Bush reclama el liderazgo de la lucha contra el terrorismo en Nueva York

George W. Bush ha prometido esta noche en la convenci¨®n republicana de Nueva York, donde ha aceptado formalmente la candidatura a la presidencia de EE UU, que luchar¨¢ con firmeza contra el terrorismo "no por orgullo, ni por poder sino porque las vidas de los estadounidenses est¨¢n amenazadas".

Entre las ovaciones de 5.000 delegados e invitados presentes en el Madison Square Garde y gritos de "Cuatro a?os m¨¢s" y "USA, USA", Bush ha insistido en que har¨¢ todo lo posible por garantizar la seguridad del pa¨ªs ante las amenazas externas. Su discurso de 40 minutos ha comenzado y terminado con emocionadas referencias a los atentados del 11-S. "Vimos llegar la tragedia al coraz¨®n de esta gran ciudad una ma?ana tranquila", fueron sus primeras palabras. Las ¨²ltimas: "Mis queridos americianos, mientras nuestra naci¨®n se mantenga en pie, la gente contemplar¨¢ la resurrecci¨®n de Nueva York y dir¨¢: Aqu¨ª unos edificios se hundier¨®n, y aqu¨ª emergi¨® una naci¨®n".

Bush ha repasado sus cuatro a?os en la Casa Blanca y ha justificado, una vez m¨¢s, la guerra de Irak. Ha prometido que continuar¨¢ la lucha contra el terrorismo para garantizar la seguridad de sus ciudadanos y que habr¨¢ una victoria en esa guerra.

Bush no ha mencionado a Osama bin Laden, a¨²n desaparecido, pero si ha destacado la "exitosa" estrategia en Afganist¨¢n, Pakist¨¢n, Arabia Saud¨ª y Libia. "Estamos en la ofensiva golpeando a los terroristas en el exterior para no tener que afrontarlos aqu¨ª, en casa", ha repetido

El presidente ha criticado la pol¨ªtica econ¨®mica de Kerry y sus propuestas en materia de seguridad nacional pero de una forma mucho menos agresiva que su vicepresidente. Dick Cheney fue el encargado de arremeter contra el candidato dem¨®crata ayer.

Reformas econ¨®micas

En el terreno dom¨¦stico, ha subrayado el "¨¦xito" de su ley de reforma de la educaci¨®n y ha hecho un gi?o a la comunidad hispana pronunciando una frase en castellano: "no dejaremos a ning¨²n ni?o atr¨¢s". Bush ha esbozado, aunque sin mucho detalle, amplias reformas en el sistema de recaudaci¨®n de impuestos, la privatizaci¨®n parcial de las jubilaciones de la Seguridad Social y medidas para aumentar la cobertura m¨¦dica. Ha prometido aumentar la financiaci¨®n para la formaci¨®n laboral y crear en las comarcas m¨¢s deprimidas "zonas de oportunidad", con incentivos fiscales, pese a estar a punto de convertirse en el primer presidente desde la Gran Depresi¨®n bajo cuyo mandato se pierden puestos de trabajo. Tambi¨¦n se ha comprometido a reducir el d¨¦ficit presupuestario, aunque no ha recordado que el d¨¦ficit ha alcanzado bajo su Gobierno r¨¦cords hist¨®ricos consecutivos.

Bush no se ha olvidado del ala conservadora del partido, aunque de forma tenue para no escandalizar a los m¨¢s moderados. "Debemos hallar un lugar para los ni?os no nacidos", ha dicho. Ha prometido proteger el matrimonio "entre un hombre y una mujer", pero no ha mencionado expresamente el matrimonio homosexual. S¨ª ha asegurado que har¨¢ una defensa firme de los "valores conservadores".