La "nefasta conexi¨®n" entre Berlusconi y Putin obsesiona a EEUU
Hillary Clinton pidi¨® en junio de 2009 y enero de 2010 informes sobre las relaciones personales y las "inversiones en com¨²n" de los dos l¨ªderes | La embajada de Roma afirma que fuentes del PDL y la oposici¨®n piensan que "Berlusconi y sus amigos se lucran" con los contratos bilaterales de energ¨ªa | Un funcionario de la embajada italiana en Mosc¨² informa a EEUU: "Tienen l¨ªnea directa y no sabemos de qu¨¦ hablan".
Durante la guerra fr¨ªa, Estados Unidos tem¨ªa que el Partido Comunista Italiano importara a Europa occidental el sistema sovi¨¦tico. En el siglo XXI, las complejas relaciones bilaterales entre Rusia e Italia, y sobre todo la intensa relaci¨®n privada entre el primer ministro ruso, Vlad¨ªmir Putin, y su hom¨®logo italiano, Silvio Berlusconi, se han convertido en una nueva obsesi¨®n para la Administraci¨®n y la diplomacia estadounidense.
Los papeles secretos del Departamento de Estado analizados por este diario revelan que Washington rechaza y desconf¨ªa de la amistad entre Berlusconi y Putin, y la considera "corrosiva" para los intereses de Occidente porque determina la pol¨ªtica exterior de Italia y "pone en peligro la seguridad energ¨¦tica europea".
Los cables afirman que Estados Unidos cree que Berlusconi, actuando como "mediador entre Occidente y Rusia", defiende a menudo los intereses de Rusia frente a los de la OTAN, Estados Unidos y Europa, "minando los valores humanos y democr¨¢ticos que promueve la OSCE".
Entre mayo de 2002 y febrero de 2010, al menos 102 documentos emitidos por el Gobierno y las legaciones exteriores de EEUU (12 de ellos clasificados como secretos y el resto como confidenciales) han tratado de desentra?ar y desactivar lo que el ex embajador en Roma, Ronald P. Spogli, defini¨® en un cable del 26 de enero de 2009 como una "conexi¨®n nefasta".
El desasosiego de Estados Unidos se manifiesta en dos telegramas distintos, enviados a Roma y Mosc¨² por la Secretaria de Estado, Hillary Clinton. En el primero, de 12 de junio de 2009 (cable 211902), Washington reclamaba "cualquier informaci¨®n sobre la relaci¨®n personal" entre Putin y Berlusconi, e inquir¨ªa: "?Qu¨¦ inversiones personales, si las hay, han realizado (Putin y Berlusconi) que puedan determinar sus pol¨ªticas exteriores o econ¨®micas?".
Unos meses antes, el 26 de enero de 2009, el entonces embajador en Roma, Ronald F. Spogli (nombrado por la administraci¨®n Bush), hab¨ªa afirmado en un cable clasificado como Secreto / Noforn ("no entregable a pa¨ªses y ciudadanos extranjeros") que el primer ministro italiano y sus amigos se estaban "lucrando" con los acuerdos energ¨¦ticos bilaterales firmados entre los gigantes de la energ¨ªa ENI (participado al 30% por el Estado italiano) y Gazprom.
El despacho, que fue enviado con prioridad "inmediata" a la Secretar¨ªa de Estado, la Casa Blanca y los representantes estadounidenses ante la OTAN y la Uni¨®n Europea, dec¨ªa: "Los contactos de la embajada, tanto en la oposici¨®n del centro izquierda como en el partido de Berlusconi, el Pueblo de la Libertad, nos dicen que hay una conexi¨®n nefasta entre los dos primeros ministros. Afirman que Berlusconi y sus amigos ('cronies') se est¨¢n lucrando personal y alegremente con muchos de los acuerdos de energ¨ªa que se firman entre Italia y Rusia".
El documento era un exhaustivo informe de 13 p¨¢ginas, elaborado por las secciones de Econom¨ªa y Pol¨ªtica de la legaci¨®n situada en V¨ªa Veneto. M¨¢s abajo, Spogli afirmaba: "La mezcla de simpat¨ªa, dependencia de la energ¨ªa, falta de influencia institucional y la relaci¨®n personal entre Putin y Berlusconi facilitan a Rusia un aliado fiable, disponible para trabajar dentro de la UE a favor de Rusia".
