?xito, c¨¢rcel y escenarios ¡®country¡¯: la ¨²ltima reinvenci¨®n de Kiefer Sutherland

¡°Cuando esta ciudad me habla, cuenta la historia de mi vida¡±, canta Kiefer Sutherland (Londres, 55 a?os) en la canci¨®n Bloor Street, primer adelanto de su ¨¢lbum de mismo t¨ªtulo, que edita Cooking Vinyl y cuya publicaci¨®n est¨¢ prevista para el 21 de enero. El disco es el tercero de su carrera musical, que compagina desde 2016 con sus interpretaciones en cine y televisi¨®n, y la ciudad a la que homenajea en la letra es Toronto, la metr¨®polis canadiense donde creci¨®. Un cari?o correspondido, como confirma a Icon su compatriota Christopher Heard, bi¨®grafo del actor y cantante, a quien consagr¨® el libro in¨¦dito en Espa?a Kiefer Sutherland: Living Dangerously (Kiefer Sutherland: viviendo peligrosamente, 2010): ¡°Es muy respetado aqu¨ª por lo que ha logrado y por la familia a la que pertenece. Nadie se refiere a ¨¦l como ¡®el actor Kiefer Sutherland¡¯ o ¡®la estrella de cine Kiefer Sutherland¡¯, sino como ¡®el canadiense Kiefer Sutherland¡±.

Pero el int¨¦rprete no naci¨® en Canad¨¢, sino en Londres, en 1966, durante la ¨¦poca en que sus padres, los tambi¨¦n actores (y tambi¨¦n canadienses) Donald Sutherland y Shirley Douglas, trabajaban en el Reino Unido. Su nombre de pila, Kiefer, es un homenaje a Warren Kiefer, codirector del primer largometraje en el que actu¨® su padre, la pel¨ªcula de terror italiana Il castello dei morti vivi (1964). Y mucho m¨¢s arduo es ponerse a escarbar en el resto: el nombre completo del int¨¦rprete es Kiefer William Frederick Dempsey George Rufus Sutherland.

Ahora, con una carrera encauzada, vers¨¢til y constante, Sutherland ha pasado pr¨¢cticamente por todas las fases de la vida de una aut¨¦ntica estrella de cine en tiempo r¨¦cord. Fue un rostro adolescente popular gracias a sus actuaciones en dos cl¨¢sicos de los ochenta como Cuenta conmigo (1986) y J¨®venes ocultos (1987). En el rodaje de L¨ªnea mortal (1990) ¨Cque podr¨ªa formar con las otras dos una trilog¨ªa oficiosa sobre los problemas de Kiefer Sutherland con los ni?os¨C, conoci¨® a Julia Roberts, con quien mantuvo un romance que fue gasolina para la prensa rosa y cuyo sonado desenlace a¨²n colea: la actriz le abandon¨® el d¨ªa de su boda para irse a Irlanda con Jason Patric, amigo y compa?ero del actor en J¨®venes ocultos. Tras unos a?os noventa m¨¢s irregulares, donde cultiv¨® la t¨ªpica afici¨®n exc¨¦ntrica de famoso con dinero (en su caso, una de las formas m¨¢s crueles de rodeo, el steer roping) y tuvo que aceptar algunos papeles que, como ha reconocido, le avergonzaban, Sutherland alcanz¨® por sorpresa su pico de fama gracias al personaje de Jack Bauer, jefe de la Unidad Antiterrorista de Estados Unidos y h¨¦roe de la serie 24, que protagoniz¨® durante nueve temporadas y le report¨® dos premios Emmy, como actor y como productor.

Toda esta historia de ascenso, ca¨ªda y resurrecci¨®n se desarroll¨® antes de que el actor hubiese cumplido siquiera 35 a?os (lo hizo en plena emisi¨®n de la primera temporada), as¨ª que, despu¨¦s, hubo tiempo para m¨¢s curvas: por ejemplo, un buen pu?ado de peleas de bar y un ingreso de 48 d¨ªas en prisi¨®n despu¨¦s de varios arrestos por conducir bajo los efectos del alcohol. ¡°Lo primero que pierdes cuando atraviesas las puertas de la c¨¢rcel es la dignidad¡±, cont¨® Sutherland en 2016 a Rolling Stone. Precisamente por eso, en la entrevista, el actor explic¨® que hab¨ªa pasado parte de su tiempo en prisi¨®n pensando en las canciones del legendario m¨²sico de country Johnny Cash: ¡°Escribi¨® sobre los presos con un sentido de la dignidad que siempre me ha parecido incre¨ªble¡±. De ese chispazo naci¨® su primer disco, ilustrativamente titulado Down in a hole (2016).

