Sarkozy sobre T¨²nez: "No fuimos capaces de ver su desesperanza"
La postura de Francia fue muy criticada por la oposici¨®n y por muchos disidentes tunecinos cuando pidi¨® enviar polic¨ªas para controlar las manifestaciones antes del derrocamiento de Ben Ali
Nicolas Sarkozy, presidente de la Rep¨²blica francesa, ha hablado hoy por primera vez de la revuelta tunecina. Y ha disculpado la reserva, el silencio y el apoyo que su Gobierno otorg¨® al r¨¦gimen dictatorial de Ben Ali hasta su ¨²ltimo momento.
El jefe de Estado de Francia - primer socio econ¨®mico de T¨²nez y antigua metr¨®poli- asegur¨® que precisamente este pasado colonial le ata en cierto sentido las manos: "La potencia colonial es siempre ileg¨ªtima para pronunciar un juicio sobre los asuntos de la ex colonia. As¨ª que yo reivindico una cierta reserva sobre esto. No quiero que la postura de Francia pueda asimilarse con la de un pa¨ªs que conserva ciertos reflejos coloniales".
Con todo, el presidente franc¨¦s reconoci¨® haber subestimado el grado de descontento del pueblo tunecino: "Detr¨¢s de la emancipaci¨®n de las mujeres, del esfuerzo en educaci¨®n y de formaci¨®n, del dinamismo econ¨®mico, lat¨ªa una desesperanza, un sufrimiento y un sentimiento de ahogo que, hay que reconocerlo, no fuimos capaces de apreciar en su justa medida".
La postura de Francia, muy criticada por la oposici¨®n y por muchos disidentes tunecinos, qued¨® marcada especialmente cuando la ministra de Asuntos Exteriores, Mich¨¨lle Alliot-Marie, tres d¨ªas antes deque Ben Ali fuera derrocado , propuso, en el Parlamento, enviar polic¨ªas a T¨²nez a fin de que mostraran a los agentes tunecinos "su buen hacer" a la hora de controlar manifestaciones.
Sarkozy, en una multitudinaria, infrecuente y solemne rueda de prensa en el El¨ªseo (m¨¢s de 300 periodistas y todo el cuerpo diplom¨¢tico) respald¨® hoy a su ministra, que se encontraba presente en la sala: "Ella s¨®lo quer¨ªa evitar dramas, no posicionarse contra los manifestantes". Luego record¨®, para contrarrestar las cr¨ªticas que se le han hecho por su excesiva cercan¨ªa al r¨¦gimen de Ben Al¨ª, que "toda la oposici¨®n tunecina vive en territorio franc¨¦s".
El presidente franc¨¦s habl¨® tambi¨¦n de los dos rehenes franceses que murieron en Mali el pasado siete de enero mientras las fuerzas especiales francesas trataban de liberarles, tras haber sido secuestrados en un restaurante de Niamey (N¨ªger). "No murieron. Fueron cobardemente asesinados. El helic¨®ptero franc¨¦s no fue el primer en disparar. La decisi¨®n que tom¨¦ de tratar de liberarlos era la que hab¨ªa que tomar". Con referencia al jefe de Al Qaeda, Bin Laden, que el viernes pasado amenaz¨® directamente a Francia en un mensaje de audio, asegur¨®, secamente: "Yo no comento lo que dice ese se?or ni de cerca ni de lejos".
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