EE UU llama a consultas a su embajadora en Siria tras el asesinato de Hariri
Damasco rechaza las acusaciones de estar detr¨¢s del asesinato del ex primer ministro liban¨¦s
Pese a que el Gobierno de Siria ha rechazado las insinuaciones que la sit¨²an tras el asesinato ayer del ex primer ministro de L¨ªbano, Rafik Hariri, EE UU llamar¨¢ a consultas a su embajadora en Damasco, Margaret Scobey, seg¨²n ha anunciado hoy la Casa Blanca. La retirada de la embajadora supone un nuevo paso en las ya tensas relaciones entre Washington y Damasco, a quien la administraci¨®n Bush acusa de promover el terrorismo, ayudar a la insurgencia de Irak y obstaculizar el proceso de paz en Oriente Pr¨®ximo.
Scobey "volver¨¢ de forma inminente" a Washington para realizar "consultas urgentes", ha anunciado el portavoz del Departamento de Estado, Richard Boucher. Antes de salir de territorio sirio, la diplom¨¢tica ha entregado al Gobierno de Damasco un mensaje en el que Washington manifiesta su "profunda preocupaci¨®n" por el asesinato en atentado de Hariri el pasado lunes en Beirut, ha a?adido Boucher. Adem¨¢s, en la nota se destaca que Siria mantiene "una apreciable presencia militar" en L¨ªbano, en violaci¨®n de la resoluci¨®n 1559 del Consejo de Seguridad de la ONU. Seg¨²n ha dicho Boucher, la presencia militar siria en el L¨ªbano supone una injerencia continua en ese pa¨ªs, mientras que la postura de Washington es que los ciudadanos libaneses "deben poder expresar sus preferencias pol¨ªticas libres" de la influencia de Damasco.
Se trata del segundo paso de la reacci¨®n de EE UU al asesinato de Hariri, que dirigi¨® la reconstrucci¨®n del pa¨ªs tras la guerra civil (1975-90) y trat¨® de frenar las aspiraciones de Siria en L¨ªbano. Ya ayer, la Casa Blanca anunci¨® que realizar¨ªa consultas con los gobiernos de la regi¨®n y con los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU para estudiar las "medidas que puedan tomarse para castigar a los responsables de este atentado terrorista, para acabar con el uso de la violencia y la intimidaci¨®n contra el pueblo liban¨¦s", aunque se cuid¨® de acusar directamente a Damasco del asesinato.
Aunque ya ayer se insinu¨®, desde EE UU y desde la oposici¨®n libanesa af¨ªn al ex mandatario, la posible conexi¨®n entre Siria y el asesinato, el Gobierno de Bahar Al Asad ha negado hoy toda implicaci¨®n en el crimen. El ministro de Informaci¨®n sirio, Mahdi Dajlala, ha afirmado que estas acusaciones "tienen como objetivo desviar la atenci¨®n de los verdaderos autores, que son los enemigos de L¨ªbano".
Dajlala, en una entrevista a la televisi¨®n qatar¨ª Al Yazira, no precis¨® a qui¨¦nes acusa de ser "enemigos de L¨ªbano", y coincidi¨® con otros responsables sirios en que "el objetivo del atentado es desestabilizar L¨ªbano". El ministro tambi¨¦n ha dicho que que Hariri "estaba a la cabeza de quienes favorecen el mantenimiento de relaciones distinguidas con Siria", y considera que su muerte "es un d¨ªa negro tanto para Siria y L¨ªbano como para el mundo ¨¢rabe".
Desde Israel, el ministro de Defensa, Saul Mofaz, ha asegurado hoy que el atentado fue organizado por una organizaci¨®n terrorista respaldada por Siria. En Washington, el portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, anunci¨® anoche que Estados Unidos "consultar¨¢ con otros Gobiernos en la regi¨®n y con el Consejo de Seguridad acerca de las medidas que pueden adoptarse para castigar a los responsables del atentado terrorista". No mencion¨® a Siria directamente, pero conden¨® su presencia militar en L¨ªbano.
Reinvindicaci¨®n
El asesinato de Hariri fue reivindicado por una organizaci¨®n fundamentalista desconocida, -La Victoria y la Yihad en la Gran Siria (es decir, Jordania, Siria, L¨ªbano y Palestina)-, que en un comunicado enviado a la cadena Al Yazira dijo haber actuado contra el "infiel" para castigarlo por sus relaciones con Arabia Saud¨ª y en venganza "por aquellos que han muerto a manos del r¨¦gimen saud¨ª". Hoy la investigaci¨®n ha concluido que el atentadoen el que se emplearon unos 300 kilos de dinaminta, fue causado por un terrorista suicida.
Hariri, anta?o un pol¨ªtico sumiso al r¨¦gimen de Siria, hab¨ªa cambiado su actitud desde el pasado octubre, fecha en que dimiti¨® como primer ministro para protestar por las injerencias de Damasco en la pol¨ªtica de su pa¨ªs. A pesar de las presiones ejercidas por Siria, Hariri hab¨ªa optado por engrosar las filas de la oposici¨®n, que lidera el jefe druso Walid Yumblat. Los dos pol¨ªticos y amigos hab¨ªan redactado hace pocas semanas una plataforma reivindicativa, que trataba de servir de aglutinante a toda la oposici¨®n para concurrir de manera unida a las elecciones legislativas del pr¨®ximo mayo. Esta plataforma, apoyada por los l¨ªderes drusos, cristianos y musulmanes, pide la retirada de los 15.000 soldados sirios que a¨²n permanecen en L¨ªbano.
La actitud cr¨ªtica de Hariri hacia Siria hab¨ªa sido tildada por los sectores oficialistas de "colaboracionista" con Francia y EE UU, pero sobre todo como una prueba de su traici¨®n hacia Damasco. La traici¨®n de Hariri se hac¨ªa para estos sectores insoportable, sobre todo en estos momentos en que Siria se encuentra en conflicto abierto con la Casa Blanca y la ONU, que reclaman la salida de sus tropas de L¨ªbano y la disoluci¨®n de la guerrilla libanesa de Hezbol¨¢.
Funerales populares
La familia de Hariri ha rechazado una propuesta del gobierno liban¨¦s para honrar al difunto con un funeral de estado, seg¨²n ha afirmado hoy Hani Hamud.
Hamud, uno de los consejeros de Hariri y director de su oficina de prensa, ha asegurado en una entrevista con Radio Oriente que la familia "prefiere funerales populares", y por ello el f¨¦retro "ser¨¢ llevado a pie desde su casa hasta la mezquita de Mohamed al Amin", en el centro de Beirut.
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