Akhenaton vuelve al hogar

La revuelta egipcia no deja de sumar historias. Uno se sienta en un caf¨¦ o entra en la tienda de ultramarinos de la esquina y todo el mundo tiene algo que contar sobre su revoluci¨®n. Muchas son tristes (el ministerio de Salud ha confirmado ya 365 muertes sin contar las de los polic¨ªas), y otras m¨¢s felices. Hace unos d¨ªas se anunciaba que varias piezas de valor incalculable hab¨ªan sido robadas del Museo Egipcio de Antig¨¹edades. Apenas 48 horas m¨¢s tarde se desvelaba que algunas hab¨ªan aparecido en el jard¨ªn del propio museo. Alguien las perdi¨® en una huida apresurada o tal vez no supo reconocer su val¨ªa -recuerden que el principal saqueo se produjo en la tienda del museo donde las relucientes r¨¦plicas debieron resultar m¨¢s apetecibles y valiosas a los salteadores que las originales-.

Hoy la noticia es la devoluci¨®n de una de las piezas supuestamente robadas del museo, por uno de los manifestantes de la plaza de Tahrir. Tiene 16 a?os y encontr¨® a Akhenaton, en forma de piedra caliza de siete cent¨ªmetros, corona y actitud oferente, bellamente policromado sobre una base de alabastro, detr¨¢s de un contenedor de basura.

El Ministerio de Estado para los Asuntos de las Antig¨¹edades ha precisado que un profesor de la Universidad Americana en El Cairo (AUC) entreg¨® la estatua del fara¨®n Akhenat¨®n (1361-1352 a.C) a este departamento despu¨¦s de que su sobrino la encontrara. Cuando el joven lleg¨® a casa y le mostr¨® el hallazgo a su madre ¨¦sta se puso en contacto con su hermano, el doctor Sabry Abdel Rahman, que trabaja como profesor en la AUC. Anoche la pieza fue devuelta a un comit¨¦ de representantes del museo, al parecer intacta.

Este comit¨¦, encabezado por el director del museo, el doctor Tarek El-Awady, confirm¨® la autenticidad de la pieza. ?ste la puso en manos de los conservadores del centro para que junto a la mesa de ofrendas que forma parte de la estatua y que hab¨ªa sido encontrada por separado en el interior del edificio, sean restauradas y restituidas cuanto antes a la galler¨ªa de Amarna, una de las joyas de la exposici¨®n permanente que recorre la vida y tradici¨®n simb¨®lica del fara¨®n.

Akhenaton estuvo casado con la legendaria Nefertiti y protagoniz¨® una de las ¨¦pocas m¨¢s asombrosas del pa¨ªs de los faraones. Durante el per¨ªodo de Amarna, en la XVIII dinast¨ªa, se impulsaron reformas radicales en la sociedad egipcia, y se convirti¨® al dios At¨®n en la ¨²nica deidad del culto oficial del Estado.

Con la recuperaci¨®n de esta escultura ya son cuatro las piezas devueltas al museo, del que ocho antig¨¹edades fueron robadas durante las protestas, que comenzaron el pasado 25 de enero y terminaron el viernes pasado con la renuncia de Mubarak.

Tambi¨¦n la zona monumental de Saqara, 25 kil¨®metros al sur de El Cairo, fue blanco de actos de pillaje, ya que varios ladrones robaron una puerta falsa y algunas partes de la tumba antigua de Hotep Ta, que no estaba abierta a las visitas.

Los ladrones irrumpieron en otra tumba en la zona y robaron parte de su puerta falsa. Adem¨¢s, rompieron las cerraduras de varios almacenes de antig¨¹edades en esta localidad, indica el comunicado, que precisa que las Fuerzas Armadas han podido detener a algunos ladrones cuando irrump¨ªan en tumbas.