"Estamos convencidos de que el movimiento verde no se va a acabar aqu¨ª"

Un estudiante europeo radicado en Teher¨¢n nos cuenta sus impresiones en directo sobre la manifestaci¨®n. Nos advierte de que, hasta ahora, cada vez que acud¨ªa a una protesta callejera, cuando se acercaba al n¨²cleo de la manifestaci¨®n, los m¨®viles quedaban sin se?al. Hab¨ªa miedo de que hubiera enfrentamientos, porque se hab¨ªan convocado dos manifestaciones de ambos bandos en el mismo sitio, por lo que el l¨ªder reformista Musav¨ª recomend¨® a sus seguidores que no acudieran a la manifestaci¨®n para "no poner en riesgo su vida". Pero espont¨¢neamente se han organizado para concentrarse en otro punto de la ciudad, la plaza de Van Ak en el norte de la avenida Vali Asr a una distancia de los seguidores de Mahmud Ahmadineyad de 10 minutos en coche. Intentaremos seguir la marcha minuto a minuto y si se corta, reanudaremos despu¨¦s la comunicaci¨®n con nuestro interlocutor en Teher¨¢n. La hora aproximada de inicio de la manifestaci¨®n es las 17.30 en Ir¨¢n, 15.00 horas en la Espa?a peninsular.

16.48 horas. Ya se disuelve la manifestaci¨®n despu¨¦s de un rato en el que hemos hecho una sentada. Ha pasado por aqu¨ª la hija de Rafsanjan¨ª, el ex presidente que ha apoyado a Musav¨ª, y ha dicho unas palabras, se ha armado un alboroto en torno a ella porque no ten¨ªa meg¨¢fono y todo el mundo quer¨ªa enterarse de sus palabras. Yo no he podido escucharla bien. Por lo general se ha guardado silencio, aunque la gente est¨¢ dividida sobre si hay que dar consignas o quedarnos callados.

La gente est¨¢ convencida de que el movimiento verde no se va a acabar aqu¨ª. Para ma?ana nos hemos convocado de nuevo a las 17.00 horas en la plaza de Hafte Tir, que es un lugar mucho m¨¢s c¨¦ntrico. Y por la noche, a las 21.00 horas, como estos ¨²ltimos d¨ªas, subiremos a las azoteas a gritar contra Ahmadineyad. El ¨¢nimo sigue siendo grande porque se ha manifestado much¨ªsima gente a pesar de las estratagemas del poder para hacer creer que la manifestaci¨®n se hab¨ªa cancelado o que iba a haber choques violentos

16.00 horas. Estamos junto al edificio de la televisi¨®n p¨²blica iran¨ª. El ambiente es tranquilo y la gente respeta la consigna de guardar silencio. Hay una valla verde en la puerta delante m¨ªa y una zona arbolada pero no hay polic¨ªas que guarden la entrada del edificio, o al menos en apariencia, porque lo que todo el mundo sabe es que hay polic¨ªa secreta. El ambiente de miedo es tal que me he encontrado con un manifestante que portaba un cartel en espa?ol que pon¨ªa "?D¨®nde est¨¢ mi voto?" y no me quer¨ªa responder, tan s¨®lo me ha dicho que es un estudiante de ciencias pol¨ªticas, pero no quer¨ªa hablarme. En Teher¨¢n (12 millones de habitantes) calculo que seremos un centenar los estudiantes espa?oles.

