Bront?, el ¡®influencer¡¯ del modernismo: ¡°No solo Gaud¨ª vale la pena. En Espa?a solo cuidamos lo que les gusta a los guiris¡±

¡°?J¨®dete, Gaud¨ª!¡±, le atiza en sus v¨ªdeos. Pero, como buena n¨¦mesis del arquitecto, Bront? es tambi¨¦n un gran conocedor de su obra, y sus respectivas vidas se reflejan como en una obsidiana. ¡°Nacimos un 25 de junio, soy vegetariano como ¨¦l, y los dos fuimos un poco raritos en el colegio. Aunque yo sal¨ª del armario y ¨¦l no¡±, precisa frente a un caf¨¦. ¡°No, no hay pruebas de que Gaud¨ª fuese gay¡±, r¨ªe. Les une sobre todo una loca afici¨®n a las curvas y los ornamentos, porque como bien saben sus seguidores de Instagram y TikTok (@brontesbien), a este madrile?o de 27 a?os le fascinan los edificios modernistas. En estas p¨¢ginas posa en uno de sus preferidos, el palacio de Longoria, al que en uno de esos v¨ªdeos sobre modernismo ha descrito como el ¡°j¨®dete Gaud¨ª definitivo¡±. Tambi¨¦n ha elogiado con este grito de guerra la Colonia de la Prensa en Carabanchel o a Antonio Palacios, pero ni siquiera es que Gaud¨ª le disguste. ¡°Lo que de verdad quiero decir con esa frase es que su modernismo no es el ¨²nico que merece la pena. Me fastidia su marketing, que se promocione tanto sus edificios mientras otros modernistas de Barcelona est¨¢n cay¨¦ndose a pedazos¡±, explica. Y en su m¨®vil ense?a un azulejo que acaba de ¡°rescatar¡± en una visita a la capital catalana. ¡°En Espa?a solo cuidamos los sitios que les gustan a los guiris¡±.

A Bront? el modernismo le salv¨® una vez la vida. Fue precisamente all¨ª, en Barcelona, adonde se mud¨® cuando, tras estudiar Sociolog¨ªa y Pol¨ªticas en Madrid, empez¨® a trabajar de gu¨ªa en el castillo de Santa Florentina de Canet del Mar. ¡°Hac¨ªa de todo. De hecho lo que m¨¢s me gustaba era limpiar las vidrieras de Montaner¡±, dice en alusi¨®n a su ¨ªdolo e iniciador en el modernismo, Llu¨ªs Dom¨¨nech i Montaner, quien en 1910 dise?¨® algunos espacios de ese castillo. All¨ª Bront? descubri¨® que hab¨ªa d¨ªas en los que solo la belleza consegu¨ªa animarle, y cuando poco despu¨¦s entr¨® ¡°en una racha muy oscura¡±, se ech¨® a las calles de Barcelona a aumentar la dosis. ¡°Ped¨ªa citas en dentistas solo porque quer¨ªa colarme en determinados portales. Sonar¨¢ tonto, pero visitar edificios modernistas fue mi salvaci¨®n¡±. Se refiere, por ejemplo, al hospital de Sant Pau, una de las joyas del modernismo de Montaner, donde el pasado enero grab¨® uno de sus primeros v¨ªdeos de TikTok. Se hizo viral (¡°p¨²drete, Gaud¨ª¡±) y eso le anim¨® a divulgar otros edificios modernistas como los de Alicante, de la que ha dicho que es como ¡°esa prima choni que tiene muchas cosas guays pero las mezcla mal¡±. ¡°Hasta ahora el m¨¢s visto es el de las cafeter¨ªas para buscar marido rico. Gust¨® por lo que gust¨®, pero muchos seguidores me han dicho que tambi¨¦n hizo que empezaran a interesarse por el modernismo¡±.

De todos los estilos, ¨¦l prefiere este ¨²ltimo porque ¡°es el m¨¢s drag¡±, as¨ª que no es de extra?ar que, como un buen programa de RuPaul, sus v¨ªdeos y chascarrillos (todo un diccionario Z, habla de edificios para ¡°divorciadas¡± y otros ¡°a punto de volcar de chorro¡±) tengan un trasfondo reivindicativo. ¡°Jam¨¢s colaborar¨ªa con una de esas inmobiliarias tiktokeras. La especulaci¨®n tiene mucha culpa de que las ciudades cada vez tengan menos identidad propia, que es una de las cosas contra las que intento luchar. Creo, como Montaner, que la gente tiene que sentirse representada por los edificios de su ciudad, y eso es algo que el modernismo consigui¨® incorporando no solo s¨ªmbolos locales como el drag¨®n de Sant Jordi sino artesan¨ªas como la del azulejo¡±, explica Bront?, y a?ade que tambi¨¦n se ha puesto l¨ªmites como gu¨ªa de las visitas que organiza en Madrid y Barcelona. ¡°Me niego a hacerlas en ingl¨¦s. Yo lo que quiero es ense?arle los edificios de una ciudad a la gente que de verdad va a sentirlo si alguna vez los derriban¡±.

Con ese mismo objetivo le gustar¨ªa grabar documentales y comisariar una exposici¨®n sobre suelos modernistas, su debilidad, de los que dice que no entiende que no tengan ya un museo en Barcelona siendo tan famosos los de esta ciudad. Por supuesto ya ha pensado el t¨ªtulo. No, es uno m¨¢s bonito: ¡°Jardines de interior¡±.