Mara Jim¨¦nez: ¡°Soy gorda y ya no me escondo. Voy a llevar unos biquinis que flipas¡±
La actriz y comunicadora, creadora del consultorio ¡®Gente gorda haciendo cosas¡¯, presenta ¡®Acepta y vuela¡¯, un libro donde narra su proceso desde padecer acoso escolar a convertirse en activista contra la ¡®gordofobia¡¯
Pelazo azabache. Ojazos chispeantes. Sonrisa cegadora. Resuelta, radiante, insultantemente joven y guapa, Mara Jim¨¦nez entra en la Redacci¨®n de EL PA?S y se hace verano de repente. Lleva deportivas de plataforma, un pantal¨®n rosa chicle y una camiseta de manga corta metida por dentro con el lema: I¡¯m the biggest one (soy la m¨¢s grande) estampado sobre el pecho. Cualquiera le lleva la contraria. Es luego, durante la entrevista, cuando deja atisbar cu¨¢nto trabajo y sufrimiento hay detr¨¢s de tanto aplomo.
Pregunta. ?Cu¨¢nto ha tardado en vestirse?
Respuesta. Diez minutos.
P. ?Cu¨¢nto tardaba en el insti?
R. Much¨ªsimo. Probaba y probaba hasta dar con un look con el que me pareciera que iba a ser la guapa de la clase y a la vez invisible, para no recibir insultos. Sent¨ªa que nada me quedaba bien.
P. Quer¨ªa ser a la vez la guapa e invisible. ?C¨®mo se come eso?
R. Porque, como todo adolescentes, quer¨ªa que mis compa?eros me validaran. Deseaba ser la guapa porque no quer¨ªa ser la vaca, la ballena, la foca, como me llamaban. Cre¨ªa que, si me ve¨ªan guapa, dejar¨ªan de insultarme. Me vest¨ªa de oscuro, pero me arreglaba mucho el pelo y me maquillaba mucho, por ejemplo, porque quer¨ªa que vieran algo m¨¢s que el cuerpo por el que me vejaban.
P. ?Cu¨¢ndo tuvo conciencia de ser diferente de las otras ni?as?
R. Desde ni?a, te dicen: ¡°Mete tripa¡±, ¡°qu¨¦ pena, con lo guapa que eres, y tan gordita...¡±. Es un pu?al que se te clava en la entra?a. Y la gente cercana, la que m¨¢s te quiere y tiene que mirar por tu bienestar es la primera en dec¨ªrtelo.
P. ?Se lo dec¨ªan sus padres?
R. Mi padre, mi madre, mis abuelas, las vecinas, las clientas de mi madre, que es esteticista. He crecido entre cremas y drenajes linf¨¢ticos. Todos los d¨ªas ve¨ªa a chicas cubiertas de algas y vendas y m¨¢quinas para adelgazar, y yo, nada. En casa del herrero, cuchillo de palo.
P. ?Y se las pon¨ªan a usted?
R. Claro: desde muy peque?a. Sobre todo odiaba mi tripa.
P. ?Se hizo da?o a s¨ª misma?
R. Much¨ªsimo. Me he autolesionado. Me hund¨ªa los pu?os en la barriga. Me he pasado la vida metiendo tripa, a dieta salvaje. Cuando dicen que las gordas no tenemos fuerza de voluntad, me entra la risa. Soy la puta ama de la fuerza de voluntad. Ten¨ªa anorexia con episodios de atrac¨®n. La gente no tiene ni idea de lo que es un TCA [Trastorno de la Conducta Alimentaria] y juzga sin saber.
P. ?Cu¨¢ndo perdi¨® el control?
R. Cuando me independic¨¦. Con 18 tuve dos intentos de suicidio. Me levantaba con el ¨²nico objetivo de cumplir la dieta, era una calculadora de calor¨ªas, de compensaci¨®n, de restricci¨®n. Nadie me controlaba la comida, era yo la que ten¨ªa que llevar mi vida y, cuando tienes un TCA controlando tu cabeza, es imposible. Fue un momento muy, muy dif¨ªcil
P. ?Cu¨¢l fue el clic que la hizo reaccionar y salir del agujero?
R. Ver c¨®mo mi trastorno le hac¨ªa da?o a mi pareja. No quer¨ªa salir a comer, ni conocer gente, segu¨ªa d¨¢ndome atracones, teniendo ataques de p¨¢nico ante el armario por no saber qu¨¦ ponerme. Era la primera pareja que me quer¨ªa de verdad, que me cuidaba, y verla sufrir me hizo reaccionar y comprometerme conmigo misma a sanarme.
