¦ y la Guayaba en el municipio de Canelas a los 17 a?os. En un baile para celebrar su coronaci¨®n, conoci¨® al que ser¨ªa su marido, que entonces ten¨ªa 51. Coronel dej¨® al novio que ten¨ªa para convertirse en la tercera esposa de El Chapo. Acordaron casarse el d¨ªa que ella cumpliera la mayor¨ªa de edad, apenas unos meses despu¨¦s de conocerse.

Con un elaborado maquillaje y gesto sereno, Coronel ha dado varias entrevistas para la televisi¨®n donde, midiendo cuidadosamente sus palabras, ha revelado detalles de su vida privada. Cont¨® que El Chapo la enamor¨® con sus palabras, sin hacerle regalos caros. ¡°Me conquist¨® con su amabilidad y educaci¨®n¡±, afirm¨®. Guzm¨¢n la empuj¨® a que estudiara y decidi¨® empezar Ciencias de la Comunicaci¨®n en la Universidad Aut¨®noma de Sinaloa, el Estado en el que resid¨ªan. Ha asegurado que nunca ha ejercido su carrera, pero que le hubiera gustado dedicarse al periodismo.

Expres¨¢ndose con cautela y elegancia, siempre se ha mostrado c¨®moda ante los medios de comunicaci¨®n, a los que esquivaba f¨¢cilmente con una amplia sonrisa cuando le preguntaban sobre los negocios de su marido. ¡°Prefiero no contestar a eso¡±, respond¨ªa con una voz dulce y t¨ªmida cada vez que se menciona algo relacionado con el narcotr¨¢fico. Repet¨ªa que ten¨ªa una vida normal y sin lujos, que le gustaba salir con sus amigas a restaurantes y al cine, pero en Sinaloa la conoc¨ªa todo el mundo. ¡°No sue?o con grandes cosas. Solo con felicidad y tranquilidad. No quiero que hagan un esc¨¢ndalo de mi vida. Me gusta ir a la playa, salir y divertirme como cualquier persona¡±, cont¨® ante las c¨¢maras.

Coronel tuvo con Guzm¨¢n dos hijas gemelas, nacidas en 2011, Mar¨ªa Joaquina y Emal¨ª Guadalupe. Como hiciera su madre, Coronel viaj¨® a Estados Unidos para dar a luz. Las ni?as son medio hermanas de los otros ocho hijos que El Chapo ha tenido en sus matrimonios previos. Aunque Coronel ha afirmado que no sabe con exactitud cu¨¢ntos descendientes tiene Guzm¨¢n, admite que conoce a tres y que se encarga de su educaci¨®n.

La fortuna que El Chapo amas¨® con la coca¨ªna en los noventa le permiti¨® vivir rodeada de lujo: cuatro aviones privados, mansiones desperdigadas por las mejores playas de M¨¦xico y hasta un zool¨®gico en uno de sus m¨²ltiples ranchos. Miguel ?ngel Mart¨ªnez, conocido entre los miembros del cartel de Sinaloa como El Gordo y mano derecha de El Chapo, relat¨® en su juicio la vida de nuevos ricos de la familia. El rancho que pose¨ªan en Guadalajara ten¨ªa, entre otras cosas, cuatro piscinas y una colecci¨®n de mascotas ex¨®ticas como tigres, leones, panteras y venados. ¡°Los invitados lo recorr¨ªan en trenecito¡±, coment¨® El Gordo, adem¨¢s de describir las decenas de coches de lujo de su socio y sus frecuentes viajes al extranjero.

La burbuja de extravagancia que pagaba el narcotr¨¢fico se tambale¨® el 22 de febrero de 2014, cuando los comandos de la Marina mexicana detuvieron a El Chapo en Mazatl¨¢n (Sinaloa). El que entonces era el segundo narcotraficante m¨¢s buscado burl¨® a las autoridades mexicanas para verla a ella y a sus dos hijas. Ese gesto rom¨¢ntico le costar¨ªa el ingreso en la prisi¨®n de m¨¢xima seguridad de El Altiplano. La estancia, que dur¨® poco m¨¢s de un a?o, concluy¨® con una de las fugas m¨¢s rocambolescas que ha vivido M¨¦xico. Guzm¨¢n escap¨® en julio de 2015 por un t¨²nel de 1.500 metros excavado desde las duchas que ten¨ªa iluminaci¨®n, ventilaci¨®n y hasta rieles para sacar escombros. El juzgado del Distrito de Columbia, en Washington, acusa a Coronel de haber ayudado a su marido durante esta fuga de pel¨ªcula.