"Nadie le lleva la contraria"
El despacho trazaba un an¨¢lisis hist¨®rico, econ¨®mico y estrat¨¦gico de la relaci¨®n ¨ªtalo-rusa. Entre otras consideraciones, daba especial relevancia al personalismo de Berlusconi, citando su "deseo de ser visto como un importante l¨ªder europeo en pol¨ªtica exterior", cosa que, afirmaba Spogli, "le lleva a llegar hasta sitios donde otros no se atreven".
El cable a?ad¨ªa: "Todos nuestros interlocutores -en el ministerio de Exteriores, la oficina del primer ministro, el partido del Pueblo de la Libertad e incluso en ENI- nos dicen que Berlusconi determina de forma individual la pol¨ªtica de Italia ante Rusia, sin buscar ni aceptar consejos. Pr¨¢cticamente todos son reacios a llevarle la contraria incluso cuando se comporta del peor modo sobre Rusia".
El embajador recordaba que, en noviembre de 2008, "tras una desastrosa conferencia de prensa en la que, entre otras cosas, (Berlusconi) describi¨® la expansi¨®n de la OTAN, el reconocimiento de la independencia de Kosovo y el sistema de defensa de misiles como 'provocaciones de Estados Unidos' hacia Rusia, los dirigentes del Gobierno italiano practicaron el cl¨¢sico 'archiva y olvida".
Y explicaba: "En respuesta a nuestras objeciones, el 'staff' del ministerio de Exteriores y del primer ministro nos envi¨® de forma borreguil al primer ministro para no tener que darle ellos mismos la desagradable noticia de que hab¨ªa enfadado no solo a los americanos sino a otros miembros del Grupo de Contacto de los Balcanes, por no mencionar a los checos y polacos".
"Incluso el ministro de Exteriores (Franco) Frattini admite que no tiene la menor influencia sobre Berlusconi con Rusia", escrib¨ªa tambi¨¦n el embajador Spogli. "Durante una visita el pasado septiembre, el ex vicepresidente (Dick) Cheney advirti¨® a Frattini de la actuaci¨®n muy p¨²blica e ineficaz de Italia sobre el conflicto de Georgia. Un Frattini muy apagado afirm¨® que, aunque ten¨ªa su propia opini¨®n en la materia, eran ¨®rdenes inapelables del primer ministro".
"Determinar qui¨¦n puede influir sobre la pol¨ªtica de Berlusconi hacia Rusia no es tarea f¨¢cil", admit¨ªa el embajador. "Una cosa es cierta, de todos modos: no (influyen) las instituciones de pol¨ªtica exterior del Gobierno italiano". Seg¨²n Spogli, Frattini es "solo el mensajero de esa pol¨ªtica".
Las dudas de Clinton...
El 12 de junio de 2009, poco antes de que Barack Obama se reuniera por primera vez en Washington con Silvio Berlusconi, Hillary Clinton hab¨ªa mostrado su inquietud por la influencia que Italia ejerc¨ªa sobre la pol¨ªtica rusa frente a Estados Unidos. "?Han influido l¨ªderes pol¨ªticos o de negocios italianos en la pol¨ªtica rusa contra intereses de Estados Unidos, y si es as¨ª, c¨®mo lo han hecho?", preguntaba en un cable enviado a Roma y Mosc¨².
El telegrama revelaba que el Gobierno estadounidense no solo desconf¨ªa de la relaci¨®n de Berlusconi con Putin, sino que tambi¨¦n observa con lupa al presidente ruso, Dmitry Medvedev. Clinton inquir¨ªa "en qu¨¦ se diferencian las relaciones entre Putin y Berlusconi de las de Berlusconi con Medvedev".
Seis meses despu¨¦s, el 28 de enero de 2010 (cable 246008) la secretaria de Estado volvi¨® a pedir a las legaciones europeas que facilitaran "cualquier informaci¨®n" sobre la relaci¨®n entre Berlusconi y el presidente ruso.
El despacho terminaba preguntando, aunque todav¨ªa faltaba mucho tiempo para que estallara la guerra civil dentro del Pueblo de la Libertad, "de qu¨¦ modo pretender¨ªa Mosc¨² alterar su relaci¨®n con Italia en el caso que Berlusconi dejara de ser primer ministro".
Adem¨¢s, la secretaria de Estado ped¨ªa datos sobre "la relaci¨®n entre los dirigentes de ENI, incluyendo al consejero delegado (Paolo Scaroni), y los dirigentes del Gobierno italiano, especialmente el primer ministro Berlusconi y el ministro de Exteriores (Franco Frattini)".
