Protestas en Roma contra un cardenal de Boston implicado en el esc¨¢ndalo de abusos a menores

La Bas¨ªlica de San Pedro es "bonita". "Pero me pregunto que es lo que pasa detr¨¢s de esas puertas cerradas". Barbara Dorris ha viajado hasta el Vaticano, pero no para rendir tributo a Juan Pablo II, como tampoco nace su frase de la fascinaci¨®n por las deliberaciones secretas del c¨®nclave para elegir al nuevo Papa. Como su compatriota Barbara Blaine, esta estadounidense ha cruzado medio mundo para protestar contra el cardenal Bernard Law, implicado en un esc¨¢ndalo de pederastia y encargado hoy de oficiar la cuarta misa de los Novendiales en memoria del pont¨ªfice muerto.

Bernard Francis Law, nacido en 1931 en Torre¨®n (M¨¦xico), fue investido con la p¨²rpura en 1985 con el t¨ªtulo de cardenal sacerdote de Santa Susana, y durante a?os se le consider¨® como el estadounidense con mayores probabilidades de ser Papa. Sin embargo, el obispo de Boston se encuentra ahora en el epicentro del terremoto que ha sacudido en los ¨²ltimos a?os a la Iglesia cat¨®lica estadounidense. Seg¨²n documentos judiciales, traslad¨® a varios sacerdotes acusados de abusos sexuales a otras parroquias a sabiendas de su delito. Law renunci¨® a su puesto de arzobispo en 2002 debido a las fuertes presiones de la opini¨®n p¨²blica estadounidense.

Su elecci¨®n para oficiar la misa de hoy ha provocado un fuerte rechazo por parte de la autodenominada Red de Supervivientes de los Abusados por Sacerdotes —que cuenta con 5.600 miembros—, que aboga porque Law no pueda participar en actos religiosos, y menos de esta importancia. Su presidenta es precisamente Barbara Blaine, que ha encabezado la protesta de hoy en Roma, a la puerta de la bas¨ªlica Santa Mar¨ªa La Mayor, de la que Law es arcipreste. "La Iglesia tiene que escuchar las voces de las v¨ªctimas", ha dicho, porque con actos como hoy est¨¢ "echando sal en una herida abierta".

Barbara Blaine ha mostrado a los periodistas congregados frente a la Bas¨ªlica de San Pedro una fotograf¨ªa de cuando ten¨ªa 12 a?os, y otra del cura que abus¨® de ella durante cinco a?os, entre 1969 y 1974. Dorris, por su parte, fue v¨ªctima de abusos por parte del p¨¢rroco de su escuela cuando ten¨ªa seis a?os, y ahora dirige un grupo de ayuda a v¨ªctimas en Estados Unidos. En su opini¨®n, la misa de hoy es otra recompensa para Law, como lo fue su nombramiento como arcipreste de Santa Mar¨ªa La Mayor. "[Ahora que] los cardinales eligen a un nuevo Papa, queremos que reconozcan y tengan en consideraci¨®n el hecho de que el esc¨¢ndalo de abusos sexuales formar¨¢ parte del nuevo papado".