Talibanes y talibanas
El idioma de millones de afganos y de iran¨ªes carece de distinci¨®n morfol¨®gica de g¨¦neros y es, por tanto, igualitario
Los talibanes han amargado el verano a los dem¨®cratas del mundo al sembrar de nuevo el horror en Afganist¨¢n. Su reconquista del pa¨ªs los ha devuelto a la actualidad con la misma fuerza que ya conocimos en 1996, cuando derrocaron al Gobierno establecido entonces. Y con ellos regresa una palabra que, de haber transcurrido la historia por otros derroteros, habr¨ªa desaparecido de nuestro vocabulario, igual que a finales del XIX se esfumaron los b¨®ers tras su guerra sudafricana. Sin embargo, la presencia recurrente del movimiento talib¨¢n en los medios durante estos a?os, ahora intensificada, ha dado para crear incluso un sentido figurado de ese t¨¦rmino. Talib¨¢n: persona intransigente, fan¨¢tica.
¡°Talib¨¢n¡± es en realidad un plural en ¨¢rabe. El persa (lengua de Ir¨¢n) tom¨® de ese idioma la palabra, para prest¨¢rsela luego al past¨²n, dialecto iranio que emplean 13,5 millones de afganos y 20 millones de paquistan¨ªes, la mayor¨ªa de ellos analfabetos (Breve historia de las lenguas del mundo, Rafael del Moral, 2014). El past¨²n o pasto es lengua cooficial en Afganist¨¢n desde 1936 junto con el dari o farsi o persa. El singular de talib¨¢n en esos tres sistemas es t¨¢lib. Por tanto, al decir ¡°los talibanes¡± se est¨¢ incurriendo en un doble plural. Pasar¨ªa lo mismo si a un supuesto grupo terrorista internacional al que por la juventud de sus integrantes se le denominara The Children (los ni?os) lo llam¨¢ramos en espa?ol ¡°los ch¨ªldrenes¡±.
Cualquiera que empezase a decir ¡°los ch¨ªldrenes¡± ser¨ªa se?alado por algunos de los que saben ingl¨¦s; pero la veneraci¨®n de ciertas minor¨ªas ante esa lengua no se ha dado con el italiano o el ¨¢rabe. As¨ª, decimos los dobles plurales ¡°espaguetis¡±, ¡°raviolis¡±, ¡°paparazzis¡±¡, formados con los plurales spaghetti, ravioli y paparazzi, que tienen sus singulares en spaghetto, raviolo y paparazzo. Y tambi¨¦n ¡°muyahidines¡±, ¡°fedayines¡±, ¡°serafines¡±, t¨¦rminos que proceden de los plurales ¨¢rabes formados a partir de muyahid, fiday y serafim.
En unos medios se habla estos d¨ªas de ¡°los talib¨¢n¡±; en otros, de ¡°los talibanes¡±; y en otros, a veces de ¡°los talib¨¢n¡± y a veces de ¡°los talibanes¡±, dos formas diferentes que se pueden o¨ªr en un mismo minuto de radio. Quien dice ¡°los talib¨¢n¡± est¨¢ respetando el plural original. Y quien prefiere ¡°los talibanes¡± est¨¢ formando ese plural a partir de la integraci¨®n de ¡°talib¨¢n¡± en el espa?ol como singular, opci¨®n incluida por el Diccionario acad¨¦mico desde 2001 y por el Libro de estilo de EL PA?S desde 2002. Lo que ya no tiene sentido, como se?alaba en una carta a la directora el acad¨¦mico Pedro ?lvarez de Miranda el 21 de agosto, es mantener el masculino ¡°talib¨¢n¡± para concordancias en femenino: ¡°delegaci¨®n talib¨¢n¡±, ¡°estrategia talib¨¢n¡±, ¡°autor¨ªa talib¨¢n¡±. T¨¢lib significa ¡°estudiante¡±; y en el contexto afgano, ¡°estudiante del Cor¨¢n¡±, por antonomasia; ese movimiento naci¨® precisamente en las escuelas cor¨¢nicas de Pakist¨¢n, y de ah¨ª que a sus miembros se les llamara ¡°los estudiantes¡±.
Nuestro desdoble ¡°un talib¨¢n / una talibana¡± no es posible en farsi o persa. El idioma mayoritario en Ir¨¢n y que usan m¨¢s de 8 millones de afganos (Lenguas del mundo, Rafael del Moral, 2002) carece de distinci¨®n morfol¨®gica de g¨¦neros, como pasa en el ingl¨¦s, lo cual implica la ausencia del mal llamado ¡°masculino gen¨¦rico¡± (deber¨ªa denominarse solamente ¡°gen¨¦rico¡±). Atroz paradoja la que se da en Ir¨¢n y Afganist¨¢n, donde reina el machismo y se habla una lengua que, con arreglo a ciertos criterios actuales, ser¨ªa ¡°inclusiva¡± o ¡°igualitaria¡±; y que se puede usar, por la ausencia del femenino, para la invisibilizaci¨®n de la mujer.
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