La OTAN autoriza el retorno del Ej¨¦rcito yugoslavo a la franja de seguridad de Kosovo

Esta decisi¨®n permitir¨¢ a Yugoslavia recuperar todo el control de esa franja desmilitarizada administrada por la ONU que le fue impuesta tras la intervenci¨®n de la Alianza Atl¨¢ntica en el conflicto de esta provincia. En noviembre del a?o pasado, los guerrilleros albaneses se atrincheraron en la zona.

La negativa de la guerrilla del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n de Presevo, Medvedja y Bujanovac (UCPMB) a deponer las armas es el elemento que ha llevado a la OTAN a satisfacer la demanda serbia de tomar control de la franja, que empez¨® a ser devuelta progresivamente hace dos meses.

El sector B, al que las fuerzas serbias podr¨¢n volver desde el pr¨®ximo d¨ªa 24, est¨¢ pr¨®ximo a Bujanovac, la zona m¨¢s conflictiva del sudeste de Serbia, poblada al igual que Kosovo por una mayor¨ªa de albaneses.

La decisi¨®n de autorizar el regreso de las fuerzas serbias a ese ¨²ltimo sector se dio por adoptada por el Consejo Atl¨¢ntico tras concluir el plazo fijado sin que ninguna de las capitales de los pa¨ªses de la Alianza se pronunciara en contra.

Atenta vigilancia de la OTAN

"La OTAN vigilar¨¢ de cerca el regreso de las fuerzas yugoslavas y el Consejo Atl¨¢ntico seguir¨¢ interesado en ese asunto", se?ala en una declaraci¨®n el secretario general de la Alianza, George Robertson. A su juicio, ya "no es necesario" mantener la zona de seguridad terrestre, de cinco kil¨®metros de ancho y 402 de largo, en torno a Kosovo.

"Esta decisi¨®n no ha sido tomada a la ligera", se?ala Robertson, quien ha recordado que su representante especial, Pieter Feith, ha viajado en repetidas ocasiones al sudeste de Serbia con el de la Uni¨®n Europea, Stefan Lehne, para ayudar a un acuerdo entre la minor¨ªa albanesa y las autoridades serbias.

El dirigente aliado dijo haber recibido ayer una carta del viceprimer ministro serbio y encargado de la crisis, Nebojsa Covic, en la que comunicaba la aplicaci¨®n de una serie de medidas de confianza en el sudeste de Serbia, exigidas de forma reiterada por la OTAN.

Esas medidas son la retirada de las fuerzas serbias de instalaciones civiles como colegios y f¨¢bricas; compensaciones econ¨®micas a los albaneses que hayan sufrido da?os materiales; desarrollo de infraestructuras en el valle de Presevo; la

desmilitarizaci¨®n de las localidades de Lucane y Turje (en la l¨ªnea de frente), una polic¨ªa multi¨¦tnica con supervisi¨®n de la OSCE y la continuaci¨®n del dialogo con los albaneses.

El secretario general de la OTAN ha pedido a Covic m¨¢s medidas, como una "amnist¨ªa apropiada para los elementos albaneses armados que decidan voluntariamente desarmarse". Tambi¨¦n ha pedido un compromiso de que las fuerzas que entrar¨¢n en la zona de seguridad "respetar¨¢n los derechos humanos fundamentales y la ley internacional".

Adem¨¢s, Belgrado debe comprometerse a desplegar "s¨®lo tropas bajo estricto control policial y abstenerse de cualquier uso excesivo o demostraci¨®n de fuerza".

La OTAN pide a las autoridades serbias que emprendan una amplia campa?a de informaci¨®n anunciando a la poblaci¨®n concernida las medidas de confianza. El m¨¢ximo representante de la Alianza Atl¨¢ntica ha advertido de que cualquier ataque que puedan sufrir las tropas multinacionales de la KFOR "ser¨¢ respondido con contundencia", en alusi¨®n a la guerrilla albanesa.

"Lleg¨® el momento de que los grupos armados albaneses depongan sus armas y participen activamente en el proceso pol¨ªtico en una Serbia democr¨¢tica", se?ala Robertson.