Indonesia se enfrenta a una nueva erupci¨®n del volc¨¢n Merapi
Las autoridades prev¨¦n que la cifra de fallecidos por el maremoto ascienda a 600.- Las esperanzas de encontrar supervivientes se debilitan
La cifra de muertos por el maremoto que azot¨® las islas indonesias de Mentawai el lunes sigue creciendo y las autoridades temen que alcance las 600 v¨ªctimas mortales. El ¨²ltimo balance se sit¨²a en 408 fallecidos y 303 desaparecidos, de los que se teme que al menos la mitad hayan muerto, seg¨²n han informado fuentes oficiales. Adem¨¢s, otras 412 persones est¨¢n hospitalizados y 13.000 se encuentran en centros de evacuaci¨®n. Las tareas de rescate tambi¨¦n prosiguen en la isla indonesia de Java, donde ha vuelto a entrar en actividad el volc¨¢n Merapi, cuya primera erupci¨®n, el martes, caus¨® 34 muertos y cerca de 40.000 evacuados.
Con el paso de los d¨ªas, se reduce la posibilidad de encontrar supervivientes del tsunami, como ha explicado el jefe de misi¨®n de la Federaci¨®n Internacional de la Cruz Roja en Sumatra Occidental, Hans Bochove, que lo ha calificado de "muy, muy dif¨ªcil". La ola gigante que arras¨® las Mentawai se registr¨® el lunes tras un se¨ªsmo de 7,5 en la escala de Richter, seg¨²n la Agencia Nacional de Control de Desastres. Bochove dijo que todav¨ªa se est¨¢ evaluando la situaci¨®n sobre el terreno en el archipi¨¦lago, de 70 islas e islotes, cuya regi¨®n sur fue engullida por una ola gigante de seis metros de altura que, seg¨²n testigos, penetr¨® m¨¢s de medio kil¨®metro en tierra firme.
Se reducen las esperanzas
"Seguimos teniendo esperanza, pero asumimos que la mitad de desaparecidos est¨¢n muertos o nunca ser¨¢n encontrados", asegur¨® hoy a Efe el jefe de operaciones de la Agencia Nacional de Gesti¨®n de Desastres en Sumatra Occidental, Ade Edward. El funcionario ha explicado que, de las 303 personas de las que no se sabe nada desde el se¨ªsmo del lunes, entre 100 y 150 probablemente sigan vivos y se hayan refugiado en zonas altas por temor a que se produzca otra ola gigante. "Otras v¨ªctimas mortales pueden estar ocultas bajo los escombros y el lodo. Es dif¨ªcil que muchas hayan sido arrastradas mar adentro porque est¨¢n atrapadas por los ¨¢rboles ca¨ªdos", a?adi¨®.
El fuerte oleaje dificulta la entrega de ayuda a los damnificados, muchos de ellos heridos, en el aislado archipi¨¦lago, situado frente a las costas de Sumatra. Cientos de v¨ªctimas volvieron a dormir anoche a la intemperie. Poco a poco el agua potable, comida, tiendas de campa?a y otros productos b¨¢sicos van llegando a la isla de Pagai, donde una decena de aldeas han sido arrasadas y de varias no queda ni rastro. El distrito de Detumonga fue el m¨¢s afectado por el maremoto, con 170 muertos y 270 desaparecidos. Entre la desolaci¨®n tambi¨¦n asoma la esperanza, como el rescate de un beb¨¦ de 18 meses que sobrevivi¨® tres d¨ªas encaramado a un ¨¢rbol tras perder a sus padres.
Contradicciones sobre las boyas
Las autoridades indonesias aseguran que el sistema de alerta de tsunamis, instalado tras el devastador maremoto de 2004, que caus¨® m¨¢s de 226.000 muertos, dej¨® de funcionar hace un mes por la falta de personal cualificado para su mantenimiento.
Sin embargo, un t¨¦cnico alem¨¢n que trabaja en el proyecto de alerta se?al¨® que s¨®lo fall¨® una de las 300 boyas distribuidas en el mar. "El sistema de alerta temprana funcion¨® muy bien, es algo que se puede verificar", indic¨® Joern Lauterjung, jefe del proyecto de alerta de tsunamis indonesio-alem¨¢n para GeoForschungs Zentrum.
En cualquier caso, todos coinciden en que las islas estaban demasiado cerca del epicentro y fueron golpeadas por las olas en 5 o 10 minutos, lo que convierte en in¨²til cualquier alarma.
Per¨ªmetro de seguridad
Mientras, la nueva erupci¨®n del volc¨¢n Merapi, en la isla de Java, se produce cuando la mayor¨ªa de los habitantes del ¨¢rea contin¨²a en centros de acogida montados m¨¢s all¨¢ del per¨ªmetro de seguridad. Un manto ceniciento cubren las viviendas, ¨¢rboles y cultivos que no ardieron con la ceniza incandescente.
En Sidorejo, una poblaci¨®n dentro de la zona de seguridad de 10 kil¨®metros de radio en torno al cr¨¢ter, familiares y amigos enterraron ayer en una fosa com¨²n a 20 de las 34 v¨ªctimas mortales.Del total de muertes, 25 se produjeron en la ladera del Merapi, uno de los volcanes m¨¢s activos del archipi¨¦lago, mientras que el resto falleci¨® en el hospital debido a las heridas sufridas. Del centenar de heridos, 44 personas siguen hospitalizadas en estado grave.
El Merapi, considerado por los vulcan¨®logos un volc¨¢n de cono compuesto o estratovolc¨¢n, como el Teide en Espa?a, se asienta a 30 kil¨®metros al norte de ciudad de Yogyakarta. Una de las peores erupciones que se recuerdan fue en 1930 y mat¨® a unas 1.300 personas.
Indonesia pertenece al llamado Anillo de Fuego del Pac¨ªfico, una zona de gran actividad s¨ªsmica, y al menos 129 de sus m¨¢s de 400 volcanes est¨¢n activos.
La AECID no actuar¨¢ en Indonesia
La Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n Internacional al Desarrollo (Aecid) considera que Indonesia es un pa¨ªs "acostumbrado a los desastres y con capacidad para responder por s¨ª mismo" a ellos y por eso no actuar¨¢ en la zona, afectada recientemente por un tsunami provocado por un se¨ªsmo
de magnitud 7,7 en la escala de Richter.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.