Cuatro ONG denuncian que Espa?a incumpli¨® la ley en la venta de armas a los pa¨ªses con revueltas
La coalici¨®n Armas bajo Control afirma que el Gobierno espa?ol autoriz¨®, seg¨²n datos del primer semestre de 2010, la exportaci¨®n de armamento contraviniendo la Ley 53/2007
Con o sin revueltas de por medio, han matizado las cinco organizaciones de la coalici¨®n Armas bajo Control (Amnist¨ªa Internacional, Greenpeace, Fundaci¨® per la Pau e Interm¨®n Oxfam), el Gobierno espa?ol ha exportado armamento incumpliendo la ley. Y lo han matizado as¨ª -la denuncia no solo guarda relaci¨®n con las protestas en el mundo isl¨¢mico-porque los ¨²ltimos datos hechos p¨²blicos por el Ejecutivo corresponden al primer semestre de 2010, periodo este en el que la ola de cambio en los pa¨ªses del Norte de ?frica y Oriente Pr¨®ximo no hab¨ªa asomado todav¨ªa la cabeza. "Se ha vendido a clientes que son habituales, pero que est¨¢n fuera de la ley" ha explicado al respecto Jes¨²s N¨²?ez, codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acci¨®n Humanitaria (IECAH), organismo responsable de elaborar el informe para la coalici¨®n de ONG. "No deb¨ªan haberse autorizado ni realizado las ventas" ha proseguido N¨²?ez echando mano de la Ley 53/2007 de Comercio de Armas que determina en qu¨¦ condiciones se debe exportar material de defensa y de doble uso. "El problema no es haber vendido armas a Libia sino a esta Libia".
El art¨ªculo 8 de la citada norma rechaza la exportaci¨®n de armamento que pueda ser empleado "en acciones que perturben la paz, la estabilidad o la seguridad (...), puedan exacerbar tensiones o conflictos latentes (...), con fines de represi¨®n interna o en situaci¨®n de violaci¨®n de derechos humanos". La alianza Armas bajo Control ha se?alado que, siguiendo al rengl¨®n la ley, el Gobierno no debi¨® dar luz verde el pasado a?o a la venta de armas a los pa¨ªses de Oriente Pr¨®ximo y Norte de ?frica sobre los que pesan acusaciones de "violaciones de los derechos humanos".
Seg¨²n los datos manejados por esta coalici¨®n a partir de las estad¨ªsticas del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, de los pa¨ªses ubicados en la regi¨®n envuelta en la ola de protestas, precisamente Libia se lleva la palma con unas exportaciones realizadas de 6.926.300 euros (1.000 gafas de visi¨®n nocturna y 301 accesorios para esas gafas). Una partida, no obstante, sujeta a revisi¨®n tras abrir el departamento que dirige Miguel Sebasti¨¢n un expediente de revocaci¨®n. Estas cuatro ONG han calificado esta medida como "positiva", pero han solicitado al Gobierno, en boca de Esteban Beltr¨¢n, de Amnist¨ªa Internacional, que la "confirmen" y aseguren que no se va a vender m¨¢s armas a este pa¨ªs.
De acuerdo de nuevo a los datos del primer semestre de 2010, a Libia le sigue Arab¨ªa Saud¨ª, que recibi¨® material de defensa por valor de 1,5 millones de euros; Marruecos, con 1,1 millones de euros; T¨²nez, con 778.480 euros, y Egipto, con ventas por valor de 464.669 euros. "Espa?a tiene derecho a defenderse y, por tanto, a tener una industria de defensa" ha expresado Jes¨²s N¨²?ez. "Pero a las empresas de armamento les deb¨ªa sonar la ley 53/2007 de Comercio de Armas". Seg¨²n el an¨¢lisis del codirector del IECAH, la crisis econ¨®mica ha empujado a Espa?a a "caer en la promoci¨®n de la venta" de armas hacia el exterior. Y es ah¨ª donde, seg¨²n N¨²?ez, la regi¨®n del Magreb es "un escenario habitual" de este comercio.
