"Dell'Utri, deber¨ªan colgarte"

Marcello Dell'Utri, senador del Pueblo de la Libertad y cofundador de Forza Italia, vivi¨® el lunes una amarga experiencia en Como, una ciudad cercana a Mil¨¢n. Parolario, una manifestaci¨®n cultural organizada por el diario La Provincia, hab¨ªa invitado a Dell'Utri, noto bibli¨®filo, y recientemente condenado en Palermo a siete a?os de c¨¢rcel por asociaci¨®n mafiosa, a presentar los presuntos diarios de Benito Mussolini.

Aunque los expertos e historiadores consideran falsos los manuscritos que posee Dell'Utri, este insiste desde hace a?os en su autenticidad y lleg¨® a Como dispuesto a leer algunos fragmentos. El acto se celebraba en una carpa situada en la plaza Cavour, en pleno centro de la ciudad. La sala estaba repleta. El senador lleg¨® hasta el escenario sin problemas, luciendo bronceado, ataviado con camisa negra y con una gruesa carpeta azul bajo el brazo. Se sent¨® en una silla y se dispuso a escuchar la presentaci¨®n del moderador. Enseguida, un hombre sentado en las primeras filas se levant¨® y pregunt¨® a voz en grito: "?Pero os parece normal invitar a hablar a un condenado por mafia? ?Qu¨¦ verg¨¹enza!". Y ah¨ª ardi¨® Troya.

Un centenar de personas empez¨® a protestar a pleno pulm¨®n: "?Fuera la mafia del Estado!, ?Eres un mafioso, averg¨¹¨¦nzate! ?A la c¨¢rcel, a la c¨¢rcel! ?A la c¨¢rcel no, deber¨ªan colgarte por los pies!". Y tambi¨¦n: "Uno solo deb¨¦is meter dentro, uno solo". El senador no ha ingresado en prisi¨®n porque el Tribunal Supremo a¨²n no ha confirmado la condena dictada en segundo grado. El alto tribunal no puede pronunciarse sobre el fondo del asunto, que se ha considerado probado por el Tribunal de Apelaci¨®n de Palermo, sino s¨®lo sobre cuestiones formales.

Algunos manifestantes portaban camisetas con grandes letras may¨²sculas que formaban la palabra "mafioso", otros llevaban pancartas y hubo tambi¨¦n loas a los jueces asesinados por la mafia Giovanni Falcone y Paolo Borsellino.

Tras varios minutos de protestas, Dell'Utri abandon¨®, molesto pero bastante tranquilo, el escenario. El acto no pudo siquiera comenzar, aunque algunos asistentes defend¨ªan al senador diciendo "es un caballero", mientras el desbordado moderador apelaba a respetar el art¨ªculo 21 de la Constituci¨®n, que tutela la libertad de expresi¨®n.

Exponentes de la izquierda de Como hab¨ªan criticado en los ¨²ltimos d¨ªas la invitaci¨®n a Dell'Utri, que tras abandonar el lugar manifest¨® su perplejidad porque la fuerza p¨²blica no hubiera actuado contra quienes reventaron el acto. Los insultos y coros solo cesaron cuando el senador alcanz¨® su coche oficial, protegido por sus escoltas.

El concejal de Cultura, Sergio Gaddi, del Pueblo de la Libertad, ha definido como "una verg¨¹enza absoluta" lo ocurrido. "Si yo hubiese estado all¨ª, las fuerzas del orden tendr¨ªan que haber intervenido para separarme de los manifestantes. Esta es la izquierda que ense?a su verdadero rostro". Por su parte, la senadora del Partido Democr¨¢tico Chiara Braga ha dicho que la protesta es "el fruto de una provocaci¨®n; la gente se ha sentido ofendida".