Cuba acusa a EE UU de alentar a la disidencia a cometer actos "subversivos"

El Gobierno de Ra¨²l Castro acus¨® ayer de nuevo a la Secci¨®n de Intereses de Estados Unidos (SINA) en La Habana de alentar a grupos opositores a realizar actos de "subversi¨®n", y advirti¨® que "no tolerar¨¢" actos de disidentes en las calles por el D¨ªa de la Independencia de EE UU que se celebrar¨¢ ma?ana, 4 de julio.

La canciller¨ªa cubana dice disponer de "informaci¨®n confirmada" sobre posibles "actividades ilegales" organizadas por la misi¨®n diplom¨¢tica, que puede estar "instigando a sus mercenarios en Cuba a realizar acciones provocadoras en la v¨ªa p¨²blica" coincidiendo con la fecha patri¨®tica estadounidense, seg¨²n un comunicado publicado en el diario Granma.

"El Gobierno de Cuba reitera claramente que no tolerar¨¢ la continuidad de estas provocaciones y acciones ilegales (...), y responsabiliza al Gobierno de los Estados Unidos por las consecuencias que puedan derivarse de su respuesta", enfatiza el texto del Ministerio de Relaciones Exteriores, que cita una serie de actividades opositoras con participaci¨®n de diplom¨¢ticos de EE UU en La Habana.

Entre ellas, menciona la realizaci¨®n de videoconferencias con disidentes y funcionarios de Estados Unidos desde la legaci¨®n o la casa del jefe de la SINA, Michael Parmly, as¨ª como la financiaci¨®n y organizaci¨®n de cursos para periodistas independientes.

La canciller¨ªa cubana asegura que funcionarios de la misi¨®n estadounidense contin¨²an dando "atenci¨®n personalizada" a dirigentes opositores, "a quienes visitan en sus propias viviendas y contactan de manera semiclandestina para darles indicaciones". Igualmente, acusa a la legaci¨®n de facilitar comunicaci¨®n por Internet y el suministro constante "de dinero, tel¨¦fonos celulares, medios de comunicaci¨®n, computadoras y propaganda contrarrevolucionaria".

Las autoridades cubanas demandan "el cese definitivo de las actividades injerencistas de aliento, organizaci¨®n, direcci¨®n, financiamiento y monitoreo de la contrarrevoluci¨®n interna", y acusan a la SINA de ser "puntal de la pol¨ªtica subversiva del Gobierno norteamericano y Estado Mayor de la contrarrevoluci¨®n interna". Washington, dice Granma, "urde y estimula" estas "provocaciones contrarrevolucionarias" como parte de su pol¨ªtica "dirigida a derrocar a la Revoluci¨®n cubana".

A finales de mayo, el Gobierno de La Habana acus¨® a Michael Parmly, quien concluye su misi¨®n en Cuba dentro de unos d¨ªas, de servir de "correo" de dinero enviado por exiliados y "terroristas" afincados en Miami a opositores en la isla. La SINA respondi¨® entonces que es "desde hace mucho tiempo la pol¨ªtica de Estados Unidos prestar asistencia humanitaria al pueblo cubano y espec¨ªficamente para proporcionar asistencia a las familias de los presos pol¨ªticos".

En 2003, ante una situaci¨®n parecida con la misi¨®n diplom¨¢tica de EE UU, a la que acusaban de la misma labor de incentivar de la subversi¨®n, las autoridades respondieron con el apresamiento de 75 opositores, condenados a penas de entre seis y 28 a?os de c¨¢rcel bajo cargos de trabajar para una potencia extranjera. En los ¨²ltimos cinco a?os, 20 de ellos fueron excarcelados con una licencia extrapenal por motivos de salud. Varios de ellos han emigrado a Espa?a y Estados Unidos.