Los kurdos participan en la reforma de la Constituci¨®n en el Parlamento turco
El partido que representa a los kurdos ha abandonado su boicoteo al Legislativo tras las elecciones de junio para intentar influir en la reforma constitucional
Tras cuatro meses de discusiones, un enfrentamiento armado en el sureste del pa¨ªs y semanas de bombardeos a¨¦reos en las monta?as del norte de Irak, el Partido de la Paz y la Democracia (BDP) se ha decidido a ocupar sus 35 esca?os en el Parlamento turco. El BDP, ¨²nica fuerza pol¨ªtica kurda con representaci¨®n en la Asamblea de Turqu¨ªa, anunci¨®, a principios de mes, el fin del boicot al Legislativo. La perspectiva de una nueva Constituci¨®n, que pueda solucionar el conflicto hist¨®rico y ponga fin a la violencia, ha pesado m¨¢s que la inhabilitaci¨®n de los seis diputados decidida a finales de junio por los tribunales.
"Hemos tomado esta decisi¨®n para defender la paz, apoyar a nuestros diputados y hacer realidad las promesas que hemos hecho a aquellos que confiaron en nosotros", explic¨® el copresidente del BDP Selahttin Demirtas al anunciar el fin del boicot parlamentario.
El nuevo curso pol¨ªtico, que comenz¨® el 1 de octubre, se presenta como uno de los m¨¢s trascendentales de la ¨²ltima d¨¦cada. Seg¨²n lo anunciado por el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, se redactar¨¢ una nueva Constituci¨®n que ser¨¢ sometida a refer¨¦ndum popular ¡°a mediados del a?o que viene¡±. Esto deja a los partidos pol¨ªticos y la sociedad civil con escasos nueve meses para buscar un consenso sobre los principios constitucionales que deben ser enmendados.
Para los kurdos, el aspecto principal es abolir el car¨¢cter ¨¦tnico turco que impone la actual Constituci¨®n, espec¨ªficamente el art¨ªculo 66. En ¨¦l se define a los ciudadanos del pa¨ªs como ¡°turcos¡±, lo que deja al margen a los 15 millones de kurdos, as¨ª como a otras minor¨ªas, como la griega, la armenia o circasiana. Los derechos culturales son otras de sus aspiraciones. La ense?anza del kurdo en las escuelas p¨²blicas y el uso de su idioma en los tribunales se encuentran tambi¨¦n entre las principales reivindicaciones.
El Parlamento turco ha extendido por un a?o el permiso al Ej¨¦rcito para atacar al PKK en Irak
Pero la organizaci¨®n del Estado podr¨ªa traer m¨¢s problemas. Turqu¨ªa, a pesar de tener una vez y media la extensi¨®n de Espa?a, es un pa¨ªs fuertemente centralizado. Su capital, Ankara, es el centro de decisi¨®n y desde ah¨ª se pueden incluso destituir a pol¨ªticos sospechosos de violar las leyes, algo muy com¨²n en las alcald¨ªas kurdas del sureste. Muchos turcos son favorables a una ligera descentralizaci¨®n del pa¨ªs. Sin embargo, temen que abrir la mano dispare las ansias de autonom¨ªa de las regiones del sureste. Para los turcos, autorizar la creaci¨®n de un Parlamento regional, como? el BDP reivindica, es una concesi¨®n inaceptable.
¡°La cuesti¨®n kurda es dif¨ªcil de solucionar de forma que los kurdos queden satisfechos y los turcos se sientan c¨®modos¡±, afirma Mustafa Akyol, autor del libro Islam sin Extremos. ¡°Lo que el BDP pide es demasiado para los turcos. Adem¨¢s est¨¢ el tema del terrorismo. Desde el pasado verano mueren civiles a diario en los ataque del PKK. Esto hace que los turcos tengamos menos voluntad para dialogar. Sin duda va a ser el gran reto de la nueva Ley Fundamental¡±, a?ade.
Por su parte,? el Gobierno de Erdogan, al tiempo que tiende la mano a los pol¨ªticos kurdos en el Parlamento, ha comenzado una ofensiva armada con el fin de acabar con aquellos que no se distancien del terrorismo. Este mismo mes, el Parlamento turco extendi¨®, por un a?o m¨¢s, el permiso al Ej¨¦rcito turco para realizar incursiones terrestres sobre las bases de la guerrilla separatista del? Partido de los Trabajadores del Kurdist¨¢n? (PKK) en las monta?as del norte de Irak.
Mientras, dentro del pa¨ªs, la polic¨ªa detiene cada semana a decenas de? personas acusadas de pertenecer a la Uni¨®n de Comunidades Kurdas (KCK), una organizaci¨®n paraguas que engloba al PKK y que busca crear un estado aut¨®nomo en el sureste del pa¨ªs. Sus reivindicaciones van m¨¢s all¨¢ de las del BDP, ya que buscan remplazar las estructuras del Estado central, en materias como educaci¨®n o justicia, por sus propias estructuras paralelas.
La operaci¨®n contra el KCK empez¨® en junio de 2010. En menos de un a?o, el n¨²mero de detenidos asciende a 4.168, seg¨²n los pol¨ªticos kurdos, entre los que se encuentran muchos alcaldes y dirigentes provinciales del BDP. La iniciativa cuenta con el apoyo de ciertos sectores kurdos, que critican que el BDP no se desligue del PKK ni de su l¨ªder, Abdul¨¢ ?calan. Para muchos turcos, como se?ala Mustaf¨¢ Akyol, el BDP es ¡°claramente el brazo pol¨ªtico del PKK¡±.
El BDP tampoco es un bloque uniforme. Algunos de sus miembros criticaron el boicoteo al Parlamento desde su inicio e hicieron presi¨®n para volver a los esca?os. Adem¨¢s, el partido conden¨® oficialmente uno de los ataques de la guerrilla a un cuartel de la Gendarmer¨ªa en el que murieron cuatro mujeres. A su vez el Gobierno se enfrenta a la disyuntiva de que si no se escucha a los kurdos y sigue llenando las c¨¢rceles de pol¨ªticos nacionalistas, Turqu¨ªa podr¨ªa perder una oportunidad para poner fin a la lucha armada.
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