De dise?ar camas de perro a dirigir ¡°el lamborghini de la moda¡±: el excesivo mundo de Philipp Plein
El dise?ador alem¨¢n no sigue ni crea tendencias, solo responde a los gustos m¨¢s ostentosos del lujo y atrae por el camino a devotos como Cristiano Ronaldo o Floyd Mayweather
Si una casa es la representaci¨®n de su due?o, la mansi¨®n que Philipp Plein (M¨²nich, 46 a?os) ha construido en Los ?ngeles sirve para adentrarse en la personalidad y el ascenso de este dise?ador de moda. La casa, que recibe el nombre de Ch?teau Falconview y fue antes propiedad de Howard Hughes, est¨¢ asentada en una colina del barrio de Bel Air, con vistas a la ciudad californiana por un lado y el oc¨¦ano pac¨ªfico por otro. En la entrada, una enorme estatua de m¨¢rmol representa a un ¨¢ngel adornado con tatuajes y, una vez traspasada la puerta, el visitante se encuentra otra figura, la de UFO Robot Grendizer, uno de los personajes del creador del anime Mazinger Z. Todo el complejo est¨¢ dise?ado para evitar el m¨¢s m¨ªnimo atisbo de mesura: l¨¢mparas de ara?a gigantescas, techos chapados en oro y 25 habitaciones. Pero los planes de Plein no acaban ah¨ª. ¡°Hice esta casa como un ensayo para la casa grande. Cuando la otra est¨¦ terminada, esta ser¨¢ la de invitados¡±, explicaba el dise?ador en una entrevista. Lo que para cualquier mortal ser¨ªa un c¨²mulo de excesos, para ¨¦l es solo el principio.
La gran pregunta que suscita Plein es como el hijo de un m¨¦dico que abandon¨® a su familia y un ama de casa de Baviera ha llegado a dirigir un imperio de la moda que se ha diversificado en joyas, relojes de lujo y NFTs hasta generarle una fortuna que la edici¨®n alemana de Forbes calcula en 800 millones d¨®lares. No hay una respuesta sencilla, pero quiz¨¢s la que m¨¢s se acerca a resolver el enigma es que el dise?ador alem¨¢n ha abrazado sin complejos la visi¨®n m¨¢s excesiva de nuestro presente y se lo ha presentado a aquellos consumidores que quieren mostrarle al mundo su riqueza como se?al de estatus. Otra posible manera de explicarlo se encuentra en el propio perfil p¨²blico de Plein, que suele renegar del mundo de la moda y afirma que su ¨ªdolo es Elon Musk. Convertido en representante andante de su propia marca, Plein es una suerte de cruce entre emprendedor tecnol¨®gico, rapero y futbolista.
Del derecho a dise?ador canino
La moda no estaba entre los planes de Plein, que comenz¨® los estudios de derecho en la universidad de Erlangen-Nuremberg. Buscando una fuente de ingresos que le permitiera independizarse de su madre y su padrastro, se top¨® con un art¨ªculo sobre la pujante industria de complementos caninos. Aprovechando una herencia de su abuelo, Plein se propuso dise?ar una cama para perros inspirada en un sof¨¢ de Le Corbusier. El resultado fue un ¨¦xito que convenci¨® a Plein de abandonar sus estudios y dedicarse a dise?ar primero mobiliario y, m¨¢s tarde, ropa.
En un mundo altamente competitivo como el de la moda, y sin experiencia previa en el campo, Plein apost¨® por destacar de la manera m¨¢s rotunda posible. Inspirado por el maximalismo de Versace o Dolce & Gabbana, los dise?os del alem¨¢n no se rigen por la reinterpretaci¨®n de tendencias, sino por par¨¢metros puramente comerciales. ¡°Comprend¨ª que ten¨ªa que ofrecer un producto que fuera diferente, as¨ª que si hac¨ªa un jersey de cachemira que pusiera ¡®que os jodan a todos¡¯ con cristales Swarovski podr¨ªa venderlo por 5000 d¨®lares¡±, explicaba en una entrevista a The New Yorker. ¡°En realidad, el modelo de negocio es muy simple¡±. Simple pero efectivo: en 2022, su firma factur¨® 210 millones de euros en ventas.
