El Dr. Curman, un fot¨®grafo sueco por la Andaluc¨ªa del XIX

Carl Curman (1833-1913) era el t¨ªpico fot¨®grafo aficionado del siglo XIX. M¨¦dico de carrera , ten¨ªa una mente cient¨ªfica, como muchos de los primeros fot¨®grafos. Mostr¨® inquietud por el arte , y era graduado en escultura por la escuela de arte de Estocolmo, aunque jam¨¢s llegara a destacar con el cincel. Y sobre todo el Dr. Curman pertenec¨ªa a una clase media alta que pod¨ªa permitirse tener una c¨¢mara y revelar sus propias placas.

El m¨¦dico contrajo matrimonio con Calla Lundstr?m cuando contaba con 43 a?os. Ella era una joven viuda de 26 a?os hija de un pudiente industrial. En 1878, siguiendo la tradici¨®n de la clase adinerada de la ¨¦poca, los reci¨¦n casados eligieron para su luna de miel un destino que coleaba a¨²n en el ideario del romanticismo: Espa?a.

"Carl tom¨® fotograf¨ªas durante su viaje, muchas de ellas en la Alhambra", cuenta Anna Boman, responsable del archivo Curman en la Swedish National Heritage , una agencia gubernamental sueca dedicada a la recopilaci¨®n de material hist¨®rico. La instituci¨®n ha publicado en la red social de fotograf¨ªa Flickr parte de su legado fotogr¨¢fico, incluidas las fotos que hizo en 1878. De ese viaje cuenta con 90 copias originales, de las cuales 30 ya han sido subidas a la red social, sin restricciones de derechos de autor. La mayor¨ªa de ellas fueron hechas con la t¨¦cnica de la cianotipia, que no necesitaba de un cuarto oscuro para revelar.

"Hemos tenido la suerte de, a trav¨¦s de la ayuda de los usuarios de Flickr, poder identificar muchos pueblos y edificios de los cuales desconoc¨ªamos el nombre", asegura Boman. "Es muy ¨²til para nosotros publicar fotos en Flickr para mejorar la informaci¨®n sobre ellas", insiste la responsable del archivo.

Adem¨¢s de paisajes y edificios como la Alahambra o el Puente Nuevo de Ronda, Curman tom¨® retratos de espa?oles de la ¨¦poca, muchos de ellos campesinos o de gitanas. Tambi¨¦n inmortaliz¨® a su mujer vestida a la espa?ola, con mantilla y blandiendo un abanico.

Los paisajes abundan en las im¨¢genes de este fot¨®grafo aficionado; pero tambi¨¦n retrat¨® a personas de su entorno, en la quietud necesaria para las largas exposiciones que exig¨ªa el material fotosensible de la ¨¦poca. El ¨²nico referente que ten¨ªan estos primeros fot¨®grafos del XIX era los pintores, y en la fotograf¨ªa de Curman se ve ese tratamiento pict¨®rico de la composici¨®n. Su trabajo como especialista en tratamientos con aguas medicinales, le llev¨® a recorrer gran parte de la regi¨®n escandinava, con su c¨¢mara como acompa?ante. Tambi¨¦n en Espa?a dedic¨® parte de su viaje de novios a investigar sobre el uso terap¨¦utico del agua en Espa?a.