La OTAN garantiza 7.000 soldados para la guerra en Afganist¨¢n

Los ministros de Exteriores de la OTAN y dem¨¢s pa¨ªses participantes en la guerra de Afganist¨¢n han ofrecido un s¨®lido respaldo a la nueva estrategia de Barack Obama, con promesas de soldados de al menos 25 Gobiernos que acumulan ya alrededor de 7.000 soldados. Esas fuerzas se sumar¨¢n a los 30.000 militares anunciados por Obama el pr¨®ximo a?o, con lo que el total de tropas internacionales en el pa¨ªs asi¨¢tico rondar¨¢ las 140.000. Ese reforzamiento castrense se considera crucial para crear las condiciones de salida militar a partir de mediados de 2011. La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, ha dicho sentirse "conmovida" por las muestra de apoyo recibidas en Bruselas.

En la reuni¨®n han participado representantes de 44 pa¨ªses, gracias a la entrada de Corea del Sur en la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF, por sus siglas en ingl¨¦s). Aliados y socios "dejaron claro que a pesar de las incertidumbres y bajas sufridas seguir¨¢n unidos en la misi¨®n", seg¨²n Anders Fogh Rasmussen, quien ha hecho hincapi¨¦ en que los pa¨ªses apoyaban con hechos sus palabras de apoyo: "Al menos 25 han ofrecido alrededor de 7.000 soldados y m¨¢s que vendr¨¢n".

La determinaci¨®n de qui¨¦n ha ofrecido qu¨¦ (los 25 son parte de los 44 pa¨ªses de la ISAF, no de los 28 miembros de la OTAN) quedar¨¢ para m¨¢s adelante y empezar¨¢ a concretarse el lunes en una reuni¨®n t¨¦cnica de responsables militares para contabilizar recursos y capacidades. Algunos pa¨ªses prometieron participar en el nuevo esfuerzo, pero se dieron tiempo para evaluar posibilidades y cumplir tr¨¢mites nacionales internos. Fue el caso de Espa?a. "Estamos estudiando de qu¨¦ manera vamos a contribuir", se?al¨® a sus colegas Miguel ?ngel Moratinos, jefe de la diplomacia espa?ola. Moratinos supedit¨® la decisi¨®n a consultas entre los ministerios de Defensa y de Exteriores, a la informaci¨®n en el seno del Gobierno y "a la luz verde del Parlamento". Seg¨²n ¨¦l, el calendario depender¨¢ s¨®lo del desarrollo de la evaluaci¨®n y no de la conferencia de Londres sobre Afganist¨¢n convocada para finales de enero. Los planes que baraja Madrid suponen 420 soldados adicionales para Afganist¨¢n en 2010.

"Que s¨®lo tres d¨ªas despu¨¦s de que hablara Obama haya 25 pa¨ªses que han ofrecido 7.000 soldados es una respuesta clara a quienes dudaban de que la comunidad internacional fuera a estar a la altura del desaf¨ªo", ha apuntado David Miliband, secretario del Foreign Office brit¨¢nico, resumiendo la sensaci¨®n reinante de ¨¦xito en el empe?o de lo que una fuente diplom¨¢tica consider¨® como el "¨²ltimo esfuerzo de la comunidad internacional en Afganist¨¢n".

Francia y Alemania

Los silencios coyunturales de Francia y Alemania, los dos principales pa¨ªses europeos contribuyentes en tropas, tras Reino Unido, han quitado brillo a la ocasi¨®n. Pero no cerraron la puerta a nuevas contribuciones. "No hay ning¨²n refuerzo de nuestros efectivos previsto antes de la conferencia de Londres", ha declarado el ministro franc¨¦s de Exteriores, Bernard Kouchner, quien pidi¨® que no se confundiera misi¨®n con n¨²mero de soldados. Par¨ªs no va a dejar la misi¨®n que tiene encomendada y "ajustar¨¢ los efectivos a las circunstancias", ha precisado el ministro. Kouchner dej¨® sentado que al igual que ya se hab¨ªan "ajustado al alza" los efectivos hasta casi 4.000 se podr¨ªa volver a hacer. El novel ministro alem¨¢n de Exteriores, Guido Westerwelle, ha enfatizado que Berl¨ªn esta dispuesto a hacer m¨¢s por la reconstrucci¨®n de Afganist¨¢n, "en especial en la formaci¨®n de polic¨ªa".

Los parabienes por los soldados prometidos y por ofrecer disimulan la aut¨¦ntica dimensi¨®n de la demanda, lo que facilita el hablar de satisfacci¨®n. Estados Unidos va a enviar 30.000 soldados y fuentes del Pent¨¢gono se?alaban en d¨ªas pasados que deseaban ver a los restantes socios de la ISAF contribuir con otros 10.000. Robert Gates, el secretario de Defensa, redujo luego las ambiciones a una horquilla de 5.000-7.000 y Clinton no ha respondido a la clara pregunta de cu¨¢ntos efectivos esperaba Washington de sus aliados. Pero se dijo "muy satisfecha y conmovida" por las promesas recibidas de nuevas tropas.

La secretaria de Estado ha reconocido que las cifras que se barajan cubren actividades de diversos tipos si bien ha se?alado que quienes lleguen a Afganist¨¢n como instructores no lo ser¨¢n en exclusividad: adem¨¢s de formar soldados, les acompa?ar¨¢n en sus acciones y participar¨¢n con ellos en combates llegado el momento.

"Urgen fuerzas adicionales, pero su presencia no ser¨¢ indefinida", ha explicado Clinton mientras recordaba que en julio de 2011 empezar¨¢ la transferencia de responsabilidad a las fuerzas de seguridad afganas. La secretaria de Estado insisti¨® en la necesidad de acompasar la campa?a militar con un programa de asistencia civil.

Hasta Rusia se sum¨® a la campa?a internacional en Afganist¨¢n con promesas de colaborar m¨¢s con la ISAF, con la que ya tiene suscritos pactos para tr¨¢nsito de equipos y soldados por su territorio camino del pa¨ªs asi¨¢tico. "Tendremos ocasi¨®n de hablar de ello en semanas y meses venideros", ha adelantado Rasmussen.

La OTAN y Rusia han mantenido en Bruselas su primera reuni¨®n a nivel ministerial desde el congelamiento de relaciones producido por la guerra de agosto de 2008 en Georgia y sentaron las bases para cooperaciones futuras. Donde no hay acuerdo es en la arquitectura europea de seguridad que el Kremlin ambiciona discutir en el seno de la OTAN. "Queremos que quede claro en un tratado que la seguridad de un pa¨ªs no se puede reforzar en detrimento de la seguridad de otros pa¨ªs", explic¨® Sergei Lavrov, el ministro ruso de Exteriores. Para la OTAN es obvio que eso supondr¨ªa conceder a Moscu derecho de veto sobre sus propios planes. A lo que responde Lavrov como si fuera un inocente: "No hay ninguna intenci¨®n oculta, ni veto ni nada. Las inquietudes est¨¢n injustificadas".