Wikileaks anuncia la publicaci¨®n de todos sus cables diplom¨¢ticos sin proteger a sus fuentes

Wikileaks ha anunciado la publicaci¨®n de la totalidad de los 250.000 cables diplom¨¢ticos a su disposici¨®n sin ocultar la identidad de las fuentes. Cinco medios de comunicaci¨®n internacionales -The New York Times, The Guardian, Le Monde, Der Spiegel y El PA?S- condenan la decisi¨®n de Wikileaks de publicar estos cables por considerar que la revelaci¨®n de la identidad de los informantes podr¨ªa poner en peligro a las citadas fuentes. Reporteros sin Fronteras ha decidido retirar temporalmente su apoyo a la organizaci¨®n tras conocer las noticias de la publicaci¨®n.

Los archivos que ahora se publican contienen m¨¢s de un millar de cables en los que se identifica a individuos que figuran bajo el ep¨ªgrafe de "estrictamente protegidos", con el que Washington designa aquellos documentos cuya publicaci¨®n podr¨ªa poner en peligro a las personas nombradas. En los cables aparecen tambi¨¦n nombres de activistas y de personas perseguidas por sus Gobiernos.

Wikileaks ha lanzado una consulta a trav¨¦s de Twitter en la que pregunta a los internautas acerca de sus decisi¨®n de hacer p¨²blicos los documentos.

"Lamentamos la decisi¨®n tomada por Wikileaks de publicar los cables sin editar del Departamento de Estado de Estados Unidos, que podr¨ªan poner en peligro a las fuentes citadas", indica el comunicado conjunto que suscriben los cinco medios.

"Nuestras relaciones previas con Wikileaks se desarrollaron bajo la premisa de que solo publicar¨ªamos cables sujetos a una edici¨®n conjunta e integral y a un proceso de autorizaci¨®n. Continuaremos defendiendo nuestros proyectos de colaboraci¨®n anteriores. No podemos sin embargo defender la publicaci¨®n innecesaria de la base de datos al completo. Es m¨¢s, la condenamos conjuntamente", a?ade el comunicado, que concluye que "la decisi¨®n de publicarlos le corresponde ¨²nica y exclusivamente a Julian Assange. ?l debe responsabilizarse de esa decisi¨®n".

Reporteros sin Fronteras ha anunciado que cancelar¨¢ de forma temporal la p¨¢gina web con la que aseguraba la supervivencia del contenido de Wikileaks en caso de que la web de filtraciones sufriera un ciberataque. "Por un lado, algunos de los nuevos cables no han sido editados y muestran los nombres de informantes de varios pa¨ªses, incluidos Israel, Jordania, Ir¨¢n y Afganist¨¢n. A pesar de que no se ha podido demostrar que hasta el momento se haya puesto en peligro ninguna vida, las consecuencias que podr¨ªa tener para los informantes -represalias laborales, ataques f¨ªsicos y otras- no pueden ser ignoradas", reza un comunicado que publica Reporteros sin Fronteras.

La p¨¢gina de filtraciones de Julian Assange ya public¨® la semana pasada decenas de miles de cables diplom¨¢ticos en los que, a diferencia de anteriores ocasiones, la organizaci¨®n no ocult¨® el nombre de los informantes. Los Gobiernos de Estados Unidos y Australia criticaron duramente la decisi¨®n de Wikileaks por considerar que puede poner en peligro la seguridad de los informantes citados.

Wikileaks explic¨® en un comunicado que decidi¨® publicar los cables una vez que la clave que permit¨ªa acceder a los documentos encriptados hab¨ªa sido divulgada. Wikileaks acusa en concreto al diario The Guardian de desvelarla en un libro publicado en febrero pasado sobre la organizaci¨®n de Assange. El diario brit¨¢nico ha rechazado cualquier tipo de responsabilidad en relaci¨®n con la publicaci¨®n de los cables ¨ªntegros. "Wikileaks debe responsabilizarse de sus acciones en lugar de tratar de culpar a otros", ha indicado en un comunicado. David Leigh, periodista de The Guardian y autor del libro titulado Wikileaks y Assange, ha asegurado que el propio Assange le asegur¨® que la clave que le proporcion¨® funcionar¨ªa solo durante un breve periodo de tiempo y que, por lo tanto, ya no ser¨ªa v¨¢lida una vez publicado el libro.

El semanario alem¨¢n Der Spiegel sostiene que la puesta a disposici¨®n de la clave al p¨²blico general obedece a una "cadena de errores, descuidos, indiscreciones y confusiones" que, entre otras consecuencias, merman la credibilidad de la p¨¢gina de filtraciones y que podr¨ªan desanimar a futuras gargantas profundas a ofrecer documentos a Wikileaks. Der Spiegel explica que, por ejemplo, voluntarios y defensores de Wikileaks colgaron por equivocaci¨®n una versi¨®n comprimida de la base datos que conten¨ªa los cables diplom¨¢ticos. Open Leak, la web de Daniel Domscheit-Berg, el archirrival de Assange y antiguo portavoz de Wikileaks, divulg¨® tambi¨¦n la v¨ªa para acceder a la informaci¨®n confidencial procedente de las Embajadas, en un intento de desprestigiar a su enemigo.

A finales de noviembre del a?o pasado, Wikileaks comenz¨® a publicar los 251.287 documentos procedentes de las embajadas estadounidenses repartidas por el mundo. La publicaci¨®n se llev¨® a cabo tras acordar con los principales peri¨®dicos internacionales, incluido EL PA?S, que los cables se editar¨ªan con el fin de proteger la identidad de las fuentes. El llamado cablegate es la mayor filtraci¨®n de informaci¨®n confidencial jam¨¢s hecha p¨²blica y permiti¨® a los ciudadanos acercarse al proceso de toma de decisiones mundiales.

Wikileaks fue fundada en 2006 con el objetivo de sacar a la luz los secretos y documentos confidenciales procedentes de Gobiernos y empresas. El soldado estadounidense Bradley Manning est¨¢ acusado de estar detr¨¢s de la filtraci¨®n de los papeles del Departamento de Estado.