La nueva era del club de fans: horas de dedicaci¨®n desinteresada creando contenido en internet
Los perfiles que proliferan en redes sociales con publicaciones constantes acerca de los ¨²ltimos movimientos de las estrellas reflejan la entrega de muchos seguidores an¨®nimos. Mar¨ªa, de 21 a?os, abri¨® una cuenta de apoyo a la cantante Rosal¨ªa en la que invierte ¡°21 horas semanales o incluso m¨¢s¡±, detalla
El pasado verano, un fan de Cardi B desembols¨® 96.000 d¨®lares (unos 90.000 euros) al comprar en una subasta el micr¨®fono que la pol¨¦mica rapera lanz¨® contra el p¨²blico durante un concierto. Tampoco se quedan atr¨¢s los 40.000 d¨®lares por los que recientemente se vendi¨® el tut¨² que Sarah Jessica Parker lleva en la cabecera de Sexo en Nueva York. Una cifra que, sin duda, pagar¨ªan si pudieran muchos de los seguidores de Taylor Swift por alg¨²n objeto de la estrella. Los swifties (como se autodenominan) aguantan horas y horas en las colas de sus conciertos llevando consigo todo tipo de merchandising, desde pulseras hasta estampitas con la cara de la artista como si fuera Jesucristo. Pero el apoyo de los fans a sus artistas preferidos puede ir mucho m¨¢s all¨¢ de unas compras, la extravagancia y el despilfarro econ¨®mico. En ocasiones, destinan notables esfuerzos a compartir con el mundo su inter¨¦s por sus ¨ªdolos.
Ser fan puede ser toda una dedicaci¨®n a tiempo completo y prueba de ello son las cuentas que proliferan en el universo digital, perfiles con s¨®lidas comunidades de seguidores que en muchos casos alcanzan las decenas de miles de personas. Actualizadas de manera constante, siguen pr¨¢cticamente en tiempo real los movimientos de sus estrellas preferidas. Este tipo de cuentas forman parte del engranaje extraoficial de las estrategias de publicistas y agentes. De hecho, en muchos casos cuentan con el follow de la celebridad a la que rinden homenaje, algo que se podr¨ªa interpretar como un visto bueno por parte del artista al contenido que se publica.
En Espa?a, celebridades como la ganadora del Oscar Pen¨¦lope Cruz, las cantantes Rosal¨ªa o Aitana, deportistas como Rafa Nadal o personalidades como la reina Letizia, cuyo estilo genera gran inter¨¦s entre la prensa internacional especializada, cuentan con decenas de p¨¢ginas de fans gestionadas por seguidores an¨®nimos que no escatiman esfuerzos a la hora de crear contenido. Rebeca Antol¨ªn Prieto, doctora en Ciencias de la Informaci¨®n y profesora del departamento de Ciencias de la Comunicaci¨®n Aplicada en la Universidad Complutense de Madrid, subraya el potencial de las cuentas de fans como herramienta para fortalecer la imagen de marca personal: ¡°Es crucial reconocer el impacto positivo que estos perfiles pueden tener en la construcci¨®n de la imagen de marca personal de una celebridad. No solo sirven como plataformas para la expresi¨®n de admiraci¨®n, sino que tambi¨¦n consolidan una comunidad leal que proyecta una imagen positiva y respaldo constante, contribuyendo as¨ª a la percepci¨®n p¨²blica de la celebridad¡±.
El nuevo club de fans
Es el caso del perfil @styleofRosalia (con m¨¢s de 23.000 seguidores en Instagram), dedicado a analizar todos y cada uno de los estilismos de la cantante catalana. La rastreadora detr¨¢s del armario de la artista es Mar¨ªa, una joven de 21 a?os, estudiante de Confecci¨®n y Moda, que abri¨® la cuenta en noviembre de 2018 con el objetivo de compartir todo tipo de contenido sobre Rosal¨ªa, aunque finalmente se centr¨® en la parte de la indumentaria. Algo que complementa con otra cuenta dedicada a su expareja, el tambi¨¦n cantante Rauw Alejandro (Fan Page Style Closet Rauw). ¡°Casi no hay cuentas updates de ropa de artistas masculinos del g¨¦nero de reggaeton¡±, sostiene. Respecto al n¨²mero de horas invertidas detr¨¢s del perfil sobre la artista, del que no obtiene ninguna compensaci¨®n econ¨®mica, asegura que ¡°depende de las semanas¡±, si est¨¢ ocupada o no: ¡°De normal, pueden ser perfectamente 21 horas semanales o incluso m¨¢s¡±.
