La Casa Blanca anuncia la muerte de ¡®Champ¡¯, uno de los perros del presidente Biden

El presidente Joe Biden ha informado este s¨¢bado del fallecimiento de Champ (Campe¨®n), el perro mayor de la familia presidencial. El pastor alem¨¢n de 13 a?os acompa?¨® al matrimonio desde diciembre de 2008, poco despu¨¦s de que el dem¨®crata asumiera como vicepresidente. En un comunicado, el mandatario estadounidense sostuvo que Champ ¡°falleci¨® pac¨ªficamente¡± en la Casa Blanca. ¡°Queremos a nuestro dulce y buen chico, y siempre le echaremos de menos¡±, concluye la nota. La familia Biden tiene otro perro de acogida, otro pastor alem¨¢n llamado Major (Mayor), de tres a?os.

¡°En nuestros momentos m¨¢s alegres y en nuestros d¨ªas m¨¢s dolorosos, estuvo all¨ª con nosotros, sensible a todos nuestros sentimientos y emociones t¨¢citos¡±, escribi¨® Biden. ¡°Dondequiera que estuvi¨¦ramos, ¨¦l quer¨ªa estar, y todo mejor¨® instant¨¢neamente cuando estaba a nuestro lado¡±, agreg¨® el presidente en el comunicado de despedida, donde apuntaba que siempre extra?ar¨¢n a Champ. Los nietos del dem¨®crata bautizaron as¨ª al perro porque ese es el apelativo con el que Biden sol¨ªa referirse a su hijo Hunter.

El estado f¨ªsico de Champ se hab¨ªa deteriorado en el ¨²ltimo tiempo. ¡°Incluso cuando la fuerza de Champ disminuy¨® en sus ¨²ltimos meses, cuando entramos en la habitaci¨®n, inmediatamente se levantaba, siempre meneaba la cola, y nos acariciaba con la nariz para que le rascaramos la oreja o le dieramos un masaje en la barriga¡±.

Meses antes de que el dem¨®crata arrancase su campa?a presidencial, Joe y Jill Biden adoptaron a Major, un cachorro de un refugio de animales de Delaware. La incorporaci¨®n del nuevo miembro de la familia fue una recomendaci¨®n de un veterinario para animar la vida de Champ. Ambos llegaron a la Casa Blanca el pasado 20 enero, junto con el presidente y la primera dama. ¡°En su juventud, era feliz persiguiendo pelotas de golf en el jard¨ªn delantero del Observatorio Naval o corriendo para atrapar a nuestros nietos mientras corr¨ªan por nuestro patio trasero en Delaware¡±. En la residencia presidencial ten¨ªa su cama frente a la chimenea.

Los Biden recuperaron la tradici¨®n bicentenaria de que los presidentes de EE UU tengan mascotas en la Casa Blanca. Como rese?a en su web la Asociaci¨®n Hist¨®rica de la Casa Blanca, con seis d¨¦cadas de trayectoria, las mascotas de la Casa Blanca ¡°han provisto de compa?¨ªa y han humanizado la imagen pol¨ªtica de los presidentes¡±. Pero Trump decidi¨® saltarse esa regla no escrita y no traer perros, gatos o cualquier otro animal de compa?¨ªa al 1600 de la Avenida de Pensilvania.