Y reclamaba "ejemplos, si es posible, de cualquier instancia en que el Gobierno italiano haya tomado decisiones para beneficiar a negocios italianos o a intereses comerciales a expensas de las preocupaciones (de EEUU) sobre la pol¨ªtica energ¨¦tica".
La legaci¨®n moscovita respondi¨® al cable de Clinton el 5 de febrero de 2010, con un informe clasificado secreto que confirmaba que Putin y Berlusconi "tienen una conexi¨®n directa".
El despacho 247415 iba firmado por el embajador John R. Beyrle, quien dejaba este comentario final: "En los asuntos importantes, parece que las relaciones econ¨®micas entre Rusia e Italia est¨¢n dirigidas por los primeros ministros, que mantienen una conexi¨®n directa y controlan algunos de los m¨¢s importantes activos de sus respectivas econom¨ªas. En cuanto al fin al que destinan esos activos, es probable que no dependa solo de c¨¢lculos comerciales o de rentabilidad", a?ad¨ªa Beyrle, que conclu¨ªa citando a un informador secreto: "Seg¨²n nuestro contacto, 'parece que todo lo que sucede en los niveles m¨¢s bajos es mera puesta en escena".
...Y las certezas del informador italiano
El documento revelaba la identidad del 'contacto' que informa a los estadounidenses. Se trata de un funcionario de la embajada italiana en Mosc¨², al que el cable identificaba con cargo, nombre y apellido, seguido de un par¨¦ntesis que dice: "proteger".
El 'contacto' expresaba su "frustraci¨®n" porque la intimidad entre Putin y Berlusconi "deja a la embajada en la oscuridad". Y explicaba: "La propia embajada y el ministro de Exteriores, Franco Frattini, a menudo conocen las conversaciones entre Berlusconi y Putin solo despu¨¦s de que se produzcan, y con muy pocos detalles o background".
Adem¨¢s, prosegu¨ªa el informador, "si es necesario realizar alguna acci¨®n, el secretario del Gabinete instruye al ministro de Exteriores o a la embajada sin facilitarles 'background', limit¨¢ndose a comentar que Berlusconi y Putin han acordado hacer eso".
Seg¨²n razonaba el diplom¨¢tico italiano, "aunque esa estrecha relaci¨®n no es ideal desde el punto de vista burocr¨¢tico y es m¨¢s perjudicial que beneficiosa, a veces puede resultar ¨²til".
E ilustraba su argumento con un ejemplo: durante la negociaci¨®n de la venta por ENI a Gazprom de su 20% de la filial rusa Gazpromneft, la empresa rusa quiso pagar a ENI las acciones "muy por debajo del precio de mercado, pero acab¨® pagando el valor de mercado despu¨¦s de que Berlusconi lo negociara con Putin".
Otra revelaci¨®n de ese cable es que, seg¨²n el informador italiano, "aunque (el proyecto del gasoducto) South Stream acapara casi toda la atenci¨®n, el principal negocio de ENI en Rusia es comprar gas".
Seg¨²n el cable, la embajada italiana estaba preparando una visita a la plataforma petrolera de Severenergia, una sociedad constituida por Gazprom, Eni y la el¨¦ctrica italiana Enel, y el informador afirmaba que "Eni y Enel montaron Severenergia para comprar activos de Yukos en la subasta de la quiebra" de la petrolera.
Enel planea aumentar sus inversiones en Rusia hasta los 9.000 millones de euros, a?ade el cable, que concluye afirmando que el consejero delegado de ENI, Paolo Scaroni, y el Gobierno italiano mantienen "contacto habitual con Igor Sechin, viceprimer ministro ruso y zar de la energ¨ªa".
"Un verdadero incordio"
La lectura de otros cables filtrados a Wikileaks revelan la irritaci¨®n de Washington por la relaci¨®n entre Putin y Berlusconi. En octubre de 2008, un cable (172335) del embajador del Gobierno Bush en Roma, Ronald P. Spogli, hab¨ªa pedido al presidente que aprovechara su inminente reuni¨®n con Berlusconi para "obtener su compromiso de que se comportar¨¢ m¨¢s responsablemente sobre Rusia".
En cables posteriores, el representante en Roma del Gobierno Bush, que lleg¨® a Roma en 2001, intent¨® explicar a Washington las claves de la relaci¨®n entre Putin y Berlusconi. "Berlusconi admira el estilo de gobernar macho, decidido y autoritario de Putin porque piensa que se parece al suyo", escribi¨® Spogli a la Casa Blanca en enero de 2009, cuando Obama acababa de ser investido presidente.
