Cuba ve con inquietud un acercamiento demasiado r¨¢pido a EE UU
Armando Hart, dirigente hist¨®rico de la revoluci¨®n: ''Si Obama cumple su promesa [de aliviar el embargo], nacer¨¢ una nueva etapa en el combate ideol¨®gico entre la revoluci¨®n cubana y el imperialismo"
Las autoridades de La Habana ven con inquietud la posibilidad de que EE UU levante "demasiado pronto" la prohibici¨®n que impide a los ciudadanos norteamericanos visitar Cuba. Al tiempo que se desea y se aprecia como una tabla de salvaci¨®n en estos momentos de crisis, el fin de la veda al turismo estadounidense es percibido como un reto, con un elevado potencial desestabilizador en el terreno pol¨ªtico e ideol¨®gico, seg¨²n observadores y diplom¨¢ticos.
El acercamiento entre Washington y La Habana ha sido m¨¢s que prudente en los primeros meses del gobierno Obama. Fuentes europeas aseguran que ambos pa¨ªses desean que as¨ª sea, pues nadie quiere que el fen¨®meno tome un rumbo descontrolado.
Obama ha firmado ya la ley de presupuestos, con una enmienda que permite que los cubanoamericanos realicen visitas familiares una vez al a?o (hasta ahora, por disposici¨®n de Bush, solo pod¨ªan viajar a la isla una vez cada tres a?os).
Sin embargo, se especula con la posibilidad de que antes de la Cumbre de las Am¨¦ricas, que se realizar¨¢ en Trinidad y Tobago entre el 17 y el 19 de abril, el presidente de Estados Unidos se descuelgue con un gesto unilateral hacia Cuba y elimine totalmente las restricciones a los viajes de cubanoamericanos y a las remesas que pueden enviar a la isla.
Esta medida, que ser¨ªa sobre todo un "gesto" de Washington hacia Am¨¦rica Latina, opuesta radicalmente al embargo norteamericano, afectar¨ªa a un mill¨®n y medio de cubanoamericanos. "Ya eso es un reto de consideraci¨®n", asegura un soci¨®logo cubano.
En estos momentos, adem¨¢s, est¨¢n en circulaci¨®n en el Congreso y el Senado dos proyectos de ley para poner fin a las medidas (de 1963) que impiden que turistas de EE UU visiten Cuba. El proyecto en el Senado tiene el nombre de Ley para la Libertad de Viajar a Cuba y es respaldado por la C¨¢mara de Comercio de Estados Unidos, la Federaci¨®n Agr¨ªcola de ese mismo pa¨ªs y ONG como Human Rights Watch.
El objetivo es que todos los estadounidenses puedan viajar libremente a Cuba, por el tiempo que quieran y las veces que quieran. Los defensores del proyecto consideran que la liberalizaci¨®n total de los viajes a la isla tender¨ªa un puente entre los dos pa¨ªses y servir¨ªa para alentar los cambios en la isla. "Creemos que entablar una relaci¨®n a trav¨¦s del comercio y los viajes es la mejor manera de promocionar la democracia", dijo el senador dem¨®crata Byron Dorgan, uno de sus promotores.
Es precisamente aqu¨ª donde est¨¢ el problema. Mucho antes de que ganara Obama, el dirigente hist¨®rico de la revoluci¨®n Armando Hart dijo claramente: ''Si cumple su promesa [de aliviar el embargo], nacer¨¢ una nueva etapa en el combate ideol¨®gico entre la revoluci¨®n cubana y el imperialismo. En ella (...) ser¨¢ necesario el dise?o de una nueva concepci¨®n te¨®rica y propagand¨ªstica acerca de nuestras ideas y su origen''. Y a?adi¨®: ''Una amplia migraci¨®n con distintos objetivos puede ven¨ªrsenos encima y para ello debemos prepararnos culturalmente''.
En realidad, el reto es doble. El turismo, con ingresos brutos de unos 2.000 millones de d¨®lares y 2.350.000 visitantes anuales, es el segundo aportador de divisas al pa¨ªs, despu¨¦s de los servicios m¨¦dicos y educacionales a Venezuela y otros pa¨ªses, calculados en 6.000 millones.
El turismo supone m¨¢s ingresos que las exportaciones de az¨²car, n¨ªquel y tabaco juntas y Cuba necesita ese dinero. Diversos estudios calculan que el primer a?o del levantamiento de la prohibici¨®n podr¨ªa viajar a Cuba un mill¨®n de turistas norteamericanos, y hasta tres millones anuales en los a?os siguientes.
En Cuba existen en la actualidad 46.500 habitaciones, 24.000 de ellas gestionadas por 13 cadenas hoteleras extranjeras. El promedio de ocupaci¨®n anual es del 60 %. Las inversiones para aumentar la planta hotelera no se han detenido pese a la crisis.
Las autoridades hasta ahora han sido sumamente prudentes. No se quiere decir que hay inquietud, tampoco demostrar demasiadas expectativas. La semana pasada, la viceministra de Turismo, Mar¨ªa Elena P¨¦rez, resto importancia a la posible avalancha de turistas estadounidenses que podr¨ªa venirse encima. "Para nosotros ese pa¨ªs como todos est¨¢ en el mundo, y para todos nos preparamos". Y agreg¨®: "Todav¨ªa Barack Obama no ha levantado el bloqueo".
Aunque nadie quiere hablar de pol¨ªtica, los tiros van por donde dijo el hist¨®rico Hart: Cuba tiene "el reto inmenso de c¨®mo enfrentar un tiempo nuevo en la lucha cultural contra el enemigo". En estos momentos visitan la isla siete congresistas dem¨®cratas de EEUU opuestos al embargo. Visitar¨¢n la playa de Varadero. Ya han dicho que la mejor forma de contribuir a la democratizaci¨®n en Cuba es incrementar los contactos. Que viajen los turistas... Contaminar, piensan tanto en EEUU como en Cuba.

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.