Espa?a descarta implantar esc¨¢neres corporales en los aeropuertos sin un acuerdo en la UE
Fomento asegura que la aplicaci¨®n de nuevas medidas de seguridad debe ser compatible con la intimidad de los viajeros.- Bruselas quiere analizar su impacto en la salud y la privacidad de los pasajeros
El ministro de Fomento, Jos¨¦ Blanco, ha descartado que el Gobierno espa?ol adopte "medidas adicionales" en materia de seguridad a¨¦rea, como la implantaci¨®n de los pol¨¦micos esc¨¢neres corporales, hasta que no haya un acuerdo sobre esta cuesti¨®n en el seno de la Uni¨®n Europea (UE), m¨¢s all¨¢ de las ya aplicadas a instancias de Estados Unidos para "extremar la vigilancia" de pasajeros que viajen a dicho pa¨ªs. Ayer, Reino Unido confirm¨® que usar¨¢ los esc¨¢neres corporales, al igual que ya hizo Holanda.
En declaraciones a Europa Press, Blanco ha se?alado que el Ejecutivo espa?ol, al igual que el Consejo de Ministros de Transportes de la UE, "ha abierto una reflexi¨®n" acerca de c¨®mo mejorar la seguridad aeroportuaria "facilit¨¢doles la vida a los pasajeros", a trav¨¦s de la introducci¨®n de "nuevas tecnolog¨ªas". En este sentido, ha recalcado que los ministros de Transportes de la UE no han alcanzado un acuerdo porque en la puesta en marcha de nuevas medidas de seguridad se debe "compatibilizar" con la libertad e intimidad de las personas". Blanco ha se?alado que ¨¦l mismo, como ministro del Fomento durante la presidencia espa?ola de la Uni¨®n europea, est¨¢ obligado a "hacer una reflexi¨®n", pero ha a?adido que Espa?a esperar¨¢ a que el Consejo Europeo adopte una "resoluci¨®n".
Asimismo, ha indicado que esta cuesti¨®n "no est¨¢ en la agenda" de la reuni¨®n que mantendr¨¢ el pr¨®ximo 13 de enero con su hom¨®logo estadounidense, ya que se centrar¨¢ en impulsar las negociaciones sobre el "cielo ¨²nico" entre Europa y EE UU, para flexibilizar las condiciones de uso del espacio a¨¦reo, un acuerdo que Blanco quiere cerrar antes de que finalice la Presidencia espa?ola de la Uni¨®n Europea. No obstante, ha dicho que si "surge" el debate sobre el uso de nuevas tecnolog¨ªas para mejorar la seguridad de los controles de los aeropuertos, se abordar¨¢ durante dicha reuni¨®n. "No hay duda de que ser¨¢ una buena ocasi¨®n para hacer un reflexi¨®n con mi colega norteamericano", ha agregado.
La postura de la UE
En materia de seguridad, tras el atentado frustrado en el avi¨®n con destino a Detroit el d¨ªa de Navidad, Blanco ha recordado que, a petici¨®n de este pa¨ªs, se ha reforzado en los aeropuertos "el control de los viajeros" que viajan a EE UU y que, en general, se siguen aplicando las normas de seguridad europeas, que son "buenas medidas de seguridad". No obstante, ha admitido que "siempre hay que extremar la precauci¨®n" y, por ello, ha afirmado que en los aeropuertos se ha tomado "alguna medida" en ese sentido, pero no quiso precisarla para "no dar pistas al enemigo".
Por su parte, una portavoz del Ejecutivo comunitario, Barbara Helfferich, ha se?alado hoy que la Comisi¨®n Europea quiere analizar el impacto que pueden tener los esc¨¢neres corporales en la salud y la privacidad de los pasajeros a¨¦reos. La portavoz ha recordado que en la actualidad no hay ninguna norma que impida a los Estados miembros introducir el uso de este tipo de esc¨¢neres y que, de hecho, ya se han probado en diferentes aeropuertos. "No hay un marco europeo sobre su uso, por lo tanto los Estados miembros los pueden usar mientras ninguna legislaci¨®n nacional o europea lo impida", ha subrayado Helfferich.
El Ejecutivo comunitario se vio obligado a abandonar en noviembre de 2008 la idea de introducirlos en el cat¨¢logo de medidas de seguridad que pueden usarse en los aeropuertos debido a las reticencias mostradas por la Euroc¨¢mara y por algunos Estados miembros como Alemania. El Parlamento Europeo expres¨® sus reservas sobre la utilizaci¨®n de esta herramienta al considerar que esta medida podr¨ªa tener un impacto grave en los derechos fundamentales de los ciudadanos y pidi¨® entonces a la Comisi¨®n que recabara m¨¢s informaci¨®n sobre las repercusiones en la salud y en la dignidad humana antes de decidir si aprobaba o no el uso de estas m¨¢quinas.
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