Los l¨ªmites de Evo
Las crisis de los ¨²ltimos meses y el conflicto ind¨ªgena pueden hacer tambalear a Morales
![El presidente Evo Morales, el mi¨¦rcoles en La Paz.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/3X444CB5KG76WXX4C47RXUE7K4.jpg?auth=f5f65475c4b4b5518b6219392df8b9b5f3a82f807bad94f92b997d21e1aa6126&width=414)
Hace poco m¨¢s de un mes, el 15 de agosto, cuando se inici¨® la marcha ind¨ªgena convocada en protesta contra la construcci¨®n de una carretera, el presidente Evo Morales dijo: ¡°Cuando se presentan este tipo de problemas, para m¨ª no es nada. Alg¨²n ministro se asusta¡±. Despu¨¦s de que esa marcha fuera reprimida por la polic¨ªa el pasado domingo, la protesta popular creci¨® tanto que quiz¨¢s Evo se haya asustado un poco. Dos d¨ªas m¨¢s tarde, dos ministros renunciaron y se anunci¨® que diez parlamentarios ind¨ªgenas abandonar¨ªan la coalici¨®n del MAS (sin esos parlamentarios Evo perder¨ªa los dos tercios necesarios para aprobar leyes sin debate, como lo ha venido haciendo). No solo eso: en mensaje a la naci¨®n Evo anunci¨® que suspender¨ªa la construcci¨®n de la carretera mientras se hicieran consultas a la poblaci¨®n. Para entonces, el movimiento se siente con la fuerza suficiente para exigir la cancelaci¨®n del proyecto, lo que obligar¨ªa a buscar otra ruta para la carretera.
El estilo autoritario puede gobernar pero no construir un Estado
El conflicto ind¨ªgena ha obligado a Evo a retroceder por segunda vez en menos de un a?o. El pasado diciembre, el gasolinazo ¨Calza del precio de la gasolina para que esta se adecuara a su costo en pa¨ªses lim¨ªtrofres-- fue otra medida que llev¨® a la gente a la calle y asest¨® un golpe duro a la popularidad del presidente (nueve meses despu¨¦s, aun no se ha recuperado: en una encuesta reciente, recibe un 36% de apoyo). Lo novedoso de estas crisis ha sido que la protesta proviene sobre todo de los movimientos sociales afines al partido de gobierno; en el ¨²ltimo caso, el a?adido simb¨®lico es que son ind¨ªgenas quienes dicen no sentirse representados por Evo.
La carretera motivo de la discordia iba a dividir el Territorio Ind¨ªgena y Parque Nacional Isiboro S¨¦cure (TIPNIS), creado en 1990, sin que los pueblos ind¨ªgenas que viven en esa regi¨®n hubieran sido consultados, seg¨²n lo manda la propia Constituci¨®n impulsada por el gobierno de Evo. Para muchos, se cay¨® la m¨¢scara ecologista e indigenista de Evo, mostrando que ¨¦l es, antes que nada, el l¨ªder sindical de los productores de coca del Chapare (los m¨¢s beneficiados con la construcci¨®n de la carretera).
El modelo desarrollista de Evo naufraga en medio de sus contradicciones internas
Las crisis de los ¨²ltimos meses muestran que Evo ha encontrado los l¨ªmites de su poder. Hubo un momento en que su inmenso capital pol¨ªtico le permiti¨® ¡°refundar¡± el pa¨ªs aprobando una nueva Constituci¨®n, arrinconar los deseos de autonom¨ªa de departamentos econ¨®micamente poderosos como Santa Cruz y burlar las leyes a su antojo para desmantelar cualquier intento de oposici¨®n a su gobierno. Y muestra que el estilo autoritario, centralista, bajo el viejo molde del caudillismo latinoamericano, puede gobernar pero no construir un Estado. Sin instituciones s¨®lidas, el caudillo termina siendo v¨ªctima de las mismas fuerzas que lo encumbraron. Evo recibi¨® un Estado en crisis; su carisma, su capacidad de convocatoria, maquillaron esa crisis, pero no la trascendieron. Su discurso etnopopulista de izquierda, adem¨¢s, traz¨® una serie de coordenadas de las que no puede desviarse; se sabe que, tarde o temprano, el gobierno debe dejar de subvencionar la gasolina y aumentar el precio, pero esa medida es vista m¨¢s como de un gobierno neoliberal -las cosas deben costar lo que dice el mercado que cuesten- y no como de uno que se debe al pueblo; se sabe tambi¨¦n que quiz¨¢s se necesiten m¨¢s carreteras para vincular internamente al pa¨ªs, pero ¨¦stas no pueden hacerse sin la venia de las comunidades ind¨ªgenas a las que se les ha prometido autogobierno. As¨ª, el modelo desarrollista de Evo naufraga en medio de sus contradicciones internas.
El TIPNIS traer¨¢ cola. Por lo pronto, la oposici¨®n ha aprovechado para tomar la iniciativa, se ha reinventado como defensora de derechos ind¨ªgenas que antes acept¨® con reticencia, y busca responsables de la decisi¨®n de usar la fuerza para reprimir la marcha (los polic¨ªas dicen que actuaron siguiendo ¨®rdenes de un fiscal, los fiscales dicen que no dijeron nada, el ministro de Gobierno acus¨® a su viceministro, el viceministro dice que no sab¨ªa nada, el presidente dice que de ¨¦l no parti¨® la orden¡). A pesar de eso, la oposici¨®n carece de liderazgo visible. Si ese hecho tranquiliza a Evo, s¨ª deber¨ªan inquietarle los movimientos sociales que lo llevaron al poder; son ellos quienes, ante un sistema institucional que su gobierno ha debilitado, podr¨ªan hacerlo tambalear cualquier rato. De hecho, ya lo est¨¢n haciendo.
Edmundo Paz Sold¨¢n es escritor boliviano.
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