M¨¢s o menos el mismo tiempo dedica Olga, de 27 a?os, a su perfil centrado en la Familia Real espa?ola (@spain_royal). En dos a?os, esta rusa afincada en Italia ha construido una comunidad que supera los 152.000 seguidores en todo el mundo. Interesada por la monarqu¨ªa, asegura que empez¨® ¡°a buscar informaci¨®n sobre la Familia Real espa?ola en ruso, pero era bastante limitada, adem¨¢s de haber mucha informaci¨®n falsa¡±. Por ello, decidi¨® lanzar su propia cuenta y aprender a manejarse con el espa?ol para acceder tambi¨¦n a los fans de habla hispana. Actualmente, emplea varias horas diarias en mantener la cuenta actualizada: ¡°Depende del d¨ªa y si los Reyes tienen actividades o no. Y tambi¨¦n de mi estado de ¨¢nimo. A veces me inspiro y paso horas creando contenido nuevo¡±. De media, ella dedica a la p¨¢gina unas tres horas al d¨ªa, a veces m¨¢s. ¡°Me gusta¡±, puntualiza.
Las personas detr¨¢s de estas cuentas de apoyo no solo dotan de una visibilidad extra cualquier aparici¨®n de sus ¨ªdolos, tambi¨¦n logran mantener en la conversaci¨®n digital el nombre de las celebridades sobre las que comparten contenido. El hecho de que muchas veces los propios artistas interact¨²en con ellos evidencia su actitud favorable hacia estos perfiles, una nueva versi¨®n del tradicional club de fans con alcance global. De hecho, en el caso de la joven detr¨¢s de @styleofrosalia, el equipo de la catalana lleg¨® a invitarla a presenciar el Motomami Tour (la ¨²ltima gira de la cantante). ¡°Ser de los primeros en ver lo que se har¨ªa en la gira fue una experiencia incre¨ªble¡±, cuenta la due?a de la cuenta. No hace falta bucear demasiado para toparse en cualquier red social con memes, fotograf¨ªas o v¨ªdeos realizados por los fans, muchas veces convertidos directamente en creadores de contenido, que alcanzan un alto grado de viralidad. ¡°Esto no solo ampl¨ªa la visibilidad, sino que tambi¨¦n crea un efecto multiplicador al llegar a nuevos p¨²blicos. Este fen¨®meno puede generar un aumento sustancial en la notoriedad de la celebridad, reforzando su estatus en el mundo del entretenimiento¡±, sostiene Antol¨ªn Prieto.
La mitoman¨ªa exacerbada, a veces, inclina la balanza hacia el lado opuesto. En ocasiones, los artistas han visto c¨®mo sus propios seguidores han cruzado ciertas l¨ªneas rojas. El ejemplo m¨¢s sonado tuvo lugar cuando el pasado a?o los fans de Selena Gomez orquestaron una campa?a de acoso en las redes sociales contra la modelo Hailey Bieber, a quien consideran enemiga de la cantante y actriz desde que iniciara una relaci¨®n con su hoy marido Justin Bieber, novio de la adolescencia de Gomez. Llegaron a amenazar de muerte a Hailey Bieber. La propia Selena dio un paso al frente p¨²blicamente para pedir a sus fans que parasen. En este sentido, parece evidente cu¨¢ndo las cuentas de fans repercuten de manera negativa. En palabras de la profesora Antol¨ªn Prieto: ¡°Si se difunden informaciones falsas, se participa en comportamientos perjudiciales o se fomenta la controversia de manera irresponsable, podr¨ªa afectar la reputaci¨®n de la celebridad¡±.
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