La crecida del Lena fuerza la evacuaci¨®n de 3.500 personas en Yakutsk

Ayer mismo las autoridades hicieron un llamamiento a la calma asegurando que la situaci¨®n estaba bajo control, pero esta ma?ana el ministerio de Situaciones de Emergencia ha comunicadoque 50 kil¨®metros r¨ªo abajo de Yakutsk se ha formado una presa natural de hielo y se teme que el nivel de las aguas siga subiendo.

Para intentar encauzar la situaci¨®n, Cazabombarderos SU-24 han lanzado esta ma?ana 24 bombas de 250 kilogramos cada una para intentar despejar el cauce del r¨ªo, e impedir as¨ª la inundaci¨®n de Yakutsk.

La crecida del Lena, el segundo gran r¨ªo de Siberia junto al Obi, devast¨® la semana pasada la ciudad de Lensk, de 27.000 habitantes, donde la masa de agua y hielo destruy¨® cerca de 5.000 viviendas. Las inundaciones, las mayores de los ¨²ltimos cien a?os, se han visto favorecidas por unas condiciones meteorol¨®gicas muy extra?as este invierno: fuertes heladas en Siberia, temperaturas altas en Mosc¨² y nevadas a destiempo.

Los estragos causados por la riada en Lensk fueron tales, que las autoridades han anunciado ya que la ciudad no ser¨¢ reconstruida.

"Rusia nunca hab¨ªa sufrido semejante devastaci¨®n en unas riadas", ha afirmado el ministro de Situaciones de Emergencia, Sergu¨¦i Shoig¨², quien ha comparado la destrucci¨®n con "los efectos de un terremoto".

De nada han servido las palabras de ¨¢nimo del presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, quien por en¨¦sima vez se ha reunido con el gabinete de crisis que intenta paliar las inundaciones y poner a salvo Yakutsk, capital de Yakutia.

Los pron¨®sticos no ofrecen muchas esperanzas: el nivel del agua en esta ciudad puede exceder en la noche los diez metros, rebasando as¨ª los muros de contenci¨®n de poco m¨¢s de ocho metros que intentan desviar la "marea del Lena".

As¨ª se ha bautizado a la masa de agua, bloques de hielo capaces de triturar cualquier barco, tierra y ¨¢rboles desgajados que bajan por el r¨ªo hacia Yakutsk, donde no se descarta evacuar a buena parte de sus m¨¢s de 200.000 habitantes.

Las autoridades locales han indicado que ma?ana no ser¨¢ un d¨ªa laborable en Yakutsk y han pedido a la poblaci¨®n que permanezca en sus casas con la radio o televisi¨®n encendidas.

Seg¨²n las autoridades de Yakutsk, si el agua crece dos metros m¨¢s y supera los diez metros, "todas las actividades vitales de la ciudad quedar¨¢n suspendidas", incluso el suministro de agua potable.

"Si el taponamiento del r¨ªo no se despeja, m¨¢s de dos quintas partes de la ciudad quedar¨¢n bajo la riada", ha dicho Vasili Vl¨¢sov, primer ministro de la rep¨²blica de Saja, como se conoce tambi¨¦n a Yakutia.

Ahora s¨®lo defienden la ciudad muros de arena, piedras y asfalto, que con sus apenas 9,5 metros de altura son insuficientes para la crecida augurada.

En las afueras del casco los primeros diques de tierra ya han sido rebasados, pero este agua s¨®lo es la vanguardia del grueso de la marea.

El caudal del r¨ªo se desbord¨® la semana pasada cuando una inmensa lengua de hielo de casi cien kil¨®metros tapon¨® su cauce a la altura de la isla de Batam¨¢i, que en un recodo de la corriente form¨® una presa natural que vaci¨® los afluentes del gigante siberiano.

Seg¨²n avanza, el panorama se convierte en desolador: las cercanas aldeas de Kangalassi, de 2.500 habitantes, y Zhatai, de 6.000, se han convertido en islas en medio de la corriente, aunque su suerte es mejor que la de Sirdaj o Tulagino, desaparecidas ya.

Estas localidades no volver¨¢n a existir, como tampoco lo har¨¢ Lensk, aunque el ministro Shoig¨² ha emplazado ya la tarea de buscar un nuevo lugar para el asentamiento de la ciudad, ahora bajo las aguas.

El presidente Putin ha prometido en una reuni¨®n con el primer ministro ruso, Mijail Kasi¨¢nov, que la ayuda a la poblaci¨®n permitir¨¢ la reparaci¨®n de los da?os y la reconstrucci¨®n a lo largo del Lena, en las riberas del Yenisei, en la regi¨®n de Tuba, en el Volga y en otros r¨ªos rusos afectados por las crecidas.

Pero en entrevistas mostradas por la televisi¨®n rusa, los habitantes de la cuenca del Lena han mostrado su pesimismo y han recordado que tras las inundaciones de 1998 no recibieron ayuda alguna de Mosc¨².