Los poemas secretos de los presos de Guant¨¢namo
Un abogado de EE UU recopila las poes¨ªas que los internos usan para aliviar su cautiverio, y que el Pent¨¢gono considera peligrosas para la seguridad nacional
Con un guijarro, ara?¨® unas palabras en los bordes de un vaso de poliesp¨¢n, que luego fue pasando en secreto de celda en celda, hasta que los guardianes de la c¨¢rcel estadounidense de Guant¨¢namo descubrieron lo que se tra¨ªan los presos entre manos y destruyeron los recipientes. Tem¨ªan los soldados que esos escritos en ¨¢rabe fueran c¨®digos secretos que llamaran a la rebeli¨®n a los prisioneros. En realidad, eran versos que los internos usaban para animar su cautiverio. Algunos han sobrevivido al celo de los militares.
Una editorial estadounidense tiene previsto publicar este a?o una antolog¨ªa titulada Poemas de Guant¨¢namo: la voz de los detenidos, que re¨²ne 84 p¨¢ginas de estas poes¨ªas usadas para aliviar sus tormentos por los internos sin posibilidad de juicio de esta prisi¨®n estadounidense. Seg¨²n informa el diario brit¨¢nico The Independent, fueron recopilados por Marc Falkoff, profesor norteamericano de Derecho, doctorado adem¨¢s en Literatura, que dirige la defensa de 17 presos yemen¨ªes y que visit¨® en una decena de ocasiones Guant¨¢namo. La dedicatoria del libro reza: "A mis amigos al otro lado de la alambrada".
Fue en verano de 2005 cuando sus clientes le enviaron por primera vez dos poemas, escritos en ¨¢rabe, incluidos en sus cartas. Toda comunicaci¨®n de los internos con el exterior es revisada por los servicios de inteligencia norteamericanos; las poes¨ªas fueron consideradas peligrosas para la seguridad nacional, y a¨²n permanecen ocultas bajo la etiqueta de m¨¢ximo secreto.
Falkoff se puso en contacto entonces con otros abogados, y descubri¨® que a ellos tambi¨¦n les hab¨ªan enviado poemas. Hab¨ªa presos que, durante su cautiverio, escribieron poes¨ªa, entre ellos dos que ya han sido liberados, los brit¨¢nicos Moazzam Begg y Martin Mubanga, y que se llevaron consigo su obra fuera de los muros de la prisi¨®n cubana.
Pero en Guant¨¢namo la censura no deja pasar ni una. Para el Pent¨¢gono, "la poes¨ªa supone un riesgo extraordinario", de forma que no est¨¢ permitido filtrarla fuera de la prisi¨®n "en su forma y lenguaje original". Temen las autoridades norteamericanas que, entre las met¨¢foras, se escondan mensajes en clave.
Falkoff disiente. Asegura que si los presos dijeran cosas como "el ¨¢guila vuela al amanecer" quiz¨¢ tuvieran sentido los miedos de las autoridades militares, pero en su opini¨®n Washington no teme los c¨®digos secretos sino a que, al conocerse los poemas, la gente sepa que encerrados en Guant¨¢namo hay seres humanos que no tuvieron derecho a juicio. El Pent¨¢gono ni siquiera les permite tener acceso a bol¨ªgrafos y papel.
Poema de muerte
El diario brit¨¢nico The Independent reproduce un poema de Jumah al Dossari. Arrestado en Pakist¨¢n, est¨¢ en una celda de aislamiento desde 2003. Sus abogados est¨¢n preocupados por su salud mental. Tiene 33 a?os, y ha intentado suicidarse 12 veces desde que est¨¢ internado en Guant¨¢namo. En una de sus visitas, su abogado le encontr¨® colgando de una s¨¢bana. "El prop¨®sito de Guant¨¢namo es destruir a la gente, y a m¨ª me ha destruido", contaba en una carta en 2005.
Poema de muerte
Tomad mi sangre.
Tomad mi sudario de muerte y
Lo que queda de mi cuerpo.
Tomad fotograf¨ªas de mi cad¨¢ver en la tumba, solo.
Envi¨¢dselas al mundo,
A los jueces y
A la gente con conciencia,
Enviadlas a los hombres de principios y mente justa.
Y dejad que carguen con su culpa, ante el mundo,
Por este alma inocente.
Dejad que pese sobre ellos, ante sus hijos y ante la historia,
Este alma inocente destruida,
Este alma que ha sufrido a manos de los "protectores de la paz".
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