Los 'dos Brasiles' vuelven a reunirse ma?ana ante las urnas
Los ¨²ltimos sondeos auguran una victoria de Lula con una ventaja de m¨¢s de 20 puntos sobre su rival
Los "dos Brasiles" -el rico y el pobre- expresar¨¢n este domingo sus notorias diferencias en la segunda vuelta de los comicios presidenciales. En el ¨²ltimo tramo de la campa?a, hay casi consenso en que la polarizaci¨®n del electorado es una de las m¨¢s marcadas en la historia de las elecciones de este pa¨ªs. La divisi¨®n del voto entre el presidente y candidato a la reelecci¨®n, Luiz In¨¢cio Lula da Silva, y el socialdem¨®crata Geraldo Alckmin, parece reflejar las desigualdades m¨¢s profundas de Brasil.
Por un lado, el pa¨ªs de Lula: el de las regiones del norte y nordeste, los municipios menores, los m¨¢s pobres y con m¨¢s bajo desarrollo humano; el de las ¨¢reas de agricultura familiar y la dependencia financiera del gobierno central. Por el otro, la naci¨®n de Alckmin: la de las regiones del sur y las zonas m¨¢s ricas del sudeste, las ciudades con mejor calidad de vida, las zonas donde la agricultura es un buen negocio y donde, econ¨®micamente, la administraci¨®n federal hace menos diferencia.
De la corrupci¨®n a la polarizaci¨®n
"En este momento, el problema principal de Brasil es la polarizaci¨®n, porque la desigualdad no es algo nuevo. El pa¨ªs ha vivido a lo largo de su historia con uno de los mayores niveles de inequidad del mundo", dice a BBC Mundo el analista internacional Jorge Castro. "La desigualdad ha estado siempre presente a pesar de que se encararon procesos de crecimiento econ¨®mico y de unidad nacional a gran escala", agrega.
La campa?a para la segunda vuelta parece estar a a?os luz de la que se desarroll¨® para la primera ronda, cuando el tema predominante fueron las acusaciones de corrupci¨®n contra el gobernante Partido de los Trabajadores (PT). Ahora, se discuten temas como privatizaciones, la eficiencia del gasto estatal y la crisis agr¨ªcola que ha afectado a los estados del sur.
Este viraje, dicen los observadores brasile?os, ha beneficiado claramente a Lula, quien seg¨²n las encuestas ganar¨¢ c¨®modamente su reelecci¨®n con una ventaja de 20 puntos por sobre su rival.
Fragmentaci¨®n electoral
"La polarizaci¨®n del electorado era previsible", advierte Castro. "La primera vuelta ya hab¨ªa mostrado la profunda fragmentaci¨®n del pa¨ªs en t¨¦rminos econ¨®micos, sociales y tambi¨¦n territoriales". "En el norte y nordeste de Brasil Lula obtuvo el 65% de los votos, mientras que en el sur y sudeste Alckmin logr¨® el 56% de los sufragios".
Esta vez, el mandatario parece haber captado exitosamente el 10% de los votantes que no optaron ni por ¨¦l ni por su rival m¨¢s cercano en la primera ronda, sino por los ex miembros del PT Heloisa Helena y Cristovam Buarque.
Alckmin tendr¨¢ hoy viernes la oportunidad final de torcer el destino cuando se enfrente a Lula en el ¨²ltimo debate televisivo antes de las elecciones, aunque parece improbable que lo logre.
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