El FBI interroga a sus anchas a los inmigrantes en territorio de M¨¦xico
Calder¨®n autoriz¨® a los agentes a seguir la pista del terrorismo internacional
El Gobierno de Felipe Calder¨®n permite que la polic¨ªa norteamericana interrogue directamente a los miles de indocumentados detenidos en M¨¦xico, seg¨²n los documentos confidenciales del Departamento de Estado. Los sin papeles atraviesan el pa¨ªs rumbo a la frontera con Estados Unidos: 3.326 kil¨®metros de l¨ªnea divisoria y diarias entradas ilegales dirigidas por los contrabandistas de personas, los coyotes.
M¨¦xico es un pa¨ªs muy nacionalista donde la intervenci¨®n de terceros causa fricciones pol¨ªticas y sociales, pero los cables de los diplom¨¢ticos norteamericanos revelan que el CISEN (Centro de Investigaci¨®n y Seguridad Nacional) autoriz¨® que los indocumentados fueran interrogados por el FBI y otras agencias de seguridad a requerimiento de las autoridades norteamericanas, obsesionadas con la posibilidad de que el terrorismo internacional aproveche la porosidad de la frontera para atacar EE UU.
"La corrupci¨®n y el caos favorecen la infiltraci¨®n de terroristas"
El embajador destaca la rivalidad y los celos entre las agencias de seguridad mexicanas
EE UU propone una polic¨ªa interna para descubrir a los agentes corruptos
El presidente solicit¨® ayuda a Washington para poner orden en Ciudad Ju¨¢rez
Los sin papeles detenidos son recluidos en centros de detenci¨®n de inmigrantes antes de su puesta en libertad o deportaci¨®n a sus pa¨ªses de origen, mayoritariamente en Am¨¦rica Central, pero tambi¨¦n de otras muchas nacionalidades. Seg¨²n los documentos, los cuerpos de seguridad norteamericanos implicados en lucha antiterrorista consideran an¨¢rquico el funcionamiento de los servicios de inteligencia mexicanos y se muestran irritados por la corrupci¨®n institucional. "En lugar de concentrar a los detenidos [inmigrantes indocumentados] en una instalaci¨®n cerca de la capital, las autoridades migratorias detienen y liberan a los detenidos en el mismo lugar donde los encontraron", lamenta la Embajada en un informe (154291) enviado al subdirector del FBI (Oficina Federal de Investigaci¨®n) John S. Pistole poco antes de su viaje a M¨¦xico en 2008.
Una frontera peligrosa
No cita el cable el motivo de buena parte de las detenciones: la extorsi¨®n de los indocumentados, liberados a cambio de pagos en efectivo o en especie. Las quejas norteamericanas sobre irresponsabilidad policial tuvieron su efecto. "El CISEN, que es nuestro principal interlocutor en la lucha antiterrorista, ha permitido a funcionarios del Gobierno de EE UU entrevistar a los extranjeros detenidos en los diferentes centros de detenci¨®n desplegados por todo el pa¨ªs para recabar potencial informaci¨®n sobre terrorismo". EE UU considera que la extensi¨®n de su frontera sur con M¨¦xico y el escaso control policial ejercido por la polic¨ªa mexicana sobre el intenso cruce de personas y mercanc¨ªas lo convierte en un pa¨ªs adecuado para los grupos terroristas dispuestos a lanzar un ataque contra su territorio.
"Un caos rampante, la generalizada corrupci¨®n y la incapacidad del Gobierno para combatir esos fen¨®menos han sido percibidos como unas preocupantes amenazas por quienes buscan en nuestra frontera sur signos de potencial infiltraci¨®n terrorista", comunica la Embajada al subdirector del FBI. El presidente Calder¨®n, seg¨²n se precisa, est¨¢ tomando medidas contra ese desorden, con el despliegue de 40.000 soldados, entre otras medidas, pero su Gobierno "tiene otra mirada" respecto a los asuntos de seguridad que interesan a EE UU. Su ofensiva contra el delito organizado desencaden¨® "violentas luchas dentro de los carteles, as¨ª como ataques a los cuerpos de seguridad y un n¨²mero r¨¦cord de muertes relacionadas con el narcotr¨¢fico". M¨¢s de 15.000 personas perdieron la vida el pasado a?o en muertes relacionadas con el narcotr¨¢fico, casi el doble que en 2009; y entre 2006 y 2009 los diferentes cuerpos policiales detuvieron a 99.115 personas en su cruzada contra las drogas.