"Las bases de su amistad son dif¨ªciles de determinar", prosegu¨ªa, "pero muchos interlocutores nos dicen que Berlusconi cree que Putin, un colega magnate, conf¨ªa en ¨¦l m¨¢s que cualquier otro l¨ªder europeo". Y Spogli a?ad¨ªa, entre par¨¦ntesis: "Un contacto en la oficina del primer ministro nos cuenta que adoban sus frecuentes encuentros con regalos suntuosos".
"La relaci¨®n bilateral entre EEUU e Italia es excelente y engloba una estupenda cooperaci¨®n en muchos niveles y frentes. Por desgracia", resum¨ªa, "los esfuerzos de Berlusconi por 'arreglar' la relaci¨®n entre Occidente y Rusia (que seg¨²n le dijo al embajador se le "pega en las tripas como una gran masa indigesta") amenazan su credibilidad y le convierten en un verdadero incordio para nuestra relaci¨®n".
En esa misma idea insist¨ªa otro despacho enviado desde Roma al presidente Obama: "Dolorosamente, Berlusconi trata la pol¨ªtica con Rusia como hace con los asuntos pol¨ªticos dom¨¦sticos: t¨¢cticamente y d¨ªa a d¨ªa", dec¨ªa. "Su abrumador deseo es permanecer bajo la buena estrella de Putin y frecuentemente vocea opiniones que le trasmite directamente Putin. Un ejemplo solo: tras la crisis de Georgia, Berlusconi empez¨® a insistir (y contin¨²a en ello) en que Georgia fue el agresor y que su Gobierno era responsable de la muerte de varios cientos de civiles en Osetia del Sur".
La embajada suger¨ªa posibles soluciones: "Podemos ayudarle (a Berlusconi) a volver al camino justo mand¨¢ndole una clara se?al de que Estados Unidos no necesita un interlocutor para sus importantes relaciones bilaterales con Rusia, y que su insistencia en minar estructuras y canales basados en intereses comunes y valores compartidos dentro de la alianza (la OTAN) a cambio de estabilidad de corto plazo no es una estrategia que Washington quiera seguir".
Un plan (fallido) para "mitigar la corrosiva influencia"
El nivel de inquietud de Washington ante la equidistancia de Berlusconi es tan alto que la embajada en Roma puso en marcha un "plan para mitigar el problema y contrarrestar la corrosiva influencia" de la amistad entre Putin y Berlusconi.
"Hemos emprendido una ofensiva diplom¨¢tica con figuras clave dentro y fuera del Gobierno italiano", contaba Spogli en el cable de enero de 2009. Con un objetivo doble: "Educar a nuestros interlocutores sobre las actividades rusas y construir un contrapeso de opiniones disidentes contra las pol¨ªticas rusas, especialmente dentro del partido de Berlusconi".
"La embajada ha maniobrado con l¨ªderes del Gobierno de forma agresiva y a todos los niveles", a?ad¨ªa. "Asesores pol¨ªticos y econ¨®micos han trabajado con miembros del partido (PDL) y del Gobierno, think tanks y prensa para ofrecer una narrativa alternativa a la insistencia de Berlusconi en que Rusia es un pa¨ªs estable y democr¨¢tico que ha sido provocado por Occidente".
"El esfuerzo parece funcionar", valoraba el embajador. "La oposici¨®n ha empezado a pedir explicaciones a Berlusconi retrat¨¢ndolo como el tipo que ha elegido el lado equivocado del debate. Algunos en el Pueblo de la Libertad han empezado a aproximarse en privado para decirnos que les gustar¨ªa dialogar m¨¢s con nosotros sobre Rusia, y nos han se?alado su inter¨¦s en calmar el v¨¦rtigo de Berlusconi con Putin".
El "portavoz de Putin" critica a Medvedev
La conclusi¨®n del informe es agridulce: "Aunque nos queda un largo trecho para modificar ese relato, desgraciadamente, tenemos ayuda: en la forma de un primer ministro que parece cada vez m¨¢s el portavoz de Putin", afirma Spogli.
Ir¨®nicamente, unos meses despu¨¦s, el 18 de septiembre de 2009, el propio Berlusconi confirm¨® en persona al flamante embajador del Gobierno Obama, David H. Thorne, que no pensaba dejar de ejercer ese papel de adalid de Putin.