P. ?Las de antes no la quer¨ªan?
R. Te conformas con migajas. Tiene que ver con tu baja autoestima. Crees que es lo ¨²nico que mereces. Qui¨¦n te va a querer a ti, que est¨¢s gorda, eres una foca, la gente te insulta, no puedes comer lo que quieres. Qui¨¦n te va a querer si t¨² no te quieres, no eres v¨¢lida, no eres merecedora de nada. Y si alguien te lo dice, te tienes que sentir s¨²per agradecida.
P. Defina gordofobia.
R. No caber en las sillas. Que el m¨¦dico te diga que adelgaces antes de preguntarte siquiera qu¨¦ te pasa. Que te miren mal por la calle o, directamente, te insulten. Que juzguen tu salud sin conocerte ni saber si est¨¢s o no sana. Que miren lo que comes en los restaurantes y comenten tu aspecto. No encontrar ropa en las tiendas...
P. Mi madre no encontraba nada de la talla 52. Hoy hay m¨¢s oferta.
R. Poca, y online, no quieren gordas en las tiendas. Algunas marcas sacan a modelos gordas en sus anuncios, pero luego no hay ropa grande en sus locales. Por eso las gordas damos la vida por Shein [firma de ropa online china]. Nos salva la vida. Encuentras ropa sexy, c¨®moda, pr¨¢ctica, toda. Ya me gustar¨ªa usar ropa m¨¢s sostenible, sin explotaci¨®n laboral y espa?ola, pero no hay para m¨ª. Ha dado una oportunidad a la gente diversa.
P. Da gusto ver a las j¨®venes vestidas como quieren, sin complejos. Pero hay quien las critica por eso.
R. Yo creo que nos llaman generaci¨®n de cristal porque hemos dejado de normalizar el sufrimiento. Prefiero que me digan que soy de cristal por denunciar la discriminaci¨®n, que ser como la generaci¨®n de mi abuela, que ten¨ªa que soportar que el marido le pegara y ser una mujer apagada y apartada de la sociedad. Hemos salido a romper con todo.
P. ?Qu¨¦ le pareci¨® la foto de Kim Kardashian embutida a presi¨®n en el traje de Marilyn Monroe en la gala del MET?
R. Aberrante. Es perpetuar esa idea de que nuestros cuerpos tienen que adaptarse para caber en la ropa. Pensamos que podemos maltratar nuestro cuerpo a nuestro antojo y luego vienen los peajes. Todo para, al final, tener que ponerle y dejarle el culo al aire, evidenciando que no cabe. Es como cuando obligan a un actor a engordar para un papel. ?No puede hacerlo un actor o actriz gordo?
P. Hay quien piensa que incluir modelos gordas en los anuncios fomenta la obesidad.
R. Claro, pero aplaudimos que Kardashian se mate de hambre durante semanas para medio caber en un traje, y no nos preguntamos si las modelos delgadas tienen problemas de salud. No nos preocupan conductas de riesgo de TCA, pero s¨ª que una persona gorda tenga cabida en la sociedad. No soporto el doble rasero. Lo que molesta que la gente gorda tenga visibilidad porque nos borra el privilegio de gente delgada haciendo cosas de delgados.
P. Ese tatuaje de un donut rosa glaseado que lleva en el antebrazo a¨²n est¨¢ reciente, ?no?
R. Me lo hice ayer. Para m¨ª es una especie de reivindicaci¨®n, el s¨ªmbolo de gorda. No me gustan los donuts, de hecho, en la obra Gordas, hago como que como uno y lo escupo, porque no me gustan. Pero me gusta jugar con la ambivalencia y que la gente pueda pensar que soy una gorda que est¨¢ sudando porque le encantan los donuts.
P. Se llama gorda a s¨ª misma. ?Eso tambi¨¦n es reivindicativo?
R. S¨ª. Soy gorda y ya no me escondo. Es una identidad y eso es reapropiarse de algo que tanto da?o me ha hecho. A m¨ª me cost¨® mucho usar la palabra gorda. Pero es que crec¨ª as¨ª, es parte de mi personalidad, me ha hecho como soy. Entonces, reapropiarme del t¨¦rmino es necesario para poder ser feliz, porque si no, es como si te clavaran el pu?al cada vez que la oyes ah¨ª fuera.
P. Estamos a mediados de mayo. ?Est¨¢ ya preparada para el verano?
R. Preparad¨ªsima. Voy a llevar unos biquinis que flipas.
ACEPTA Y VUELA
Este es el título del libro donde Mara Jiménez (Sabadell, 26 años) cuenta su vida, marcada por el acoso escolar que sufrió debido a su aspecto físico, que la llevó a padecer un trastorno alimentario, y su proceso de sanación, hasta convertirse en una de las voces más influyentes contra la gordofobia en España. Desde su cuenta de Instagram, con más de 350.000 seguidores, y de Tik Tok, Jiménez, conocida como @croquetamente_, ha conseguido hacer viral el consultorio "Gente gorda haciendo cosas, dígame", donde aborda con humor y amor los prejuicios que soportan las personas con sobrepeso.
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