Buenos Aires recuerda a Ayala

Francisco Ayala escribi¨® en Argentina alguno de sus libros m¨¢s importantes. Fue en Buenos Aires donde edit¨® la revista Realidad, considerada como una de las publicaciones intelectuales m¨¢s destacadas de su ¨¦poca, y donde vivi¨® de los 33 a los 43 a?os, en pleno estallido de su capacidad creativa. Para preservar esa memoria, Buenos Aires ha sido escenario de un homenaje, con un debate sobre su obra y la colocaci¨®n de una placa en la primera casa en la que vivi¨®, al que han asistido su viuda, la hispanista estadounidense Carolyn Richmond, y su hermano Vicente, de 98 a?os, que sigue viviendo en la capital porte?a. "Argentina es donde Francisco se sinti¨® m¨¢s feliz y donde alcanz¨® su plenitud como escritor y pensador", asegura Richmond.

Ayala lleg¨® a Buenos Aires al fin de la Guerra Civil espa?ola, profundamente herido por el fusilamiento de su padre y de un hermano, y encontr¨® en el ambiente cultural e intelectual de la capital argentina el impulso necesario para retomar su propia obra, rehusar la nostalgia y encarar una nueva realidad, una actitud que, seg¨²n su viuda, le acompa?¨® toda la vida. En un emotivo mensaje que fue grabado poco antes de su muerte, ocurrida el pasado 3 de noviembre, y que se pudo ver en el acto celebrado en el Centro Cultural espa?ol, Ayala renueva su afecto a tantos amigos argentinos a los que "en este momento tard¨ªo, cerca del final", afirma, "recuerdo con verdadera alegr¨ªa y verdadera gratitud".

Sus amigos han promovido la colocaci¨®n de una placa que recuerda al "escritor de novelas y testigo alerta de su tiempo" que vivi¨® en un piso en el n¨²mero 441 de la calle Defensa, un elegante edificio racionalista del c¨¦ntrico barrio de San Telmo. Desde all¨ª Francisco Ayala pod¨ªa ir andando a las editoriales Losada y Sudamericana, con las que colabor¨®, y a la redacci¨®n de Realidad, revista de ideas, uno de sus grandes empe?os, en la que qued¨® r¨¢pidamente reflejada su lucidez cr¨ªtica y la preocupaci¨®n moral que impregnar¨ªa toda su obra.

El poeta Luis Garc¨ªa Montero, que ha escrito una biograf¨ªa de Ayala y que mantuvo una estrecha amistad con ¨¦l, resalt¨® la modernidad de la revista y el editorial del primer n¨²mero, que escribi¨® Ayala, y que contiene una declaraci¨®n de intenciones "que los acontecimientos hist¨®ricos han sobrecargado de lucidez". El impresionante editorial afirmaba: "Occidente debe alcanzar conciencia de s¨ª, de sus ra¨ªces y fundamentos, de lo que en ¨¦l es accidente y de lo que es esencia, de sus limitaciones y posibilidades. Debe tambi¨¦n abarcar su crisis, entenderla, juzgarla, arbitrar los medios para salir de ella (...) En el aspecto exterior, debe abrirse a una comprensi¨®n m¨¢s generosa y cabal de las otras culturas, para respetar en ellas su derecho, para incorporar aquellos valores que resulten admisibles sin desmedro de la peculiaridad propia".

En Realidad, que se public¨® en Buenos Aires entre 1947 y 1949, escribieron desde Heidegger y Arnold Toynbee, hasta T.S. Eliot o Jean Paul Sartre, pasando por otros miembros de la Generaci¨®n del 27 y la mayor¨ªa de los grandes escritores argentinos, incluido un jovenc¨ªsimo Julio Cort¨¢zar.

Francisco Ayala abandon¨® la capital porte?a en 1949, camino de Puerto Rico y posteriormente de Estados Unidos, donde desarroll¨® una fecunda labor como profesor, pero siempre cuid¨® sus lazos con Argentina. "Buenos Aires fue una vida nueva y la oportunidad de hacer las paces", afirma Carolyn Richmond.