Detenido el ex secretario de Estado de Sarkozy acusado de violaci¨®n y agresi¨®n sexual
El entorno de Tron se ha cuidado de desacreditar a las denunciantes y de asegurar que todo obedece a venganzas personales
El ex secretario de Estado (con rango de ministro) de Funci¨®n P¨²blica franc¨¦s y alcalde de Draveil (Essonne), George Tron, ha sido detenido para ser interrogado en las dependencias de la Polic¨ªa Judicial de Versalles, acusado de violaci¨®n y agresiones sexuales a tres ex empleadas municipales. En esas dependencias pas¨® la noche. Las denuncias fueron interpuestas en mayo, pocas semanas despu¨¦s de que la polic¨ªa neoyorquina detuviera en el aeropuerto de Nueva York al pol¨ªtico socialista franc¨¦s y director general del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn. Seg¨²n han relatado dos de las mujeres, el caso DSK les anim¨® a destapar el, a su juicio, caso Tron. Presionado por Sarkozy y el partido de ambos, la Uni¨®n por un Movimiento Popular (UMP), de centro derecha, en una Francia que asist¨ªa estupefacta a la carbonizaci¨®n instant¨¢nea de Strauss-Kahn, Tron, dimiti¨® el 29 de mayo de su cargo de Secretario de Estado. Seg¨²n ¨¦l explic¨®, lo hac¨ªa para defenderse mejor de unas acusaciones "infundadas y fabulosas".
Tron es conocido en la Asamblea Nacional francesa por su amor a los masajes terap¨¦uticos de pies. De hecho, sus compa?eros diputados le conocen como "el masajeador chino". A juicio de las tres mujeres que le han denunciado, todo empezaba, precisamente, por ah¨ª, por los masajes de pies, que pronto, seg¨²n estas mujeres, se convert¨ªan en otra cosa.
Eva Loubrieu es una de estas mujeres. Tiene 36 a?os, y junto a Virginie Faux, de 32, relat¨® hace algunas semanas su caso, ocurrido en 2007, a la revista Paris-Match. "Me llamaba a su despacho, me obligaba a sentarme enfrente de ¨¦l y comenzaba a masajearme los pies. Despu¨¦s pasaba a acariciarme la pierna, el pecho, la espalda... Yo me dejaba hacer, petrificada. De hecho, el conoc¨ªa tus fragilidades, tus debilidades, y te pon¨ªa en una situaci¨®n en el que el "no" no es posible". A estas caricias, seg¨²n explic¨® esta mujer a la revista citada, se sucedieron tocamientos y penetraciones digitales, hecho que en Francia, si no es consentido, est¨¢ considerado como violaci¨®n. Virginia Faux sufri¨®, seg¨²n su testimonio, un hostigamiento sexual id¨¦ntico. "Estaba completamente paralizada. No fue violento (...) pens¨¦ que iba a morir de un ataque cardiaco (...) no recuerdo ni siquiera haber cogido el coche luego. Me sent¨ªa despreciada, y me hund¨ª. Me dije que hab¨ªa que apretar los dientes y continuar", relata.
Esta mujer, contact¨® en 2010 con la Asociaci¨®n Europea contra la Violencia Cometida a las Mujeres en el Trabajo, meses despu¨¦s de una tentativa de suicidio. Dos juristas de esa asociaci¨®n la escucharon durante dos horas y media. "Su relato era completamente cre¨ªble", explica al semanario L'express Laetitia Bernard, miembro de esta asociaci¨®n. All¨ª conoci¨® a Eva Loubrieu.
El entorno de Tron se ha cuidado de desacreditar a estas dos mujeres y de asegurar, como sostiene el ex secretario de Estado, que todo obedece a venganzas personales debido a que las dos perdieron su trabajo en el Ayuntamiento de Draveil. A Faux la describen como una persona "en permanente estado de embriaguez", propensa a montar espect¨¢culos obscenos en fiestas. De Loubrieu aseguran que fue echada de su trabajo tras descubrirse que utiliz¨® 700 euros de la caja municipal para comprarse muebles en Ikea en febrero de 2009. El abogado de Tron, Olivier Schenerb, aseguraba ayer que la detenci¨®n e interrogatorio de su defendido "le permitir¨¢ tomar la palabra y devolver golpe por golpe".
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