El embajador en M¨¦xico, Carlos Pascual, alert¨® sobre el pobre aprovechamiento de los servicios de inteligencia mexicanos, en un informe (233964) noviembre de 2009 remitido al Departamento de Estado. Cita la desconfianza, los celos y la rivalidad entre los diferentes aparatos de inteligencia nacionales como sus principales vicios. No es la primera vez que la legaci¨®n diplom¨¢tica denuncia esa descoordinaci¨®n pero en esta ocasi¨®n constata la falta de inter¨¦s de altos funcionarios en su erradicaci¨®n "En una reciente entrevista con funcionarios de la Embajada, el Secretario [ministro] de Defensa, Guillermo Galv¨¢n, demostr¨® escaso inter¨¦s en reforzar la cooperaci¨®n con otras agencias".
Para EE UU es fundamental aunar esfuerzos, pero a la espera de que as¨ª sea, pide a M¨¦xico acelerar el paso contra la corrupci¨®n y propone la creaci¨®n de una polic¨ªa interna para descubrir a los agentes vendidos al delito, y la utilizaci¨®n del pol¨ªgrafo en las unidades policiales con informaci¨®n y misiones de envergadura. La situaci¨®n es alarmante puesto que la mafia esquiva frecuentemente a la mir¨ªada de organismos que participa en la lucha contra el narcotr¨¢fico, entre ellos la Secretar¨ªa de Defensa y la Marina, el CISEN y la Secretaria de Seguridad P¨²blica ( ministerio del Interior) junto a la Procuradur¨ªa General de la Rep¨²blica (Fiscal¨ªa General) y la Polic¨ªa Federal. Los 31 Estados de la Rep¨²blica y el Distrito Federal, sede de la capital de M¨¦xico, tambi¨¦n cuentan con servicios policiales y de informaci¨®n propios.
Carteles violentos
Por definici¨®n, el CISEN debiera auxiliar, coordinar tareas y procesar la informaci¨®n de otras agencias, pero carece de la capacidad para hacerlo, al toparse con los militares. Sin el liderazgo del CISEN, que pugna por conseguirlo, los servicios de inteligencia que persiguen a narcotraficantes, secuestradores, traficantes de armas, personas y dinero rinden cuentan a sus propios jefes, que administran la informaci¨®n a conveniencia o la subastan. Los carteles atrincherados en Chihuahua, Sinaloa y Tamaulipas son especialmente violentos y utilizan cualquier medio para conservar sus feudos.
El presidente Calder¨®n dijo a tres legisladores norteamericanos que est¨¢ convencido de que los carteles mexicanos "tienen poderosos lazos en EE UU, y un d¨ªa podr¨ªan llegar a usar las agresivas t¨¦cnicas de aqu¨ª contra la polic¨ªa norteamericana, a menos de que [M¨¦xico y EEUU] triunfen en la lucha com¨²n contra el delito" (cable 201431) . Sin entrar en detalles, advirti¨® que el uso de la tortura y la mutilaci¨®n demuestra la determinaci¨®n de los narcotraficantes en la preservaci¨®n de sus negocios. Calder¨®n aludi¨® a informes sobre un plan de los carteles para derribar su avi¨®n con un lanzacohetes, compl¨® publicado en su d¨ªa por la prensa mexicana.