En un cable confidencial del 21 de septiembre (226129), Thorne describe su primera visita al primer ministro italiano y comenta: "El primer ministro nos ofreci¨® un largo y familiar discurso sobre (a sus ojos) las muchas y estupendas cualidades de Putin como l¨ªder".
Y luego: "Afirm¨® que bajo el ex presidente Bush y ahora con el presidente Obama ha conseguido jugar un ¨²til papel de mediador en las relaciones Estados Unidos-Rusia, debido a su relaci¨®n excepcionalmente estrecha con Putin, el verdadero centro del poder en Rusia".
Durante esa entrevista inicial con Thorne, Berlusconi califica al presidente ruso Dmitry Medvedev "con algo de condescendencia, como un aprendiz de Putin", anota el embajador.
Solo tres meses despu¨¦s, el 30 de diciembre, Berlusconi recibe a Thorne con Letta en Mil¨¢n. Han pasado pocos d¨ªas desde la agresi¨®n al primer ministro en la plaza del Duomo de Mil¨¢n, Berlusconi tiene la cara "vendada" y seg¨²n Gianni Letta, que asiste al almuerzo de tres horas, "ha sufrido una depresi¨®n tras el ataque: es un empresario y quiere que todo el mundo le quiera".
La opini¨®n del primer ministro sobre Mevdeved parece haber cambiado: "Sobre Rusia", anota Thorne en su despacho secreto del 1 de enero de 2010 (242287), "Berlusconi piensa que Putin y Medvedev se llevan bien, se respetan mutuamente y tienen una relaci¨®n eficaz. De hecho", ironiza Thorne, "la despedida tras el almuerzo qued¨® inesperadamente recortada por una llamada entrante de Putin".
Alta tensi¨®n sobre Georgia
El momento de mayor tensi¨®n en las relaciones entre Estados Unidos y el Gobierno de Silvio Berlusconi se produjo durante la crisis de Georgia, en agosto de 2008. Un cable confidencial (166086) dictado por el embajador Ronald P. Spogli y titulado "El embajador urge a Italia a pedir la retirada rusa" revela una escena digna de una pel¨ªcula de Hollywood.
Spogli se re¨²ne con Gianni Letta, n¨²mero dos del Gobierno de Berlusconi y su principal asesor, y le explica que su pa¨ªs tiene informaciones de ataques militares rusos en Gori, y que es "esencial que las tropas rusas se retiren de Georgia y vuelvan a Osetia del Sur lo antes posible".
El embajador exige al Gobierno italiano que "empuje a Rusia a permitir la inmediata entrada de observadores internacionales y de ayuda humanitaria". Letta contesta que trasmitir¨¢ las peticiones a Berlusconi, que est¨¢, anota Spogli, "en la habitaci¨®n de al lado".
El embajador comunica a Letta que Washington "no est¨¢ contento" con la respuesta italiana al ataque ruso, y que est¨¢ "particularmente perplejo" por la actuaci¨®n de Franco Frattini, el ministro de Exteriores.
Spogli a?ade que la "actual pol¨ªtica (italiana) de equidistancia (entre Estados Unidos y Rusia) parecer¨¢ inadecuada una vez que los hechos hayan sido analizados del todo". Letta responde que ya hab¨ªa anticipado que a Estados Unidos no le gustar¨ªa la posici¨®n italiana y que entregar¨¢ el mensaje al primer ministro "lo antes posible".
Son d¨ªas convulsos, marcados por la palpable irritaci¨®n de Estados Unidos. El 12 de agosto, Spogli informa a Washington (cable 165759) de que Italia se niega a condenar la acci¨®n rusa, y deplora el comportamiento del ministro Frattini (que hab¨ªa pedido "sentido de equilibrio" a la Uni¨®n Europea ante el ataque ruso, mientras estaba de vacaciones en las Maldivas y se resist¨ªa a volver a Roma).
"El Gobierno italiano ser¨¢ con toda probabilidad menos que ¨²til en la sede del Consejo del Atl¨¢ntico Norte (principal ¨®rgano ejecutivo de la OTAN)", escribe Spogli. "Berlusconi y Putin ya han hablado y creemos que Rusia intentar¨¢ explotar la relaci¨®n personal entre ambos para empujar a Italia a hacer fracasar los esfuerzos por condenar la acci¨®n de Mosc¨²".
