El azote del 'abuelo Wen'

De nada han servido las amenazas del poderoso departamento de Seguridad del Estado. Yu Jie, un escritor disidente cuyas obras est¨¢n prohibidas en China continental, ha decidido correr el riesgo de acabar en la c¨¢rcel y ha publicado su ¨²ltimo libro, Wen Jiabao: el mejor actor de China, en el cual hace una cr¨ªtica acerada del primer ministro y desmonta su imagen de hombre afable y reformista. El libro sali¨® ayer a la venta en Hong Kong.

Yu, de 36 a?os, fue interrogado el mes pasado en Pek¨ªn por la polic¨ªa, que le advirti¨® que podr¨ªa ser encarcelado como Liu Xiaobo, otro intelectual chino que fue sentenciado a 11 a?os de prisi¨®n en diciembre por su participaci¨®n en la redacci¨®n de la Carta 08, un manifiesto que pide profundas reformas pol¨ªticas y la instauraci¨®n de la democracia. Liu fue acusado de incitar a la subversi¨®n del Estado.

Seg¨²n Yu, Wen Jiabao no es un hombre del pueblo ni un progresista, como es percibido a menudo en China y en el extranjero, sino un tecn¨®crata mediocre, que ha llegado a la cima del poder gracias a sus dotes de actor. El autor pone de relieve el contraste entre la ret¨®rica populista del primer ministro y la pol¨ªtica de l¨ªnea dura adoptada por el Gobierno que ¨¦l y el presidente, Hu Jintao, lideran desde que llegaron al poder a finales de 2002.

Durante su mandato, han aumentado la represi¨®n contra las voces disonantes, la censura en Internet y la supervisi¨®n policial en T¨ªbet y Xinjiang, hogar de la minor¨ªa musulmana uigur, seg¨²n aseguran disidentes y organizaciones de derechos humanos. "Aceptar las cr¨ªticas y los reproches de la gente es la primera cualidad b¨¢sica que debe poseer un gobernante", escribe Yu, informa France Presse.

El libro levantar¨¢ seguramente ampollas. La prensa oficial ha cultivado con mimo la imagen del primer ministro, quien es llamado a veces de forma afectiva abuelo Wen. El l¨ªder chino ha acudido veloz en repetidas ocasiones a aquellas zonas del pa¨ªs que se han visto afectadas por graves desastres naturales ?la ¨²ltima durante las recientes avalanchas de barro en la provincia occidental de Gansu?, donde la televisi¨®n le ha mostrado consolando a las v¨ªcitimas, animando a los equipos de rescate e incluso soltando unas l¨¢grimas en p¨²blico.

Seg¨²n Yu, Wen Jiabao no ha hecho m¨¢s que adoptar el papel de "el mejor mediador" entre unos gobernantes autoritarios y sus ciudadanos, proyectando la ilusi¨®n de que la gente vive una vida pr¨®spera y feliz bajo un liderazgo que se desmorona. El autor afirma que Wen sabe que el Partido Comunista Chino es un viejo coche que se va a romper: "?l mismo no es un conductor con el carisma y la habilidad para detener el coche o cambiar de camino... As¨ª que todo lo que puede hacer es ser como una marioneta y actuar mientras pueda". Y a?ade que, sin un mandato popular, el Gobierno chino tiene que "forzar a su gente a reconocerlo por medio de la fuerza y las mentiras".