El Parlamento brasile?o denuncia la falta de control del armamento

Adem¨¢s de las armas de las fuerzas del orden que llegan a manos de los narcotraficantes mediante robos o ventas, el crimen organizado cuenta tambi¨¦n con armamento y municiones brasile?os que son exportados a otros pa¨ªses de Am¨¦rica Latina. Las armas son exportadas por empresas fantasma que acaban coloc¨¢ndolas en las fronteras de Brasil.

Otra de las conclusiones de la comisi¨®n del Parlamento sobre el tr¨¢fico de armas es la estrecha conexi¨®n que existe entre dicho tr¨¢fico y el de las drogas. "Donde existe tr¨¢fico de armas existe tr¨¢fico de drogas", afirma Jungmann. La prueba estriba en los v¨ªnculos demostrados entre los narcos y el grupo mafioso carcelario Primer Comando de la Capital (PCC), que dispone de armas incluso dentro de los presidios y que en los ¨²ltimos meses ha aterrorizado con sus acciones violentas a la ciudad y al Estado de S?o Paulo causando centenares de muertos.

Uno de los problemas m¨¢s graves de Brasil es el de la seguridad nacional, donde la violencia crece sin parar, sobre todo en las grandes urbes. Y un problema concreto, detectado por todos los analistas, es el de la falta de preparaci¨®n de la polic¨ªa —la que m¨¢s mata en el mundo— y los bajos sueldos de los agentes, lo que facilita que se extienda la corrupci¨®n. Existe adem¨¢s una rivalidad entre las diferentes polic¨ªas del Estado y de ¨¦stas con el Ej¨¦rcito, llamado a veces, como sucede con frecuencia en las favelas de R¨ªo de Janeiro, a apoyar a la polic¨ªa.

El a?o pasado, el Gobierno de Luiz In¨¢cio Lula da Silva fracas¨® en un refer¨¦ndum que pretend¨ªa recabar apoyo popular a la prohibici¨®n de armas entre los ciudadanos, en un intento de desacelerar la ola de violencia. Los brasile?os, que conf¨ªan poco en las fuerzas de seguridad del Estado, votaron en contra y prefirieron seguir armados.