Al menos 47 muertos en un atentado suicida en Pakist¨¢n

Al menos 47 personas han muerto y otras 70 han resultado heridas en un atentado suicida registrado en una mezquita de la regi¨®n tribal paquistan¨ª de Khyber, seg¨²n informan las autoridades locales. La explosi¨®n se ha producido durante el rezo del viernes en un templo de la zona de Jamrud, en las afueras de la ciudad de Peshawar y a pocos kil¨®metros de la frontera afgana. Se trata de una regi¨®n especialmente azotada por los ataques de los talibanes aliados a Al Qaeda.

Centenares de personas han acudido para la oraci¨®n a la mezquita, cuyo techo se ha derrumbado tras la deflagraci¨®n, que se produjo a las 8.45 hora espa?ola. Ante la escasez de centros m¨¦dicos en la zona, muchos de los heridos han sido trasladados a Peshawar, capital de la provincia. En Khyber se halla el principal paso terrestre que une Pakist¨¢n con Afganist¨¢n y por el que transita el grueso de los suministros para las fuerzas internacionales desplegadas en el pa¨ªs vecino.

Seg¨²n fuentes locales, un suicida ha irrumpido en la mezquita de Al Medina a trav¨¦s de una ventana durante la oraci¨®n e hizo estallar la carga explosiva que portaba. El canal televisivo Express asegura que el atacante ten¨ªa entre 15 y 16 a?os y ha recordado que el atentado tiene lugar d¨ªas despu¨¦s de que las tribus de Jamrud negaran la entrada a los talibanes. En este sentido, el ataque pudiera deberse a una venganza de los islamistas radicales contra las tribus de la zona.

A causa de su valor estrat¨¦gico, el ¨¢rea est¨¢ plagada de grupos talibanes y bandas criminales que luchan por imponerse y lucrarse del comercio. Esta zona es tambi¨¦n escenario de tensiones sectarias y de guerras intestinas entre diferentes organizaciones islamistas radicales. A ello se suma que, desde hace unas semanas, el Ej¨¦rcito pakistan¨ª lleva a cabo una operaci¨®n contra los integristas en la vecina regi¨®n tribal de Kurram. Hasta la fecha, la estrategia de las Fuerzas Armadas es combatir a determinados grupos y atraerse el favor de otros para doblegar as¨ª los talibanes, que pasan con frecuencia de un lado al otro de la frontera.

Estados Unidos, por su parte, presiona a Pakist¨¢n para que elimine la amenaza que suponen la red Haqqani y otros grupos integristas locales para sus tropas destacadas en Afganist¨¢n, aunque Islamabad parece reticente a comprometerse plenamente en la lucha antiterrorista. Las zonas tribales de la provincia de Wazirist¨¢n, fronteriza con Afganistan, son el principal feudo de los talibanes en Pakist¨¢n, pero el Ej¨¦rcito sigue sin lanzar all¨ª una ofensiva, en particular en la demarcaci¨®n norte?a, la que est¨¢ m¨¢s controlada por los insurgentes. La colaboraci¨®n en materia antiterrorista entre Washington e Islamabad sufri¨® un varapalo tras la operaci¨®n de EE UU en territorio paquistan¨ª que acab¨® con la vida de Osama Bin Laden el pasado 2 de mayo.

Pakist¨¢n es uno de los pa¨ªses m¨¢s azotado por el terrorismo integrista ya que el movimiento talib¨¢n ha puesto de mira en los ¨²ltimos a?os al Gobierno de Islamabad, por su alianza con EE UU. Desde 2007 han muerto m¨¢s de 4500 personas en el pa¨ªs por atentados de islamistas radicales y grupos terroristas vinculados a la red Al Qaeda.