Livni cancela un viaje a Londres por temor a ser detenida

La guerra de Gaza desatada el invierno pasado pasa factura pol¨ªtica y diplom¨¢tica a Israel. S¨®lo hace cuatro a?os, la noticia de que una instituci¨®n acad¨¦mica impulsaba un boicot contra una universidad hebrea no era m¨¢s que un aislado pie de p¨¢gina. Desde hace un a?o, las iniciativas para deslegitimar las decisiones b¨¦licas israel¨ªes florecen como hongos en los pa¨ªses occidentales, y el fen¨®meno adquiere notoriedad paulatinamente: los l¨ªderes israel¨ªes afrontan ahora querellas criminales y ¨®rdenes de detenci¨®n con frecuencia creciente. Aunque ning¨²n Estado de la UE apuesta por un dr¨¢stico boicot a Israel, las demandas ante sus tribunales fuerzan a dirigentes como Tzipi Livni, jefa de la oposici¨®n, a cancelar un viaje a Londres para pronunciar una conferencia. Los preocupados gobernantes israel¨ªes recurren a la presi¨®n diplom¨¢tica feroz ante cada episodio judicial en Europa.

Livni, que suspendi¨® su partida el domingo a ¨²ltima hora, integraba la c¨²pula de los dirigentes que decidieron el brutal ataque a Gaza el invierno pasado, una guerra en la que se cometieron cr¨ªmenes de guerra, a juicio del juez surafricano Richard Goldstone, al que han llegado a tildar de "nazi" desde el partido que dirige el Gobierno, el derechista Likud. Murieron 1.400 palestinos, la gran mayor¨ªa de ellos civiles, en los 23 d¨ªas de una ofensiva a¨¦rea, terrestre y mar¨ªtima que el Gobierno israel¨ª rechaza investigar mediante una comisi¨®n independiente, lo que abortar¨ªa un eventual juicio en el Tribunal Penal Internacional. "Israel debe hacer lo que es adecuado para Israel, a pesar de los juicios, declaraciones y ¨®rdenes de detenci¨®n. Es la obligaci¨®n del liderazgo. Adoptar¨ªa (de nuevo) cada una de mis decisiones", ha afirmado la ex responsable de Exteriores.

No est¨¢ sola. El viceprimer ministro Moshe Yaalon; el ex jefe del Estado Mayor y ex ministro de Defensa Sa¨²l Mofaz, y el titular de Defensa, Ehud Barak, se hallan en situaci¨®n similar a la de Livni, ya sea por motivo de la guerra de Gaza o por otros asesinatos de jefes militares palestinos ordenados en los ¨²ltimos a?os y en los que tambi¨¦n perecieron civiles.

Las organizaciones palestinas -conscientes de que acudir a los tribunales israel¨ªes cuando de agresiones del Ej¨¦rcito se trata es pedir peras al olmo y de que a la Autoridad Palestina le cuesta horrores defender los procesamientos en los tribunales internacionales- se aferran a la legislaci¨®n de varios pa¨ªses europeos que permite la imputaci¨®n por cr¨ªmenes de guerra o cr¨ªmenes contra la humanidad, independientemente del lugar en el que se perpetraron y de la nacionalidad de sus autores. A este respecto, el Ministerio de Exteriores israel¨ª, al¨¦rgico a cualquier injerencia en sus asuntos internos, se permiti¨® conminar al Gobierno de Londres a iniciar reformas legislativas con tono amenazador. "Rechazamos esta c¨ªnica decisi¨®n legal contra Livni que fue iniciada por elementos radicales. Si el Reino Unido no enmienda inmediatamente la ley que permite las ¨®rdenes de detenci¨®n contra funcionarios israel¨ªes, las relaciones entre nuestros pa¨ªses sufrir¨¢n". Otros pa¨ªses, como Espa?a, ya han procedido a modificar la legislaci¨®n para evitar que jefes militares o pol¨ªticos israel¨ªes puedan ser juzgados en territorio espa?ol.