Reconciliado con su pasado

¡°Kiefer ofrece la misma energ¨ªa en sus actuaciones musicales que en sus interpretaciones. Es m¨¢s que un pasatiempo para ¨¦l, se lo toma muy en serio¡±, asegura a Icon el bi¨®grafo de Sutherland, Christopher Heard. Pese a lo tard¨ªo de su incursi¨®n, el actor ya era un apasionado de la m¨²sica y lleg¨® a tener hasta 100 guitarras, seg¨²n confes¨® a la edici¨®n brit¨¢nica de GQ en 2019. Una rese?a en The Guardian de un concierto suyo, en 2017, dec¨ªa: ¡°La m¨²sica country ba?ada en whisky de la estrella de acci¨®n es realmente conmovedora. Convierte su voz rasposa de bar¨ªtono en canciones aut¨¦nticas sobre historias de amor en bares de carretera y alcoholismo¡±. En los 11 cortes de su a¨²n in¨¦dito tercer ¨¢lbum, Bloor Street, que Icon ha podido escuchar en primicia, Sutherland contin¨²a avanzando con paso firme por el camino entre el folk y el country que emprendi¨® en sus dos trabajos anteriores, aqu¨ª con una variada instrumentaci¨®n y sin miedo al pop ni a las letras rom¨¢nticas. Los par¨¢metros normales de alguien que, a lo largo de su carrera, se ha mostrado capaz de empu?ar con convicci¨®n un arma para proteger a un candidato presidencial en 24 y, al mismo tiempo, llorar viendo Love Actually, como ha llegado a confesar.

M¨¢s all¨¢ de la nostalgia por su juventud en Toronto exhibida en la canci¨®n de adelanto, la estrella parece tener las cuentas con su pasado perfectamente saldadas. Despu¨¦s de dos d¨¦cadas sin tener contacto, hizo las paces con Jason Patric, el amigo que le traicion¨® y¨¦ndose con su prometida Julia Roberts. ¡°No es cuesti¨®n de si le perdono o no. ?ramos amigos, por eso me sorprende no haber recibido nunca una llamada explic¨¢ndome que lo hizo porque se hab¨ªa enamorado o algo as¨ª. En lugar de eso, me encontr¨¦ con un completo extra?o¡±, cont¨® Kiefer Sutherland a Rolling Stone en una entrevista en 2006, previa a la reconciliaci¨®n entre los dos actores, que el pasado a?o incluso se sentaron juntos en el podcast Inside of you, hablaron del tema y declararon que lo sucedido era ya, para ambos, ¡°agua pasada¡±. ¡°Tanto Julia Roberts como ¨¦l son excelentes personas¡±, agreg¨®, sin rastro de despecho.

El actor tambi¨¦n ha bromeado sobre sus problemas con el alcohol. El episodio m¨¢s c¨¦lebre fue la paliza que propin¨® en 2005 a un ¨¢rbol de Navidad en un hotel. ¡°Odio ese puto ¨¢rbol de Navidad¡±, advirti¨®, seg¨²n The Mirror, a un encargado, quien presuntamente le dio permiso para derribarlo despu¨¦s de que Sutherland le consultase de forma diligente si le importaba que lo destruyese y pagara el dinero que costase. El v¨ªdeo m¨¢s antiguo que hay en YouTube sobre el incidente, casi una pieza de arte dada¨ªsta, solo dura 9 segundos y tiene por t¨ªtulo Kiefer es un pirata, por las palabras que le dice su interlocutor tras la c¨¢mara: ¡°Eres un pirata, t¨ªo¡±. ¡°Eso lo explica todo¡± es la respuesta de Sutherland, que acto seguido se abalanza sobre el ¨¢rbol.

En 2018, parodi¨® la escena en su cuenta de Twitter para felicitar las fiestas a sus seguidores, esta vez con un ¨¢rbol de Navidad m¨¢s peque?o.

Kiefer Sutherland, adem¨¢s, ha honrado p¨²blicamente la memoria y las ideas de su abuelo por parte de madre, el pol¨ªtico socialdem¨®crata Tommy Douglas. Douglas fue quien impuls¨® el acceso universal a la sanidad en Canad¨¢, que cuenta con uno de los sistemas m¨¢s admirados del mundo. Sutherland se ha manifestado igualmente por la implantaci¨®n de un sistema p¨²blico en Estados Unidos, adem¨¢s de por el ingreso gratuito en las universidades. ¡°Supongo que, por definici¨®n, son pol¨ªticas socialistas, pero para m¨ª es sentido com¨²n¡±, declar¨® en una entrevista para el canal de televisi¨®n CBS en 2007. Ese mismo a?o, acept¨® una invitaci¨®n del ej¨¦rcito de Estados Unidos para concienciar a los cadetes contra el empleo de la tortura en los interrogatorios, despu¨¦s de que en la serie 24 decidiesen que el personaje de Jack Bauer no utilizase m¨¢s esos m¨¦todos.

Su madre, Shirley Douglas, que falleci¨® en abril de 2020, destac¨® tambi¨¦n por un importante activismo pol¨ªtico: la actriz, que apoy¨® marchas contra la guerra de Vietnam o para apoyar a las personas migrantes, perdi¨® la visa de trabajo en Estados Unidos a causa de su vinculaci¨®n al movimiento de los Panteras Negras.

¡°Estuvo m¨¢s cerca de su madre la mayor parte de su vida y aprendi¨® de ella, porque era una fant¨¢stica actriz de teatro. Crecer en ese entorno tambi¨¦n le ha transferido un cierto instinto¡±, dice a Icon Christopher Heard, que no duda en distinguir cu¨¢les han sido los puntos fuertes que han hecho de Sutherland una estrella: ¡°No posee el t¨ªpico aspecto de ni?o guapo de Hollywood y tiene una gran intensidad, que saca a relucir cuando sus papeles son de acci¨®n o deben resultar amenazadores. ?Y cuenta con una voz ¨¢spera estupenda!¡±. Que vale lo mismo para intimidar a unos terroristas de los Balcanes en una ficci¨®n televisiva que para cantar country.

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