El ¨¦xito de la forma de Plein tambi¨¦n se ha fraguado a trav¨¦s de su personaje p¨²blico, siempre dispuesto a dejarse fotografiar junto a personajes famosos del mundo de la m¨²sica o el deporte luciendo de manera perenne sus propias prendas. Entre los clientes fieles de Plein se encuentran Cristiano Ronaldo, Nicolas Cage o Floyd Mayweather, una lista exclusiva a la que el dise?ador les ofrece el lujo que demandan no solo a trav¨¦s de ropa y complementos. Dentro de las distintas compa?¨ªas de su grupo, Plein incluye joyer¨ªa, relojes, perfumes y trabaja en la apertura de su primer hotel, en Mil¨¢n. En 2016, adquiri¨® la marca italiana Billionaire y, como buen devoto de la figura de los emprendedores tecnol¨®gicos, ha hecho incursiones en el mundo de los NFTs y el metaverso.
El dise?ador antimoda
Por supuesto, su manera de entender la moda ha hecho que Plein sea considerado por muchos como un advenedizo hortera con ganas de llamar la atenci¨®n, pero eso tampoco le ha impedido ser una presencia constante en la semana de la moda de Mil¨¢n, el escenario en el que ha cimentado su imagen de exceso y lujo. Fue all¨ª donde, en 2015, organiz¨® el que todav¨ªa se considera uno de los desfiles m¨¢s caros de la historia de la moda, para el que instal¨® una monta?a rusa y cont¨® con la actuaci¨®n de la rapera Azealia Banks. Plein nunca oculta sus cartas. En otra entrevista, a la revista Interview, dejaba claras sus intenciones: ¡°Soy un maximalista y estoy orgulloso de serlo¡±.
Esa manera excesiva y exhibicionista de la opulencia le ha hecho ganar fans, como el rapero y actor Ice-T, que una vez defini¨® a la marca como ¡°el Lamborghini de la ropa¡± y se ha convertido en amigo personal del dise?ador. Una de sus prendas favoritas es una camiseta con una calavera y huesos en diamantes. ¡°Si alguien intenta pararme en la puerta de alg¨²n sitio les digo que es una camiseta de 800 d¨®lares, aparta¡±, brome¨® en una entrevista.
Pero tambi¨¦n ha despertado muchos recelos en otras partes, especialmente en los c¨ªrculos en los que la ostentaci¨®n es vista como un s¨ªntoma de mal gusto. Es lo que le sucedi¨® con la casa Ferrari, que en 2017 demand¨® a Plein por utilizar algunos de sus modelos en un desfile. Dos a?os m¨¢s tarde, la firma automovil¨ªstica italiana pidi¨® al dise?ador que dejase de compartir en Instagram im¨¢genes de sus autom¨®viles en los que aparec¨ªan sus zapatillas.
El alem¨¢n ha convertido ese rechazo en una insignia que exhibe orgulloso, aprovechando cualquier ocasi¨®n para mostrar su desd¨¦n hacia la industria de la moda. ¡°Estaban en contra de nosotros desde el principio¡±, explic¨® a la revista GQ. ¡°Es algo que ya hab¨ªa experimentado cuando estuve en un instituto interno de adolescente. Yo ten¨ªa el pelo largo y los dem¨¢s chicos lo llevaban corto y vest¨ªan pantalones cargo y polos. Intent¨¦ encajar, pero despu¨¦s de unos meses me di cuenta de que ese no era yo y que no ten¨ªa que amoldarme a un sistema en el que no creo. As¨ª es como afronto mi negocio ahora en la industria de la moda¡±.
Plein abraza esa postura de outsider de la moda, desde la cual se ve capaz de vender cualquier producto a trav¨¦s de la estridencia y el lujo excesivo. ¡°Aprend¨ª lo dif¨ªcil que es vender una silla y lo f¨¢cil que es vender una chaqueta¡±, comentaba en la misma entrevista. ¡°Yo no he tenido padres ricos, ni inversores, ni he pedido cr¨¦ditos a un banco. Eso es de lo que estoy orgulloso, de haber sido independiente y haber construido todo esto con mis manos, sin ayuda de nadie¡±.
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