15.20 horas. Ha llegado un grupo de miles de personas desde el sur y son mucho m¨¢s j¨®venes que los que estaban aqu¨ª hasta ahora. Todos de veintitantos a?os y de clases sociales mucho m¨¢s diverdas. Aqu¨ª en medio es dif¨ªcil decir cu¨¢nta gente somos. De edad bastante inferior a los que ya est¨¢bamos de unos veintipocos a?o y clases sociales m¨¢s diversas. Siempre hay polic¨ªa secreta entre los manifestantes, as¨ª que aqu¨ª en mitad de la manifestaci¨®n tengo cierto miedo a que se fijen en m¨ª por hablar un idioma extranjero. Del grupo de personas con el que me muevo soy el ¨²nico extranjero. Mis amigos iran¨ªes son arquitectos, ingenieros inform¨¢ticos... (todos entre los 25 y 50 a?os). Nos estamos aproximando hacia el edificio de la radio televisi¨®n iran¨ª por la Avenida Vali Asr, que es como la Castellana de Teher¨¢n y vamos all¨ª precisamente porque la televisi¨®n ha sido un instrumento de manipulaci¨®n y censura. Se empieza a hablar de que tenemos que movernos m¨¢s hacia el norte de la ciudad, hacia un lugar donde el otro d¨ªa se tom¨® una comisar¨ªa durante varias horas

15.00 horas. Est¨¢ llegando gente en peque?os grupos desde el sur, estamos en la avenida Vali Asr, que es una avenida que atraviesa teher¨¢n de norte a sur, donde el pasado martes se hizo una cadena humana que atravesaba toda la ciudad y que llamamos la l¨ªnea verde. Hace un momento se escuchaban los primeros pitos y palmadas y de momento la cosa est¨¢ tranquila. Habr¨¢ unas 1.000 personas. Veo bastantes mujeres delante de m¨ª. En su mayor¨ªa son gente de apariencia acomodada. No tan humilde, como la que se ha sumado a las manifestaciones en los ¨²ltimos d¨ªas. En cuanto a sus edades, la mayor¨ªa est¨¢ entre los 20 y muchos y 40 y tantos. Las mujeres vienen casi todas de negro y los pa?uelos verdes en las manos. Est¨¢ todo el mundo en silencio. Las pancartas, la mayor¨ªa en persa, algunas en ingl¨¦s, rezan "?Qu¨¦ ha pasado con mi voto?", "Esto no es una elecci¨®n. Esto es una selecci¨®n", "Ay como Mussav¨ª me llame a la guerra santa", (que es un eslogan tradicional en Ir¨¢n s¨®lo que ahora se ha cambiado el nombre propio por el de Mussav¨ª). "Por favor silencio, silencio, silencio..." Otros llevan fotos de Mussav¨ª.

He hablado con gente que est¨¢ en el primer punto de concentraci¨®n y que dice que all¨ª s¨®lo hay manifestantes a favor de Ahmadineyad. Aqu¨ª entre nosotros hay un rumor de que viene gente de Ahmadineyad y los Basiyis hacia donde estamos, pero en estos d¨ªas no para de haber rumores, por la censura en los medios de comunicaci¨®n.

14. 50. horas No hay mucha gente ahora mismo. Estoy en la calle donde est¨¢ la radio televisi¨®n iran¨ª y donde se espera que venga la gente. Nosotros estamos repartiendo pa?uelos verdes. Me dicen que viene mucha gente hasta nuestro punto. Desde el coche ¨ªbamos grit¨¢ndole a la gente para comunicarles el nuevo punto de reuni¨®n. La gente se ha tenido que enterar del nuevo punto de reuni¨®n por el boca a boca, por tel¨¦fono, por el messenger, emails... El messenger de Yahoo, que aqu¨ª en Ir¨¢n es el m¨¢s usado ha dejado de funcionar hace tres horas. Nos tememos que en breve lleguen los Basiyis, los milicianos de Ahmadineyad a dispersarnos...

14.45 horas Hasta ahora nos comunic¨¢bamos los estudiantes a trav¨¦s de Facebook. Pero conectarse a Internet es realmente complicado. Ten¨ªamos previsto manifestarnos en el mismo sitio que los seguidores de Ahmadineyad pero hemos cambiado de lugar para evitar m¨¢s violencia. Esas bocinas de autos que se oyen son nuestras y de otra gente que va a la manifestaci¨®n. Ya estamos llegando.

Relato de ?ngeles Espinosa desde Teher¨¢n