El embajador informa a Washington que ha amenazado, de forma diplom¨¢tica, al Gobierno italiano: "Hemos dejado claro que la actitud favorable mantenida hacia el nuevo gobierno Berlusconi en sus primeros meses de actividad podr¨ªa desaparecer si no garantiza su credibilidad en esta cuesti¨®n".
El tono refleja una profunda desconfianza hacia el Ejecutivo italiano. "En la mejor hip¨®tesis, Italia evitar¨¢ pronunciar declaraciones fuertes o de presionar a Rusia. En la peor, Italia podr¨ªa trabajar por destruir la determinaci¨®n de los otros aliados en las sedes internacionales, incluidas la OTAN y la Uni¨®n Europea", valora Spogli.
"Mina el papel de la OSCE"
Varios cables indican que el recelo de Estados Unidos hacia Berlusconi, lejos de cuanto aseguran las declaraciones oficiales de estos d¨ªas, no ha menguado con el tiempo. Un informe de la embajada de Roma (210920) enviado al presidente Obama el 9 de junio de 2009, resum¨ªa as¨ª la situaci¨®n. "La dependencia de la energ¨ªa rusa, los lucrativos y frecuentemente no transparentes acuerdos de negocios entre Italia y Rusia, y la muy cercana y personal relaci¨®n entre Berlusconi y Putin han distorsionado la visi¨®n del primer ministro italiano hasta el punto de que (Berlusconi) piensa que mucha de la fricci¨®n entre Occidente y Rusia ha sido provocada por Estados Unidos y por la OTAN".
Berlusconi, anticipaba la embajada a Obama, "nos ha propuesto mediar en su relaci¨®n con el presidente ruso Medvedev y espera que le d¨¦ usted una se?al, por peque?a que sea, de que tiene su bendici¨®n para hacerlo".
"Al rev¨¦s", suger¨ªa el cable firmado por Elisabeth L. Dibble, entonces m¨¢xima responsable (interina) de la embajada, "puede hacerle saber que creemos que los temas de seguridad que afectan a la comunidad trasatl¨¢ntica deben ser conducidos por la Alianza en grupo, y que Estados Unidos no desea sacrificar valores a cambio de una estabilidad de corto plazo basada en las promesas rusas de buen comportamiento. Y que reaccionaremos -y esperamos de quienes compartan estos valores que lo hagan tambi¨¦n-, cuando Rusia cruce la l¨ªnea roja, por ejemplo al amenazar la soberan¨ªa de Estados vecinos".
En ese mismo despacho, escrito antes de una visita del primer ministro italiano a Estados Unidos (210920), insist¨ªa en esa idea y enumeraba los problemas creados por Il Cavaliere: "Berlusconi cree que, actuando como mediador, puede restaurar el esp¨ªritu de di¨¢logo y cooperaci¨®n entre Europa, EEUU y Rusia, pero (piensa) ampliamente en t¨¦rminos rusos, posponiendo indefinidamente el acercamiento de la OTAN a Ucrania y Georgia, diluyendo los esfuerzos europeos para promover la democracia en Bielorrusia, y minando el importante papel de la OSCE en defender los valores humanos y democr¨¢ticos en Europa".
"Una pol¨ªtica exterior dise?ada para no negar nada a Rusia"
As¨ª se titulaba el p¨¢rrafo 16 del documento secreto (fecha) enviado por Spogli a Washington en enero de 2009, que resum¨ªa en una lista los asuntos "molestos" para Rusia en los que Italia le ha prestado apoyo en sedes internacionales.
- Presi¨®n ante la OSCE para ignorar los incumplimientos de Rusia sobre los 'conflictos congelados' que tiene legalmente comprometidos en Estambul.
- D¨¦bil apoyo o incluso oposici¨®n a los esfuerzos de la OTAN por construir lazos m¨¢s estrechos con Georgia y Ucrania.
- D¨¦bil apoyo inicial para apoyar los esfuerzos internacionales para reconocer la independencia de Kosovo
- Comentarios poco colaborativos sobre los planes de Defensa de Misiles con Polonia y la Rep¨²blica Checa.
- Apoyo a los planes del presidente ruso Medvedev para redefinir la arquitectura de seguridad Europea minando a la OSCE y a la OTAN.
- Apoyo a los esfuerzos rusos por socavar las iniciativas de la Uni¨®n Europea y de Estados Unidos para dar m¨¢s seguridad energ¨¦tica a Europa.