Las filtraciones de polic¨ªas corruptos sobre operaciones en marcha y el subdesarrollo del espionaje nacional son mencionados como causa de muchos fracasos. No sorprende pues que la carencia de informaci¨®n de inteligencia obligue, para paliar el fallo, al masivo despliegue de soldados y polic¨ªas sobre los objetivos a batir. Todo son problemas pues el delito organizado dispone de informantes dentro de los propios organismos de seguridad. "La desconfianza entre (y dentro) de las instituciones del Gobierno mexicano", es uno de los principales problemas, subraya el cable de Pascual, que alude al arduo reto asumido por la Administraci¨®n mexicana.
El Ministerio de Defensa, por ejemplo, ha constituido unidades de inteligencia sobre los capos de la droga con informaci¨®n y an¨¢lisis que no comparte con los destacamentos castrenses establecidos sobre el terreno en Ciudad Ju¨¢rez y otras poblaciones. Los pelotones locales suelen actuar avisados por alg¨²n chivatazo, sin servicios de inteligencia profesionalizados, y se acercan al lugar se?alado pr¨¢cticamente a ciegas. Las unidades de inteligencia del Ej¨¦rcito sospechan que comandantes domiciliados en los feudos de las mafias sirven a los narcos a cambio de fuertes sumas
La Fiscal¨ªa General y el Ministerio del Interior tambi¨¦n dudan de la probidad de su gente en varios estados. "No hay general que resista un ca?onazo de 50.000 pesos", suele decirse en M¨¦xico y otros pa¨ªses latinoamericanos. La corrupci¨®n es tal que el ex jefe de la Seguridad de Ciudad Ju¨¢rez fue detenido en Tejas con una tonelada de marihuana en su poder, seg¨²n revel¨® el presidente Calder¨®n en otra reuni¨®n. Tres meses despu¨¦s del env¨ªo al Departamento de Estado del informe diplom¨¢tico sobre el an¨¢rquico funcionamiento de los servicios de inteligencia, Calder¨®n solicit¨® ayuda a la secretaria de Seguridad Interior norteamericana, Janet Napolitano (cable 249280) , para poner orden en Ciudad Ju¨¢rez, con un mill¨®n y medio de habitantes, ciudad fronteriza convertida en emblema del delito .
El caso de Ciudad Ju¨¢rez
Concretamente pidi¨® la entrada en liza del Centro de Inteligencia de El Paso (EPIC), poblaci¨®n norteamericana situada frente a Ciudad Ju¨¢rez, al otro lado del R¨ªo Bravo. Napolitano respondi¨® que el EPIC pod¨ªa identificar los objetivos, pero el despliegue militar y policial, "capaz de supervisar todos los bloques de viviendas" deb¨ªa corresponder a M¨¦xico. Durante esa reuni¨®n, el presidente reconoci¨® que el cartel de Ju¨¢rez controlaba la ciudad, pero el cartel de Sinaloa lleg¨® m¨¢s tarde reclamando su parte, lo que condujo a cruentos choques entre las bandas y al reclutamiento de sicarios. Calder¨®n, en su encuentro con legisladores de EE UU relacionados con temas de inteligencia y armamento, reconoci¨® que los arsenales del narcotr¨¢fico son poderosos: en s¨®lo dos a?os, entre 2007 y 2009, fueron incautadas 15.000 armas, incluidos lanzamisiles, fusiles de asalto AK-47 rifles Barrets, para francotiradores, de 50 mil¨ªmetros, as¨ª como otras de grueso calibre. Los carteles las usan para enfrentarse a los Gobiernos locales, intimidar a los polic¨ªas con su gran capacidad de fuego, y combatir a las bandas rivales. En algunos casos, usaron equipos de visi¨®n nocturna y material similar al empleado por el ej¨¦rcito de EE UU.
La corrupci¨®n complica gravemente el compromiso personal confesado por Calder¨®n en sus entrevistas con autoridades norteamericanas: acabar su gobierno "dejando atr¨¢s una polic¨ªa, una marina, un ej¨¦rcito y una fiscal¨ªa general limpia y cre¨ªble. Pero para eso necesita el apoyo de las autoridades locales y gobernadores, y no todos est¨¢n igual de comprometidos".
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