Emma Coronel vivi¨® los a?os buenos del negocio de su marido mirando hacia otro lado. ¡°No me consta que trafique con drogas. Estoy enamorada de ¨¦l¡±, insist¨ªa siempre. Mientras ¨¦l esperaba sentencia, aseguraba que viv¨ªa de otros negocios que ella ten¨ªa. ¡°No puedo hablarte mucho de ellos, solo decirte que no son il¨ªcitos. Por ejemplo tengo tierras de regad¨ªo que hered¨¦ de mi pap¨¢¡±, coment¨® en 2018. No desperdici¨® ninguna oportunidad para decir que su marido era inocente.

Ahora, la justicia estadounidense apunta que Coronel no solo ten¨ªa conocimiento de las operaciones del cartel de Sinaloa, sino que participaba en algunas de ellas. Con El Chapo en la c¨¢rcel, su esposa asumi¨® un papel importante en las comunicaciones con los socios de su marido, seg¨²n los documentos judiciales. Entre las evidencias que el agente del FBI Eric S. McGuire incluy¨® para obtener la orden de arresto contra ella est¨¢ una supuesta carta de El Chapo en la que negocia con un socio el tr¨¢fico de hero¨ªna. ¡°La madre de las gemelas te dir¨¢ algo a ti y a mis hijos. Por favor, est¨¦ atento compadre. Ella se lo explicar¨¢¡±, se?ala el documento.

La exmodelo se sentaba sola en el banquillo de la defensa, observando c¨®mo su marido llevaba las corbatas que ella le compr¨® para que se pusiera durante el juicio. Tras enormes gafas de sol e impecablemente vestida, no se derrumb¨® cuando los agentes de FBI leyeron la transcripci¨®n de mensajes entre Guzm¨¢n y una de sus amantes, Agustina Cabanillas Acosta. El intercambio de mensajes entre ambos no solo evidenciaba la infidelidad de Guzm¨¢n, tambi¨¦n expon¨ªa la participaci¨®n de su amante en el tr¨¢fico de coca¨ªna y marihuana en Estados Unidos. Ella se refiere a ¨¦l dici¨¦ndole ¡°amor¡± y que es ¡°la persona m¨¢s importante para ella¡±. El agente que dirigi¨® la investigaci¨®n asegur¨® que Acosta ¡°se convirti¨® en su juguete personal¡± y que a Guzm¨¢n ¡°le gustaba mucho¡±. La lectura de estos mensajes se hizo con Emma Coronel en la sala del juzgado. El Chapo la buscaba con la mirada mientras se expon¨ªa su infidelidad.

La vida de Emma Coronel, la esposa del Chapo

Dictada la sentencia, Coronel aprovech¨® el tir¨®n medi¨¢tico y sigui¨® la l¨ªnea de las Kardashian para participar en un reality show llamado Cartel Crew (La banda del cartel en espa?ol) en el canal VH1. ¡°Trato de no lamentarme de lo que ya pas¨®¡±, expres¨® Coronel en una conversaci¨®n con Michel Blanco, hijo de la narcotraficante colombiana Griselda Blanco, ante las c¨¢maras. Durante el programa, la esposa del capo de la droga m¨¢s famoso del mundo insist¨ªa que quer¨ªa ser una mujer normal lejos de los prejuicios que tiene la sociedad sobre ella. ¡°Nos juzgan sin conocernos. Es duro porque a veces quieres hacer lo que ves que todos hacen a tu alrededor¡±, narraba vestida de blanco y desde un yate para el programa. Adem¨¢s, aprovech¨® para pedirle a Blanco consejo sobre c¨®mo lanzar una marca de ropa llamada El Chapo Guzm¨¢n: JGL, por las siglas del nombre completo de su marido. Ese mismo a?o, una hija del Chapo, Alejandrina Guzm¨¢n, sac¨® su propia marca llamada El Chapo 701. Ninguna de las dos empresas consigui¨® mantenerse en el mercado pasado ese a?o.

Sin embargo, los negocios de Coronel, lejos de extinguirse, se diversificaron. Desde su cuenta de Instagram, y con 31 a?os, se consagr¨® como influencer y promocion¨® a varias marcas locales de Sinaloa, como productos de belleza, ropa, joyer¨ªa y hasta hamburgueser¨ªas y helader¨ªas de la zona. La cuenta apenas tiene cinco publicaciones, pero acumula 592 millones de seguidores. En ella, la esposa de El Chapo no expone su vida privada, sus hobbies o a sus hijas, como hacen otras celebridades. Las publicaciones se centran en fotograf¨ªas profesionales de ella en las que sus seguidores la elogian por su imagen y su estilo para vestir. En la ¨²ltima, publicada dos meses antes de su detenci¨®n, posa como modelo con un vestido de novia y larga cabellera rubia.

Finalmente, la burbuja de Emma Coronel estall¨®. La magistrada Robin Meriweather dictamin¨® la prisi¨®n sin opci¨®n a fianza para la acusada. Desde una c¨¢rcel de Estados Unidos, la reina de la belleza enfrenta una pena m¨ªnima de diez a?os de c¨¢rcel hasta una condena m¨¢xima de cadena perpetua.