Jordi Armadans, de Fundaci¨® per la Pau, ha aprovechado la rueda de prensa para aclarar que "el esp¨ªritu" de la ley (tambi¨¦n de la posici¨®n com¨²n de la UE 2008/944/PESC) que regula la exportaci¨®n de armas pretende "prevenir que no se empeore la situaci¨®n" del pa¨ªs comprador, argumento este que habr¨ªa servido -coinciden las cuatroONG-para frenar las ventas hacia los pa¨ªses inmersos hoy en revueltas antes incluso de su estallido. Industria, en una nota difundida durante la tarde, ha manifestado que las exportaciones que realiza Espa?a "se han ce?ido a los estipulado en la normativa de la UE". El comunicado afirma que desde el inicio de las revueltas "no se ha aprobado ninguna nueva solicitud" de los pa¨ªses involucrados. En este sentido, la coalici¨®n ha alertado de la "excesiva acumulaci¨®n y uso de una amplia gama de armas convencionales" que deriva de ventas ya realizadas.
Seg¨²n datos del Instituto de Investigaci¨®n para la Paz de Estocolmo (SIPRI), Espa?a es el sexto suministrador mundial de armas convencionales. El balance de exportaciones de 2009, ¨²ltimo a?o con datos totales ofrecidos por el Ministerio, arroj¨® un incremento del 44% en las ventas respecto al a?o anterior.
Art¨ªculo 8. Denegaci¨®n de las solicitudes de autorizaci¨®n y suspensi¨®n y revocaci¨®n de las autorizaciones
1. Las solicitudes de autorizaci¨®n ser¨¢n denegadas y las autorizaciones, a las que se refiere el art¨ªculo 4, suspendidas o revocadas, en los siguientes supuestos:
a. Cuando existan indicios racionales de que el material de defensa, el otro material o los productos y tecnolog¨ªas de doble uso puedan ser empleados en acciones que perturben la paz, la estabilidad o la seguridad en un ¨¢mbito mundial o regional, puedan exacerbar tensiones o conflictos latentes, puedan ser utilizados de manera contraria al respeto debido y la dignidad inherente al ser humano, con fines de represi¨®n interna o en situaciones de violaci¨®n de derechos humanos, tengan como destino pa¨ªses con evidencia de desv¨ªos de materiales transferidos o puedan vulnerar los compromisos internacionales contra¨ªdos por Espa?a. Para determinar la existencia de estos indicios racionales se tendr¨¢n en cuenta los informes sobre transferencias de material de defensa y destino final de estas operaciones que sean emitidos por organismos internacionales en los que participe Espa?a, los informes de los ¨®rganos de derechos humanos y otros organismos de Naciones Unidas, la informaci¨®n facilitada por organizaciones y centros de investigaci¨®n de reconocido prestigio en el ¨¢mbito del desarrollo, el desarme y los derechos humanos, as¨ª como las mejores pr¨¢cticas m¨¢s actualizadas descritas en la Gu¨ªa del Usuario del C¨®digo de Conducta de la Uni¨®n Europea en materia de exportaci¨®n de armas.
b. Cuando se contravengan los intereses generales de la defensa nacional y de la pol¨ªtica exterior del Estado.
c. Cuando vulneren las directrices acordadas en el seno de la Uni¨®n Europea, en particular los criterios del C¨®digo de Conducta, de 8 de junio de 1998, en materia de exportaci¨®n de armas, y los criterios adoptados por la OSCE en el documento sobre Armas Peque?as y Ligeras de 24 de noviembre de 2000, y otras disposiciones internacionales relevantes de las que Espa?a sea signataria. Para la aplicaci¨®n de los criterios del C¨®digo de Conducta se atender¨¢ a las mejores pr¨¢cticas m¨¢s actualizadas descritas en la Gu¨ªa del Usuario.
d. Cuando se contravengan las limitaciones que se derivan del Derecho internacional, como la necesidad de respetar los embargos decretados por Naciones Unidas y la Uni¨®n Europea, entre otras.
2. En todo caso, las referidas autorizaciones deber¨¢n ser revocadas si se incumplieran las condiciones a las que estuvieran subordinadas y que motivaron su concesi¨®n o cuando hubiere existido omisi¨®n o falseamiento de datos por parte del solicitante.
3. La revocaci¨®n o suspensi¨®n de las autorizaciones requerir¨¢ la tramitaci¨®n del oportuno expediente administrativo, en el que se dar¨¢ audiencia al interesado y que se ajustar¨¢ a lo establecido en la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de R¨¦gimen Jur¨ªdico de las Administraciones P¨²blicas y del Procedimiento Administrativo Com¨²n y las normas de rango inferior que la desarrollen en esta materia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.