Valentini, el hombre en la sombra
Si hay algo que intriga a los diplom¨¢ticos estadounidenses en la relaci¨®n Putin-Berlusconi es el papel que juega un ¨ªntimo colaborador de Berlusconi, Valentino Valentini. Los cables muestran que el servicio exterior piensa que "este diputado y figura en la sombra", que "act¨²a sin equipo y ni siquiera secretaria" es el "hombre clave de Berlusconi en Rusia".
Valentini, explicaba el ex embajador Ronald P. Spogli en enero de 2009, "habla ruso (entre otras lenguas), viaja a Rusia varias veces al mes, y aparece a menudo al lado de Berlusconi cuando se re¨²ne con l¨ªderes mundiales".
La embajada admit¨ªa que "no est¨¢ claro" lo que Valentini hace durante sus frecuentes visitas a Rusia, aunque apuntaba: "Se rumorea ampliamente que cuida los intereses de Berlusconi". Y a?ad¨ªa: "Nuestros contactos lo describen de forma uniforme como cercano a Berlusconi en todo lo que tiene que ver con Rusia, pero no como un hombre pol¨ªtico".
En realidad, Valentini trabaja como asistente e int¨¦rprete personal de Berlusconi desde hace mucho tiempo. A los 23 a?os, termin¨® un master en Publitalia, la empresa que presid¨ªa Marcello Dell'Utri, el senador siciliano y cofundador de Forza Italia, condenado ahora por complicidad mafiosa, y poco despu¨¦s pas¨® a trabajar con el Cavaliere.
El inmenso poder pol¨ªtico de ENI
Las expresiones utilizadas por el servicio diplom¨¢tico dejan ver que Estados Unidos no se f¨ªa de ENI y considera que el gigante italiano de la energ¨ªa tiene "un inmenso poder pol¨ªtico". Diversos cables revelan que EEU presion¨® con fuerza a Italia al menos desde 2008 para que ENI no llevara adelante el proyecto del gasoducto South Stream con Gazprom y para que abandonara la idea de construir otra tuber¨ªa de gas desde los campos iran¨ªes de Pars hasta Turqu¨ªa, seg¨²n le hab¨ªa propuesto el Gobierno iran¨ª a ENI.
Un despacho emitido por la embajada en Roma el 13 de enero de 2010 afirmaba que la visi¨®n de ENI respecto a la situaci¨®n energ¨¦tica europea "es perturbadoramente similar a la de Gazprom y el Kremlin, y a veces se adorna con florilegios ret¨®ricos reminiscentes del doble lenguaje de la era sovi¨¦tica".
Otro cable de la embajada de Roma previo a una visita del ministro Frattini a Estados Unidos afirmaba: "El Gobierno italiano es ambivalente sobre el apoyo al gasoducto europeo Nabucco, mientra ENI est¨¢ dispuesta a ayudar a Gazprom a construir gasoductos en el Mar Negro y el Mar B¨¢ltico que solo aumentar¨¢n la dependencia de la Uni¨®n Europea sobre Rusia. ENI parece a menudo dictar la pol¨ªtica energ¨¦tica del Gobierno, y usa su poder para entorpecer los planes liberalizadores del mercado de energ¨ªa europeo".
Un cable del Departamento de Estado del 2 de mayo de 2008, enviado a 20 legaciones y despachos (154742) por el subsecretario Reuben Jeffery III, narra un tenso encuentro entre este y el consejero delegado de ENI, Paolo Scaroni, en Washington.
Cuando Jeffery le pregunta "por qu¨¦ Italia apoya el proyecto South Stream, Scaroni contesta abruptamente: 'Europa necesita gas ruso. Es mejor tener el gas directamente de Rusia y evitar futuras disputas Rusia-Ucrania".
El citado documento secreto de 26 de enero de 2009 analiza la influencia pol¨ªtica interna del gigante energ¨¦tico italiano, creado en 1953 por el m¨ªtico Enrico Mattei, que falleci¨® en un sospechoso y nunca aclarado accidente de aviaci¨®n en 1962 tras discutir la primac¨ªa de las Siete Hermanas en el mercado del petr¨®leo mundial.
"El Gobierno italiano ha apoyado los esfuerzos de ENI y otros gigantes de la energ¨ªa por crear una sociedad ¨²nica con Rusia y Gazprom para cooperar a largo plazo (hasta 2035)", escribe Spogli. "ENI, la paraestatal m¨¢s prominente de energ¨ªa, tiene un inmenso poder pol¨ªtico; su estrategia de negocio se enfoca sobre ambientes geopol¨ªticos complicados, generalmente percibidos como un riesgo demasiado alto por sus competidores internacionales".
