"Ma?ana har¨¦ una barbacoa en condiciones"
La polic¨ªa alemana asegura que el joven que acab¨® este mi¨¦rcoles con 15 personas avis¨® de sus intenciones en Internet.- La mayor¨ªa de las v¨ªctimas del colegio son mujeres
El martes por la noche, Tim envi¨® un mensaje por Internet, que la polic¨ªa alemana est¨¢ investigando para comprobar su veracidad. "Estoy harto. Harto de esta vida horrible. Siempre lo mismo. La gente se r¨ªe de m¨ª. Nadie me aprecia. Lo digo en serio. Tengo armas; ma?ana ir¨¦ a mi ex colegio y har¨¦ una barbacoa en condiciones. Oir¨¢s hablar de m¨ª. Recuerda el nombre del sitio: Winnenden".
Naturalmente, los interlocutores de Tim Kretschmer no pod¨ªan imaginar que el chaval de 17 a?os cumplir¨ªa la amenaza lanzada en un chat de Internet. Que a la ma?ana siguiente, armado con una pistola y m¨¢s de 200 balas, se dirigir¨ªa al colegio Albertville y acabar¨ªa, all¨ª, con la vida de nueve estudiantes y tres profesoras . Que otras tres personas fallecer¨ªan por sus disparos antes de que el joven se quitara la vida.
El d¨ªa despu¨¦s de la masacre, en la calle del mercado, las cosas no distaban mucho de lo que puede suponerse un d¨ªa normal en la localidad de Winnenden. Entre las casas de paredes entramadas, t¨ªpicas del entorno rural en el sur alem¨¢n, se ofrec¨ªan frutas y verduras, pan, queso y otros productos de la regi¨®n. Pero las conversaciones eran otra cosa. Y al final de la v¨ªa peatonal que desemboca en una peque?a plaza de construcciones m¨¢s modernas, los abrazos con los que invariablemente se saludaban grupos de chicos y chicas delataban la magnitud de la pesadilla que sacudi¨® Winnenden, el peor ba?o de sangre que se recuerda en Baden W¨¹rtemberg.
Once de las doce v¨ªctimas mortales ca¨ªdas en el colegio eran mujeres. La polic¨ªa aclar¨® que muchas fueron asesinadas con un tiro en la cabeza, lo que indujo algunos a pensar en una particular aversi¨®n hacia las mujeres. Tim irrumpi¨® en tres clases con una pistola Beretta de 9 mil¨ªmetros de calibre de su padre. Algunas de las alumnas cayeron con los bolis todav¨ªa en sus manos.
La polic¨ªa investiga c¨®mo el muchacho, versado en el manejo de armas y la punter¨ªa, pudo abrir la caja fuerte donde guardaba el arma su padre. El fiscal jefe Siegfried Mahler ha informado de que el joven hab¨ªa estado en tratamiento psicol¨®gico por depresi¨®n en 2008. El propio Tim renunci¨® a continuar las consultas.
Velas y duelo
Mientras, ante los muros del recinto de la escuela Albertville, que comparte instalaciones con otras dos escuelas locales, se acumulaban cientos de velas, peluches y cartas, junto a centenares de flores y objetos de la vida diaria de los adolescentes. Hab¨ªa camisetas con el 7 del futbolista Cristiano Ronaldo y fotos y CDs de estrellas del pop alemanas. Alrededor se agrupaban j¨®venes alumnos de las escuelas, algunos lloraban mientras ca¨ªa una llovizna persistente que no alcanzaba para apagar las velas. De fondo se o¨ªa s¨®lo el murmullo de decenas de reporteros retransmitiendo y el golpeteo r¨ªtmico de las drizas de las banderas a media asta.
Los reporteros apenas inquieren ya a los muchachos. Ni sobre el joven Tim, de quien este jueves se ha dado como noticia detalles de su vida, como su afici¨®n a los videojuegos o su buena relaci¨®n con sus padres y su hermana, ni sobre las v¨ªctimas.
El perfil que hizo de ¨¦l el fiscal Mahler no daba gran cosa de extraordinario. Un muchacho no demasiado listo, aficionado al ordenador, no demasiado popular o atractivo en su escuela, pero "amable". Incluso obtuvo su graduado de secundaria. Con algunos problemas de depresi¨®n. Hay millones de chicos as¨ª en toda Europa.
Enfrente del recinto escolar de la Albertville est¨¢ el aula deportiva de las tres escuelas. Varios polic¨ªas montan all¨ª guardia para impedir el acceso de periodistas. Se habilit¨® como lugar de reuni¨®n para los j¨®venes, con refrescos y comida. Entraban psic¨®logos y profesores para ofrecer el primer apoyo a los afectados por los asesinatos. Todos se conocen en una localidad de 27.000 habitantes.
Despu¨¦s del gran circo montado estos d¨ªas, de las portadas en todo el mundo y los programas especiales en televisi¨®n, a los muchachos de Winnenden se les presenta un complicado regreso a la rutina escolar y a una normalidad que, por mucho que se parezca a lo que este jueves se ve¨ªa en la calle del mercado, todav¨ªa est¨¢ muy lejos.
Ataques contra escuelas europeas
- Nueve estudiantes y un profesor mueren en el noroeste de Finlandia acribillados por un alumno en septiembre de 2008 en un centro de formaci¨®n profesional. El agresor, de 22 a?os, se suicid¨®.
- Un joven de 18 a?os mata a tiros a ocho personas en otro instituto finland¨¦s en noviembre de 2007 antes de quitarse la vida. Las v¨ªctimas eran seis alumnos, la directora y una enfermera. El atacante era un buen estudiante seguidor de Hitler.
- 12 profesores, dos alumnos, una secretaria y un polic¨ªa mueren en Alemania en abril de 2002 tras los disparos de un joven de 19 a?os que no quiso hacer un examen en Erfurt. Poco despu¨¦s, se quit¨® la vida.
- Un parado escoc¨¦s de 44 a?os asesina a 16 ni?os y a la maestra en una guarder¨ªa en Dunblane antes de quitarse la vida en marzo de 1996.
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