?Est¨¢n podridos nuestros cerebros? La palabra del a?o para la Universidad de Oxford lo sugiere
La expresi¨®n ¡®brain rot¡¯ describe el deterioro mental que genera el abuso de las redes y, seg¨²n Oxford, resume a la perfecci¨®n este 2024
A¨²n no conoce la expresi¨®n, pero seguramente ya est¨¦ harto de ella. Define la fatiga que se genera despu¨¦s de pasar horas viendo v¨ªdeos plagados de memes incomprensibles, reacciones al ¨²ltimo jaleo de La revuelta o berridos varios intentando imitar las canciones de la pel¨ªcula Wicked. Todo a la vez, mezclado en nuestra cabeza durante mucho tiempo, empieza a desprender un olor desagradable, como si algo se estuviera pudriendo. Por eso las redes bautizaron a este estado de intoxicaci¨®n virtual como brain rot o putrefacci¨®n mental en espa?ol. Una expresi¨®n que ha ido ganando peso entre las comunidades digitales y que ahora la Universidad de Oxford ha escogido como su palabra del a?o.
En concreto, la Oxford University Press define brain rot como: ¡°Supuesto deterioro de las facultades mentales o intelectuales, especialmente relacionado con el abuso de contenido digital trivial o poco estimulante¡±. As¨ª, se recoge el uso de brain rot para designar tanto ese desgaste como el contenido virtual que lo provoca. En las listas de Oxford de este a?o compet¨ªan grandes rivales como demure (recatado, modesto), lore (conjunto de tradiciones y conocimientos sobre un tema) o dynamic pricing (establecimiento de los precios en funci¨®n de la demanda), pero los expertos consultados decidieron que brain rot era la expresi¨®n en alza que mejor resum¨ªa este 2024.
Solo en un a?o se ha vivido la invasi¨®n de los primeros v¨ªdeos hechos con inteligencia artificial y el ¨¦xodo de millones usuarios de X al considerarlo un lugar insalubre. Era, por tanto, inevitable que el conflicto entre las redes y la salud mental acabase impregnando las propias conversaciones digitales. Para nombrar un problema tan actual surgi¨®, gracias a la magia del lenguaje, una expresi¨®n que llevaba siglos en uso. Ya en 1854 el ensayista estadounidense Henry David Thoreau utiliz¨® brain rot para describir las carencias de la educaci¨®n de su ¨¦poca y desde el nacimiento de Internet se hab¨ªa asociado en c¨ªrculos muy cerrados a otra educaci¨®n distinta, pero igual de importante para algunos: la formaci¨®n en la cultura online. Sin embargo, la aut¨¦ntica resurrecci¨®n del t¨¦rmino no lleg¨® hasta este 2024 de la mano de las generaciones m¨¢s j¨®venes.
Todo empez¨® con los retretes humanizados de la serie de YouTube Skibidi Toilet, creada en 2023 por el animador georgiano Alexey Gerasimov. Esta particular mezcla de animaci¨®n cutre en 3D con un humor sin sentido se convirti¨® en todo un icono para la generaci¨®n Alfa, aquellos nacidos despu¨¦s de 2010. La serie era la perfecta encarnaci¨®n del contenido brain rot, extra?amente adictivo y aparentemente trivial. Desde entonces empezaron a triunfar v¨ªdeos con un estilo similar y la reci¨¦n estrenada etiqueta de ¡°putrefacci¨®n mental¡±. Las redes, en particular TikTok, se plagaron incluso de test brain rot en los que se pon¨ªa a prueba el nivel de conocimiento de los usuarios sobre los contenidos m¨¢s absurdos de Internet.
Al principio el uso que se le daba a la expresi¨®n era ir¨®nico, casi como un motivo de orgullo por poder descifrar los memes m¨¢s enrevesados, pero lentamente fue alcanzando a otras comunidades y empez¨® a designar el potencial nocivo de las redes sobre usuarios de todas las edades. La cultura brain rot incluso lleg¨® a hacerse un hueco en el Senado australiano de la mano de Fatima Payman. La pol¨ªtica elabor¨® un discurso utilizando este lenguaje sin sentido de la generaci¨®n Alfa para protestar contra la intenci¨®n del Gobierno de regular el uso de redes en esas edades. Finalmente, hace dos semanas, el Senado acab¨® aprobando una normativa pionera que proh¨ªbe el acceso a las redes a los menores de 16 a?os. El ¨²ltimo hito en el debate sobre la salud mental virtual que no hace m¨¢s que reforzar la elecci¨®n de Oxford de este 2024.
A Casper Grathwohl, director del departamento encargado de escoger la palabra del a?o, le parece fascinante que el termino brain rot lo hayan adoptado las mismas generaciones Z y Alfa a las que se las suele asociar con la creaci¨®n de ese tipo de contenido. ¡°Demuestra una autoconsciencia descarada sobre el impacto da?ino que han heredado con las redes sociales¡±, explica en el comunicado que anuncia la elecci¨®n de este a?o. ¡°Las palabras ganadoras de los ¨²ltimos a?os evidencian que la cultura de internet est¨¢ calando cada vez m¨¢s en nuestra manera de ser y en aquello de lo que hablamos. No nos extra?a que tantos votantes hayan respaldado la decisi¨®n de este a?o¡±.
Dos d¨¦cadas condensadas en veinte palabras
Actualmente la palabra del a?o de Oxford se escoge por un sistema mixto entre la votaci¨®n popular y el an¨¢lisis de un equipo de especialistas. El objetivo es asegurarse de que la expresi¨®n escogida haya sido muy utilizada y al mismo tiempo logre exponer una circunstancia particular de ese momento. Desde que la iniciativa se puso en marcha en 2004 las palabras ganadoras han reflejado la evoluci¨®n del inter¨¦s social por temas como la tecnolog¨ªa (podcast y selfie), la conciencia medioambiental (huella de carbono y crisis clim¨¢tica) y los problemas pol¨ªticos (posverdad).
Las elecciones m¨¢s arriesgadas tuvieron lugar en 2017, con el emoticono de la cara llorando de risa que constataba el peso de los emojis en nuestra escritura, y en 2020, a?o en el que no pudieron decantarse por una sola palabra. Las toneladas de contenido digital creadas durante la pandemia y los acelerados cambios sociales les forzaron a incluir una lista de hasta 16 expresiones como coronavirus, Black Lives Matter o cultura de la cancelaci¨®n.
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