"Los esfuerzos de ENI por presionar 'vis a vis' al Gobierno italiano est¨¢n mejor fundados que la mayor¨ªa de delegaciones de Gobierno", a?ade el documento. "Tiene un asesor diplom¨¢tico asignado por el ministerio de Exteriores. Juzgando solo por la prensa, dir¨ªamos que Berlusconi ofrece a su consejero delegado, Paolo Scaroni, tanto acceso como el que le da a su ministro de Exteriores".
"El director de negocios de ENI nos confes¨® hace poco que se re¨²ne con Gianni Letta, equivalente a un consejero de seguridad nacional y confidente de Berlusconi, una vez a la semana", contin¨²a. "Miembros pol¨ªticos de las dos orillas nos dicen que ENI es uno de los grandes promotores de los numerosos 'think-tanks' italianos, muchos de los cuales organizan discusiones p¨²blicas sobre la importancia de las relaciones Italia-Rusia. Hay incluso sospechas de que ENI mantiene a periodistas en n¨®mina".
Adem¨¢s, el informe revela que "ENI no limita su di¨¢logo con el Gobierno a los temas de energ¨ªa; su presencia en Rusia supera a la de la embajada escasa de personal, y, seg¨²n un diputado del Partido Democr¨¢tico, muchos mensajes pol¨ªticos pasan de forma frecuente a trav¨¦s de esos canales comerciales y econ¨®micos".
El embajador termina anotando: "Seg¨²n ENI, la amenaza real para la seguridad energ¨¦tica de Europa occidental no es Rusia - es Ucrania". La soluci¨®n a la inseguridad energ¨¦tica, seg¨²n ENI, "son m¨¢s conexiones de tuber¨ªas desde los campos rusos de gas y la necesidad de tuber¨ªas que no atraviesen Ucrania -que ser¨ªa lo racional en el caso de South Stream y North Stream".
South Stream, ?la joya de la alianza?
Pese a los esfuerzos por evitar los da?os colaterales, los cables reflejan que Estados Unidos entiende muy bien que Italia necesita la energ¨ªa rusa. "Virtualmente sin reservas dom¨¦sticas de energ¨ªa, sin potencia nuclear nacional, y con una ambiciosa compa?¨ªa energ¨¦tica paraestatal (ENI), la principal preocupaci¨®n bilateral de Italia es la b¨²squeda de garant¨ªas de suministro energ¨¦tico a largo plazo", escribi¨® el embajador Spogli en 2009.
En paralelo, los cables certifican que los negocios bilaterales entre Rusia e Italia crecieron con enorme fuerza tras la ca¨ªda del muro de Berl¨ªn. Entre 1998 y 2007, las exportaciones italianas a Rusia aumentaron un 230%, desde los 2.700 millones de euros a los 9.500 millones.
Las embajadas de Roma y Mosc¨² analizan a menudo los avances y retrocesos del gasoducto Suoth Stream, considerado el proyecto estrella del acuerdo ENI-Gazprom.
Seg¨²n datos de Gazprom, la tuber¨ªa costar¨¢ 8.600 millones de euros y exportar¨¢ gas a Europa puenteando a Ucrania bajo el Mar Negro y llegando a trav¨¦s de Turqu¨ªa en dos ramales, uno por el norte desde Hungr¨ªa a Austria, y otro por el sur desde Grecia a Italia.
La tuber¨ªa deber¨ªa estar lista hacia 2015, seg¨²n Gazprom, aunque la diplomacia de Washington se muestra esc¨¦ptica y en dos cables duda incluso de que el gasoducto "se termine en esa fecha, si es que lo hace alguna vez".
En los ¨²ltimos tiempos, la administraci¨®n estadounidense ha mostrado su inquietud por la triangulaci¨®n del eje Roma-Mosc¨² a Tr¨ªpoli. El despacho enviado por Hillary Clinton del 28 de enero de este a?o preguntaba a sus legaciones en Roma y Mosc¨²: "?Cu¨¢les son las visiones de los funcionarios del Gobierno italiano y de los de ENI sobre la pol¨ªtica energ¨¦tica con Rusia y sobre el proyecto South Stream, especialmente en lo relativo a Libia y los Balcanes?".
Puedes contactar en Eskup con el autor del art¨ªculo, Miguel Mora. | Comenta esta noticia en la red social de EL PA?S | La mayor filtraci¨®n de la historia | Preguntas y respuestas | Ir al especial
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