Sarkozy ser¨¢ el primer jefe de Estado extranjero en visitar Jap¨®n tras el se¨ªsmo
Dos t¨¦cnicos franceses en energ¨ªa nuclear han acudido en ayuda de sus colegas japoneses para calibrar el peligro de Fukushima
Nicolas Sarkozy visitar¨¢ Jap¨®n el jueves, convirti¨¦ndose as¨ª en el primer jefe de Estado extranjero que pone el pie en este pa¨ªs despu¨¦s de que el pasado d¨ªa 11 un terremoto y un tsunami sacudieran el norte del pa¨ªs. De cualquier forma, el presidente de la rep¨²blica francesa, por medio de un comunicado, anuncia su visita cuando la siniestrada central nuclear de Fukushima a¨²n sigue apareciendo en todos los telediarios envuelta en humo y el Gobierno japon¨¦s est¨¢ en alerta m¨¢xima por la contaminaci¨®n radioactiva que emana de sus reactores. De hecho, dos t¨¦cnicos franceses expertos en tecnolog¨ªa nuclear han viajado ya hacia Jap¨®n, a petici¨®n de este pa¨ªs, para colaborar con los especialistas japoneses en la soluci¨®n de la crisis, seg¨²n explic¨® esta ma?ana la ministra de Medio Ambiente, Nathalie Kosciusko-Morizet. Estos dos especialistas, uno del grupo nuclear franc¨¦s Areva y otro del Comisariado de la Energ¨ªa At¨®mica, ayudar¨¢n a sus colegas japoneses en las labores de bombeo y de tratamiento del agua radioactiva, seg¨²n precis¨® la ministra.
Sarkozy visitar¨¢ Jap¨®n despu¨¦s de asistir en China ma?ana y el jueves a reuniones econ¨®micas relacionadas con su presidencia del G-8 y del G-20. Estar¨¢ poco tiempo en la isla. Y ser¨¢ un viaje encaminado, seg¨²n se asegura en El El¨ªseo, a "testimoniar la solidaridad de Francia con el pueblo japon¨¦s".
Pero tambi¨¦n ser¨¢ la visita de un jefe de Estado cuyo pa¨ªs se encuentra involucrado hasta el fondo en la energ¨ªa nuclear, cuyos grupos industriales punteros exportan tecnolog¨ªa nuclear a todo el mundo, desde India a Reino Unido y desde China a Italia. En Francia, adem¨¢s, hay 58 reactores at¨®micos, lo que la convierte en el segundo pa¨ªs del planeta en n¨²mero de plantas (solo superado por Estados Unidos). El 80% de la energ¨ªa el¨¦ctrica que consumen los franceses procede de centrales nucleares. Esto acarrea que la factura sea m¨¢s barata que la media de los pa¨ªses europeos.
La crisis de Jap¨®n ha generado un debate en Francia pero los t¨¦rminos no son, como en otros lugares "?es buena la energ¨ªa nuclear?" o "?es peligrosa?". En Francia, la pregunta es, simplemente: "?Podemos prescindir de ella? ?Cu¨¢ndo?". Sarkozy asegur¨® que iba a seguir apostando por ese tipo de energ¨ªa pocos d¨ªas despu¨¦s del desastre de Fukushima. Y el ministro de Asuntos Exteriores, Alain Jupp¨¦, fue muy claro al ser preguntado al respecto: "Decir que podemos abandonar la energ¨ªa nuclear en los pr¨®ximos decenios es contar historias". Tampoco el Partido Socialista franc¨¦s (PS) propugna una retirada fulminante de lo nuclear aunque apunta a una transici¨®n hacia otro tipo de recursos.
Solo los ecologistas se han mostrado completamente contrarios y han solicitado un refer¨¦ndum. Es m¨¢s: en las ¨²ltimas elecciones locales en Francia, cuya segunda vuelta se celebr¨® el domingo, la energ¨ªa at¨®mica no fue ni de lejos un tema pol¨¦mico de campa?a, como ha pasado en Alemania. Y nadie ha atribuido la derrota de Sarkozy a su apuesta nuclear.
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