C¨®mo tramitar con eficacia y rapidez ayudas sociales

Los sindicatos y diversas ONG se han quejado amargamente de la lentitud en la tramitaci¨®n de diversas ayudas sociales, fundamentalmente el ingreso m¨ªnimo vital, pero tambi¨¦n las ayudas de desempleo para las trabajadoras dom¨¦sticas. Desde el punto de vista sindical, se incide en la paulatina reducci¨®n de efectivos de las administraciones de Seguridad Social y Desempleo desde el a?o 2000. En realidad, la plantilla de la Seguridad Social es insuficiente y est¨¢ muy envejecida. Tambi¨¦n se ha modificado. Ahora el trabajo de afiliaci¨®n, recaudaci¨®n y reconocimiento de prestaciones se ha automatizado mucho, lo que adem¨¢s garantiza la equidad de las prestaciones en el territorio espa?ol. Los empleados p¨²blicos ingresados en las ¨²ltimas d¨¦cadas son interventores, letrados, m¨¦dicos, inform¨¢ticos, t¨¦cnicos. Pero la tramitaci¨®n de ayudas sociales consiste en ayudar al solicitante a formular la solicitud, informarle de c¨®mo una ayuda puede ser concedida o denegada, y explicarle qu¨¦ comportamientos son o no compatibles con la ayuda, y la relaci¨®n de esta con otras ayudas. Este trabajo lo han hecho los centros de acci¨®n social de los Ayuntamientos, los servicios sociales de las comunidades aut¨®nomas transferidos con el Imserso, y la red de servicios comunitarios de atenci¨®n de organizaciones no gubernamentales, laicas y confesionales, profesionales y voluntarios, concertados por Ayuntamientos y comunidades y apoyados por el 0,7% de otros fines de inter¨¦s social del IRPF. Servicios deprimidos en un a?o en el que los recursos de las administraciones que no emiten deuda disminuyen con la pandemia.

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Una mirada al Ingreso M¨ªnimo Vital aprobado el pasado 10 de junio, su utilidad ante los efectos de la pandemia y los obst¨¢culos que enfrenta la ayuda

Esta realidad es tan manifiesta que cuando se pusieron en marcha las pensiones no contributivas su tramitaci¨®n se realiz¨® por parte de los servicios de las comunidades aut¨®nomas. Pero en esta ocasi¨®n, una administraci¨®n absolutamente desentendida de la realidad econ¨®mica de los beneficiarios de las prestaciones, la Seguridad Social, debe realizar comprobaciones. De momento, ya lo hace mal, porque la falta de informaci¨®n hace que las solicitudes se presenten con defectos formales, y nadie indica a los solicitantes a veces c¨®mo cuestiones menores podr¨ªan convertirles en beneficiarios leg¨ªtimos. Cuando tramite todas las solicitudes presentadas, de las que solo se ha resuelto una cantidad muy reducida, lo har¨¢ peor, porque no ser¨¢ capaz de distinguir el grano de la paja, y en un tema tan sensible, que preocupa, generar¨¢ agravios comparativos que suscitar¨¢n la elemental cuesti¨®n de si esta centralizaci¨®n administrativa sirve o no al uso m¨¢s adecuado de los recursos p¨²blicos. La soluci¨®n no es demasiado complicada. Hay que firmar un convenio con la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias y colaborar con los gastos de gesti¨®n municipales. Hay que permitir que se concierte la parte delegable de este trabajo con las ONG. Hay que dejar a las comunidades aut¨®nomas que tramiten las ayudas, porque esta tramitaci¨®n no rompe de ninguna forma la unidad de caja, como no la rompi¨® con las pensiones no contributivas. Y cuando las cosas funcionen debidamente, podremos prestar atenci¨®n sobre lo que es asistencia social y Seguridad Social en la Constituci¨®n.

Octavio Granado es ex secretario de Estado de la Seguridad Social (2004-2011, 2018-2020).