Las relaciones entre Tel Aviv y Londres ya sufrieron el 10 de diciembre. El Ejecutivo de Gordon Brown recomend¨® entonces a los comerciantes brit¨¢nicos que etiquetaran claramente los productos elaborados en las colonias de la Cisjordania ocupada para que el consumidor conozca el origen de la mercanc¨ªa. "Esto es una capitulaci¨®n ante los palestinos y las organizaciones pro-palestinas que da?a el proceso de paz en Oriente Medio en una coyuntura cr¨ªtica...", afirm¨® aquel d¨ªa Yossi Levy, alto funcionario de la diplomacia israel¨ª. Es el argumento empleado hasta el aburrimiento por un Ejecutivo que torpedea la reanudaci¨®n de las negociaciones.

La canciller¨ªa israel¨ª insiste tras el asunto Livni: "Si los l¨ªderes israel¨ªes no pueden visitar el Reino Unido de manera honorable, ello ser¨¢ un obst¨¢culo real al deseo brit¨¢nico de asumir un papel activo en el proceso de paz". Es el mismo ministerio cuyos funcionarios echan pestes de la implicaci¨®n de los pa¨ªses europeos en el conflicto con los palestinos. El Foreign Office trat¨® de calmar ¨¢nimos. "El Reino Unido est¨¢ decidido a hacer todo lo posible para promover la paz en Oriente Medio y para ser un socio estrat¨¦gico de Israel. Para eso los l¨ªderes israel¨ªes deben poder visitar el Reino Unido para conversar con el Gobierno. Observamos urgentemente las implicaciones de este caso", reza el comunicado.

Israel pierde prestigio a ritmo acelerado. Sus v¨ªnculos con los pa¨ªses ¨¢rabes no van m¨¢s all¨¢ de una paz g¨¦lida con Jordania y Egipto, por mucho que los islamistas -El Cairo se ha sumado entusiasmado al asedio de la Gaza gobernada por Ham¨¢s- sean el enemigo com¨²n. No es un problema acuciante para Tel Aviv. M¨¢s preocupante es el deterioro de las relaciones con Turqu¨ªa, el ¨²nico pa¨ªs musulm¨¢n que ha suscrito un acuerdo de cooperaci¨®n militar con Israel y que meses atr¨¢s vet¨® la participaci¨®n del Ej¨¦rcito israel¨ª en unas maniobras conjuntas. Los turistas israel¨ªes apenas visitan Estambul y las playas del Egeo, uno de sus destinos favoritos. Y peor es el ambiente que se respira cuando hace su aparici¨®n un l¨ªder hebreo en foros acad¨¦micos, incluido los de Estados Unidos. El ex primer ministro Ehud Olmert, principal responsable de la invasi¨®n y del bloqueo a Gaza, soport¨® este oto?o interrupciones al grito de "asesino" en universidades estadounidenses.

En Europa, se suceden los llamamientos al boicot de Israel, un fen¨®meno que cobra vigor y que provoca reacciones airadas del Ejecutivo hebreo. El Gobierno noruego decret¨® recientemente que los fondos de pensiones desinviertan en algunas empresas israel¨ªes del ramo militar. En los ¨²ltimos meses, universidades noruegas, sindicatos franceses y brit¨¢nicos reclaman el boicot a los profesores y productos israel¨ªes. Las relaciones con Suecia est¨¢n bajo m¨ªnimos tras la propuesta de Estocolmo de que la UE respalde Jerusal¨¦n Este como capital de un Estado palestino y despu¨¦s de que Israel tildara, indirecta pero n¨ªtidamente, a Suecia de irresponsable y poco razonable. Los ataques verbales a los deportistas se suceden en las canchas. M¨¢s all¨¢ de un pu?ado de activistas, catedr¨¢ticos y periodistas israel¨ªes, que reclaman el boicot al estilo surafricano para doblegar la intransigencia de los Ejecutivos israel¨ªes, la poblaci¨®n se adhiere al discurso oficial.

"Prolongamos la ocupaci¨®n; encubrimos lo que sucedi¨® en Gaza; escondimos lo acaecido en la segunda guerra de L¨ªbano; construimos m¨¢s y m¨¢s en los asentamientos; siempre enga?amos a todos... El mundo est¨¢ empezando a hacerse preguntas y a perder la paciencia. Ya hemos sido juzgados en rebeld¨ªa", escrib¨ªa pocas semanas atr¨¢s el periodista israel¨ª Gideon Levy.